Las mujeres perfilan la tecnología en Suiza

Hay menos mujeres en el sector tecnológico, pero no bajan los brazos. Boris Baldinger

Un movimiento iniciado en Zúrich reúne a mujeres que trabajan en el ámbito tecnológico, una iniciativa que podría cambiar la dominancia masculina que existe hoy en esta industria.

Es miércoles por la tarde. Alrededor de 100 mujeres (y un puñado de hombres) se reúnen en una sala perteneciente a las oficinas de Google Zúrich, son miembros de We Shape TechEnlace externo. Esta red, fundada y desarrollada por seis mujeres, incluye a representantes de grandes corporativos tecnológicos, pero también de empresas emergentes, ingenieras en software y expertas en especialidades nacientes como facilitadoras virtuales o diseñadoras de experiencia del usuario, entre otros.

“Me encanta trabajar en el ámbito tecnológico y quiero ver a más mujeres aquí. Quiero que sea la norma”, dice Petra Ehmann, quien labora en el área de desarrollo de negocios de Google Zúrich autorizando el contenido de aplicaciones diversas, como los mapas, por ejemplo.

Ehmann es una de las mujeres a la cabeza de esta red. Trabajó para varias compañías en distintos países y asegura que su actual equipo en Google está “bien mezclado” en materia de equidad hombres-mujeres.

Sin embargo, dado que Google Zúrich es el sitio que más ingenieros tiene fuera de Mountain View, donde se encuentra su sede en California, también hay muchos ingenieros varones. “Me acostumbré a ello porque estudié ingeniería mecánica y para mí fue necesario aprender a tejer lazos de amistad con los hombres para que todo marchara bien en ese entorno”, dice Ehmann. Una apertura hacia la integración que “me ayudó entonces y me sigue siendo útil aquí”.

Esta tarde, se han presentado tres dinámicos y breves discursos. Isa Steiner, directora Tecnológica Siroop -un mercado suizo en línea-, explica que para ella una mentalidad basada en la colaboración conduce a una diversidad que es enriquecedora en el trabajo. Vestida con una sudadera gris y unos vaqueros entra en confianza con su auditorio y explica que su forma de expresarse, y su manera particular de ver los negocios, frecuentemente no es lo que la gente espera. “Digo muchas malas palabras”, ríe.

"You can only benefit from #diversityEnlace externo when you are open to be proven wrong." Love it @tweetizzyEnlace externo @siroop_chEnlace externo #weshapetechEnlace externo pic.twitter.com/CZFNJ79ig6Enlace externo

— Melanie Kovacs (@MelaKovacs) October 5, 2016Enlace externo

El poder puesto en cifras

«La red y sus aprendizajes son una de las cosas más valiosas que pueden llevarse consigo las mujeres que asisten a estos eventos. Aquí encuentran mujeres apoyando a mujeres, animándose mutuamente y dándose aliento para seguir creciendo», explica Ehmann.

Para la diseñadora gráfica Janine Fuchs, quien dirige su propia empresa y también es fundadora de la red, el objetivo es «hacerse fuertes todas juntas».

«Si cada persona lucha sola por la diversidad, el impacto no es suficiente. Las mujeres deben aprender a trabajar conjuntamente y a darse fuerza unas a otras», agrega Fuchs, quien considera que muchas ya están sintiendo el efecto de este trabajo de equipo.

Aunque existe una gran variedad de empleos dentro de la tecnología, las siguientes cifras ofrecen una visión de género sobre la distribución de las actividades relativas a las tecnologías de la información y las comunicaciones; muestran la brecha que aún existe en esta rama y los pocos avances que se han registrado entre 2005 y 2015.

La bernesa Brigitte Hulliger, quien dirige su propia empresa de innovación de productos de ingeniería de software, asegura que cuando se es mujer «se necesita un poco de valentía para realizar este trabajo”.

«Cuando obtuve mi primer empleo (en esta industria) recibí comentarios desagradables como: ‘finalmente tenemos una mujer en nuestro equipo para que la oficina ya no esté sucia'», dice. Asegura que no se sintió herida por esas palabras, pero considera que de alguna forma es un problema que en la cultura suiza se tengan que realizar todavía discusiones por este tipo de actitudes. Esto le sucedió hace dos años. Ahora trabaja por su cuenta.

Hulliger también se dijo inspirada por las participantes de la red cuando tomó parte en eventos previos que tuvieron lugar en Zúrich. Tanto fue así que decidió abrir una sucursal en Berna. Su primer evento tuvo lugar a finales de septiembre.

Aprendizaje práctico

En el salón zuriqués donde nos encontramos existe un gran revuelo y se respira confianza. Una joven de poco más de 20 años me cuenta que trabajaba como desarrolladora de portales en línea para una agencia. Afirma que su trabajo le gustaba, pero se dio cuenta que podía aspirar a algo mejor. Renunció pues a su empleo y comenzó a trabajar por su cuenta. Esta es solo una de las muchas historias que he escuchado esta noche.

Melanie Kovacs swissinfo.ch

Melanie Kovacs también posee el espíritu emprendedor que caracteriza a la red. Trabaja para una agencia digital y también es pieza clave de Master21Academy, una escuela pionera en la enseñanza del cifrado digital. “Tuve más de dos años en mente la idea (de crear un centro de capacitación en materia de cifrado)… ahora existe, pero hemos tenido dificultades para encontrar desarrolladores que se integren al equipo docente, y nuestros clientes tienen el mismo problema, no encuentran desarrolladores”, lamenta.

«Es difícil hallar gente con las habilidades y al nivel que necesitamos», añade. Kovacs identificó este problema cuando ella misma deseaba aprender técnicas de cifrado en un curso universitario. Se encontró con que la enseñanza era obsoleta, carecía de creatividad, diversión y practicidad. «¡El examen final de programación estaba en papel!», exclama.

Aunque los cursos de Master21Academy no son solo para mujeres, en una de las sesiones recientes más de 50% de los asistentes pertenecía al género femenino, indica.

Luego explica que el grupo al que llegan es cada vez mayor. «Mucha gente trabaja ya en la web o en la industria tecnológica. Hay muchos diseñadores… Creo que la mayoría de la gente (que se integra a nuestros entrenamientos) tiene entre 25 y 40 años, detalla.

Y cuando de cifrar se trata, Google Zúrich está lleno de expertos en la materia. En esta ciudad suiza se encuentra el centro de ingeniería más grande que tiene el gigante de Internet fuera de EEUU, con un total de 2 000 empleados de 75 nacionalidades distintas.

No existen estadísticas formales sobre el género de sus empleados, pero se estima que solo 19% de los puestos tecnológicos de Google son ocupados por mujeres a nivel global. Eric Tholomé, director de gestión de productos de Google Zurich, explica a swissinfo.ch que la firma trabaja en buscar una mayor equidad en las contrataciones.

En el terreno práctico, esto significa que los responsables de reclutar personal están, concretamente, buscando de mujeres. Asimismo, promueven investigacionesEnlace externo sobre los esfuerzos y avances que se tienen en la matriculación de niñas y mujeres en disciplinas como el cifrado y las ciencias de la computación en las universidades, han creado programas para desarrollar en casa y participan en la elaboración de planes educativos para los estudiantes en aulas diversas.

En Suiza, la red We Shape Tech quiere motivar a las mujeres a elegir y crecer en sus carreras profesionales dentro de esta industria respetando sus propias necesidades, y para muchas mujeres del sector, esto significa avanzar en sus propios planes tan rápido como sea posible.

Traducido del inglés por Andrea Ornelas