Albanese, el laborista que busca la reelección en Australia en plena guerra comercial

Bangkok, 28 mar (EFE).- Con un carácter tranquilo y un tono habitualmente sosegado, el primer ministro de Australia, Anthony Albanese, buscará el 3 de mayo la reelección en unos comicios que se prevén disputados y que se celebran en medio de una guerra comercial y con la inflación como principal enemigo para el líder laborista.

«Albo», como se le conoce de manera afectiva, anunció este viernes la fecha de los comicios que llegan tres años después de su victoria en los comicios de mayo de 2022 cuando arrebató el Gobierno a la coalición conservadora, tras una década en el poder.

En estos tres años, el Ejecutivo de Albanese ha cumplido varios de sus compromisos sociales como aumentar la financiación del cuidado infantil y elevar los salarios de trabajadores de bajos ingresos, pero estas medidas se han visto neutralizadas por el aumento de la inflación.

El líder del Partido Laborista, de 62 años, recibió su mayor golpe político con el fracaso del referendo que él mismo impulsó y que pretendía ampliar la representación en política de los pueblos indígenas.

Su talante negociador, le ha ayudó sin embargo a reconducir con éxito durante la primera parte de su mandato la tensa relación que Australia mantenía con China durante el Ejecutivo anterior, y en el ámbito internacional se ha mostrado férreo en el apoyo a Ucrania frente a la invasión de Rusia.

La guerra en Gaza entre Israel y el grupo terrorista Hamás ha abierto fisuras en la sociedad australiana debido al aumento, según datos del Gobierno, de los delitos de odio contra la comunidad judía y musulmana, y por la que el dirigente sacó su perfil más pragmático al nombrar a dos representantes especiales para buscar solución a esta brecha social.

Habrá que esperar a los actos de campaña para comprobar si el candidato laborista, que rebajó notablemente su republicanismo mientras gobernaba, repite su compromiso de celebrar una consulta popular sobre la monarquía si logra revalidar su puesto por un mandato de tres años.

A diferencia de otros dirigentes laboristas, «Albo» tuvo una lenta carrera política hasta que alcanzó la cima, siendo nombrado diputado por primera vez a los 33 años.

Entre 2007 y 2013, año en el que su partido perdió el poder, Albanese ocupó el ministerio de Infraestructura y Transporte y ascendió hasta ser nombrado viceprimer ministro meses antes de que los laboristas cedieran el poder. No obstante, no fue hasta mayo de 2019, cuando Albanese lograra encabezar al Partido Laborista.

El rival de Albanese será Peter Dutton, líder de la coalición liberal-nacional, descrito por analistas como un político conservador del ala dura, férreo defensor de los combustibles fósiles y que ocupó varias carteras ministeriales en los anteriores gobiernos conservadores, entre ellas Inmigración e Interior.

Las encuestas de opinión predicen un estrecho margen entre las dos principales fuerzas políticas, y existe la posibilidad de que ninguno alcance la mayoría absoluta y tenga que pactar con partidos minoritarios o diputados independientes.

El próximo gobierno además se enfrentará a un contexto mundial de creciente inestabilidad y la amenaza de la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos, como los que ya aplica a las importaciones de acero y que afectan a Australia. EFE

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