En la campiña del cantón de Appenzell, el paisaje se despierta con suavidad. (Keystone/Regina Kuehne)
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Los campesinos y los vaqueros de Justistal en el Oberland bernés
se reencuentran cada año en septiembre con sus familias en la fiesta popular más antigua, el 'Chästeilet'. Se recogen las ruedas de queso de las cavas y se las pasan de mano en mano. (Keystone/Peter Klaunzer)
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Las hojas de otoño iluminan el bosque de Zúrich. (Keystone/Alessandro Della Bella)
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Las hojas de otoño nadan en una fuente de Zúrich. Los vientos tempestuosos de la noche precedente anuncian ya la llegada del invierno. (Keystone/Alessandro Della Bella)
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Tras el trabajo, los conductores vuelven con dificultad a sus domicilios en la la penumbra de una noche caída con rapidez. Los primeros copos de nieve complican algo más el retorno al hogar. (Keystone/Edi Engeler)
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Las castañas maduras con sus envolturas espinosas durante la cosecha de castañas en Roveredo, cantón del Tesino. (Keystone/Karl Mathis)
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Más de 35.000 espectadores llegaron a admirar una de las numerosas carrozas de flores en la Fiesta de la Vendimia de Neuchâtel. (Keystone/Martial Trezzini)
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La nieve mojada mezclada con las hojas de colores crea una imagen muy romántica. (KEYSTONE/Sigi Tischler)
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El otoño es también tiempo de caza. Hay unos que sólo la verán en el plato y otros, como Konrad Fluetsch y su perro de caza, que persiguen a las presas hasta los confines de un territoro salvaje. (Keystone/Arno Balzarini)
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El sol traspasa la niebla y las últimas hojas de este bosque de San Gall. (Keystone/Eddy Risch)
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Boca abajo en esta atracción de la Messeplatz de Basilea. La tradicional feria de otoño de Basilea es el evento más grande de este género en Suiza.(Keystone/Markus Stücklin)
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Un hombre alimenta a las hambrientas gaviotas en la orilla del Limmat. (Keystone/Eddy Risch)
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Un recolector de champiñones se prepara para hacer suyas las magníficas cepas en un claro del bosque en el Oberland de los Grisones. (Keystone/Arno Balzarini)
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Un pato sobre una piedra en medio de las frías aguas del río Limmat disfruta del buen tiempo otoñal. (Keystone/Walter Bieri)
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Una decoración muy natural sobre este coche en Zúrich. (Keystone/Alessandro Della Bella)
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Una capa de escarcha envuelve las hojas antes de que el sol se decida a atravesar la niebla. (Keystone/Arno Balzarini)
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El Sucot, o la 'Fiesta de las Cabañas' o de 'los Tabernáculos', la celebración judía más grande del año, se desarrolla también en Zúrich.(Keystone/Alessandro Della Bella)
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Las calabazas de distintas formas y colores delante de la puerta de un granero en el Oberland de los Grisones. (Keystone/Arno Balzarini)
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Una tela y su proprietaria ante el chaparrón. (Keystone/Alessandro Della Bella)
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Las hermanas benedictinas del convento Maria Rickenbach disfrutan de una magnífica jornada de otoño durante su paseo en el jardín de su convento. (Keystone/Urs Flüeler)
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Un símbolo del otoño: las castañas asadas en una sartén en la Fiesta de las Castañas de Locarno-Muralto. (Keystone/Karl Mathis)
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Tiempo nublado, chaparrones y bancos de niebla marcan el otoño en el cantón de Appenzell. (Keystone/Eddy Risch)
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Cerca de Sargans, en el cantón de San Gall, el tiempo todavía es propicio para el paseo y la excursión. (Keystone/Arno Balzarini)
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En una terraza de la Catedral de Berna, un buen vaso de vino caliente permite entrar en calor al cuerpo y al espíritu. (Keystone/Alessandro della Valle)
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La decoración otoñal se ve perturbada por la llegada de la primera nieve en Zollikon, en el cantón de Zúrich. (Keystone/Steffen Schmidt)
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La naturaleza se prepara para el invierno
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Los días se acortan, la capa de niebla se espesa y las primeras escarchas recuerdan que el inverno se aproxima. El otoño ya llegó a Suiza, con la magia de sus colores, teñidos de una dulce melancolía propia de este periodo del año.
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