Angola pide un alto el fuego en el este de la RDC a partir de este domingo 16 de marzo

Luanda, 15 mar (EFE).- El presidente de Angola, João Lourenço, que actúa como mediador en el conflicto que enfrenta al Ejército de la República Democrática del Congo (RDC) y al poderoso grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) en el este congoleño, pidió este sábado a las partes que observen un alto el fuego a partir de este domingo 16 de marzo.

«En el contexto de los incesantes esfuerzos realizados por la mediación angoleña para contribuir a la resolución urgente de la inestabilidad reinante en el este de la RDC, su excelencia João Manuel Gonçalves Lourenço (…), en su calidad de mediador del proceso de paz (…), hace un llamamiento a las partes en conflicto para que cesen las hostilidades (…) a partir de las 00.00 horas del 16 de marzo de 2025», señaló la Presidencia angoleña en un mensaje difundido a través de la red social Facebook.

Lourenço lanzó esta petición tras anunciar el pasado miércoles el inicio de negociaciones directas de paz entre el Gobierno de la RDC y el M23 el próximo 18 de marzo en Luanda, la capital angoleña.

«El alto el fuego debe incluir todas las posibles acciones hostiles contra la población civil y la conquista de nuevas posiciones en la zona de conflicto, con la esperanza de que esta y otras iniciativas conduzcan a la creación de un clima de distensión que favorezca el inicio de las conversaciones de paz que se celebrarán próximamente en Luanda», concluyó el comunicado.

El martes, la Presidencia de Angola había anunciado que establecería contactos con los rebeldes en su calidad de mediadora para que las partes iniciaran estas conversaciones directas con el objetivo de lograr una «una paz definitiva» en el este de la RDC.

Horas después del anuncio, la noche del miércoles al jueves, el M23 tomó control de la isla Idjwi, en el lago Kivu. Así, el grupo controla ya siete de los ocho territorios que componen la provincia oriental de Kivu del Sur.

El Gobierno congoleño, que hasta la fecha se ha opuesto a participar en las conversaciones de paz que incluyeran a los rebeldes, pese a la presión internacional a favor, no ha confirmado todavía su asistencia a las conversaciones.

Tina Salama, portavoz del presidente de la RDC, Félix Tshisekedi, se limitó a señalar a través de la red social X: «Tomamos nota y esperamos la puesta en marcha de este proceso por parte de la mediación angoleña».

El anuncio de las conversaciones se emitió después de que Lourenço se reuniera con Tshisekedi en Luanda.

El M23, que cuenta con apoyo de Ruanda -según la ONU y países como EE.UU., Alemania y Francia-, controla las capitales de las provincias de Kivu del Norte y Kivu del Sur, fronterizas con Ruanda y ricas en minerales como el oro o el coltán, fundamentales para la industria tecnológica y en la fabricación de teléfonos móviles.

El número de muertos por el conflicto en la capital de Kivu del Norte, Goma, y alrededores superó los 8.500 desde el pasado enero, según detalló a finales de febrero el ministro congoleño de Salud Pública, Samuel Roger Kamba.

En esa provincia se reanudó la actividad armada del M23 -grupo formado principalmente por tutsis que sufrieron el genocidio ruandés de 1994- en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño.

Desde entonces, ha avanzado por varios frentes, lo que ha elevado los temores a una posible guerra regional.

Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU (Monusco). EFE

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