Suiza niega el “secreto bancario” a un magnate argentino que pedía trato especial
Un magnate argentino, titular de cuentas en Suiza, intentó impedir que sus datos bancarios fueran transmitidos a Buenos Aires en el marco del intercambio automático de información fiscal vigente. El Tribunal Federal (TF), que abordó por primera vez un caso de este tipo, rechazó la demanda.
El empresario Alfredo Alberto Román, que figura entre los habitantes más ricos de Argentina, intentó bloquear el envío de información sensible de sus haberes suizos a las autoridades fiscales de su país de residencia, una acción que contravenía las reglas del intercambio automático de datos fiscales entre países.
Esta solicitud fue considerada de la relevancia necesaria para que los jueces de Mon-Repos le dedicaran una audiencia pública el 6 de junio de 2023, a la que asistió Gotham City. Los debates, no obstante, no se inclinaron en favor del demandante, consta en el fallo Enlace externopronunciado el 14 de julio.
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El “zar de la grúas”
Conocido en Argentina como el “zar de las grúas”, Alfredo Román, de 80 años, erigió un imperio logístico que incluyó la construcción del puerto de carga más importante de Buenos Aires. El empresario vendió la mayor parte de su empresa en 2008, lo que le convirtió en el undécimo hombre más rico de Argentina, con una fortuna cifrada en 800 millones de dólares, según la revista Forbes.Enlace externo
Alfredo Román, quien posee activos en Suiza vía un fideicomiso familiar, se opuso a la transmisión de sus datos bancarios desde que entró en vigor el tratado de intercambio automático de información entre Suiza y Argentina en 2018.
Tras un primer rechazo de la Administración Federal de Impuestos de Suiza y una segunda negativa encabezada por el Tribunal Administrativo Federal en 2020, Alfredo Alberto Román decidió interponer su caso ante el Tribunal Federal.
“Presunción de riesgo”
El empresario, quien afirma estar en regla con las autoridades fiscales de su país, expresó que «la ausencia del Estado de Derecho en Argentina comprometió la seguridad de los datos y, en consecuencia, puso en peligro la vida, la libertad y los bienes de las personas sujetas al intercambio automático». La defensa de Alfredo Román enfatizó además el riesgo de secuestro o extorsión que enfrentaban él y su familia.
Denunciaron también el «menosprecio de las autoridades argentinas por la protección de los datos personales, (…) la corrupción endémica entre los funcionarios argentinos, la creciente actividad de grupos criminales y la falta de integridad del gobierno argentino».
Argumentos que no convencieron al Tribunal Federal. Para los jueces, el «presunto riesgo relacionado con la seguridad (…) está vinculado a una fortuna que, según los hechos observados, ya es de conocimiento público en Argentina, por lo que no puede apreciarse de qué forma el intercambio automático de información podría exponer (a Alfredo Román) a riesgos adicionales en este sentido”.
La prensa argentinaEnlace externo estima desde hace años que la fortuna de 800 millones de dólares que se le atribuye a Román es en realidad mucho mayor. En 2020, la revista La Política Online Enlace externoafirmó que el patriarca poseía al menos la misma cantidad en el extranjero.
Alfredo Román fue un hombre cercano al expresidente argentino Mauricio Macri, quien dirigió el país entre 2015 y 2019, y se presume que habría apoyadoEnlace externo sus campañas políticas, según revelaciones publicadas en 2016.
Un «error técnico»
La Administración Federal de Impuestos se había comprometido a no transmitir información sobre el fideicomiso de la familia Román en tanto no hubiera un resultado del procedimiento iniciado en Suiza. Pero, según la sentencia del Tribunal Federal, sí hubo entrega de datos a Argentina en 2020.
“La Administración Federal de Impuestos indicó que la transmisión denunciada se produjo debido a un error técnico, pero que había procedido a anular la declaración correspondiente el 1 de septiembre de 2022”, según el Tribunal Federal.
Alfredo Alberto Román es representado legalmente por David Wilson y Ksenia Iliyash del despacho Schellenberg Wittmer.
Al ser contactado por Gotham City, David Wilson envió el siguiente pronunciamiento:
“El gato escaldado… del agua fría huye. Nuestros clientes, como muchos ciudadanos argentinos, han sido lamentablemente víctimas de procedimientos abusivos cometidos por las autoridades argentinas. Varios funcionarios argentinos fueron detenidos por abuso de poder, violación del secreto fiscal y falso testimonio; incluso el propio director de la administración tributaria argentina fue acusado. Así que lamentamos que el Tribunal Federal haya ignorado las legítimas preocupaciones de los ciudadanos argentinos que cumplen con sus obligaciones fiscales poniéndolos en riesgo de una apropiación indebida de los datos transmitidos por Suiza vía el intercambio automático.»
En una declaración publicada en LinkedInEnlace externo, David Wilson criticó también la “fuga” de datos de la Administración Federal de Impuestos:
“En este caso, la Administración Federal de Impuestos intercambió información relativa a los fideicomitentes del fideicomiso con la autoridad argentina en 2020, ¡a pesar del efecto suspensivo del recurso y del compromiso específico que tenía de bloquear el intercambio automático de esta información mientras no hubiera una definición legal! Pese a ello, el Tribunal Federal se niega a pronunciarse sobre si la transmisión indebida de estos datos durante el procedimiento hace que estos carezcan de validez. ¡Es escandaloso, especialmente porque no se trata de una filtración aislada, sino de varias filtraciones cometidas por la Administración Federal de Impuestos en perjuicio de diversos de nuestros clientes y relativas a varios períodos impositivos!”.
En el mismo comentario, el abogado refirió que hay clientes de otros países que también han cuestionado el intercambio automático de información:
“El Tribunal Federal se focaliza en que el Estado extranjero (en este caso Argentina) garantiza una adecuada protección de datos (…). Espero ver cómo se pronunciarán los tribunales suizos en los casos de países que no cumplen estos criterios, como Arabia Saudita, México, etc.”.
El defensor legal de Alfredo Alberto Román indicó que ha presentado un recurso de apelación ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH).
Texto adaptado del francés por Andrea Ornelas
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