El duque Bertoldo V de Zähringer eligió -por motivos estratégicos-, esta lengua de tierra para fundar Berna en 1191. El río Aar ofrecía efectivamente un resguardo natural contra potenciales invasores.
(swiss-image.ch/Terence du Fresne)
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La catedral de San Vicente, construida entre 1421 y 1573, domina todavía la ciudad vieja. De 100 metros de altura, el campanario levantado entre 1889 y 1893 sigue siendo el más alto de Suiza.
(swiss-image.ch/Stephan Engler)
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En la puerta principal de la catedral destaca un conjunto iconográfico completo que representa el juicio final. A la izquierda, los bienaventurados; a la derecha, los condenados.
(swiss-image.ch/Peter Maurer)
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El Erlachenhof es el único palacio residencial del centro histórico de Berna de estilo francés 'entre patio y jardín'.
(Wikipedia/Baikonur)
En la escalinata de doble rampa del ayuntamiento se halla la representación de un mundo dividido entre el Bien y el Mal, tal como en la puerta de la catedral: a la izquierda, la virtud; a la derecha, el vicio.
(wikipedia.org)
La calle principal de la ciudad vieja servía originalmente de 'plaza' para los ciudadanos. Acogía el mercado y la justicia.
(Keystone/Martin Ruetschi)
Keystone
Tres de las once fuentes del siglo XVI patrimonio de la humanidad.
De derecha a izquierda: la fuente de la Justicia (Keystone/Gaetan Bally), del gaitero y la del ogro. (RDB/Stephan Engler)
Keystone
Quien sube los 344 escalones hacia el campanario de la catedral puede disfrutar de una vista panorámica sobre los techos del centro histórico.
(Alfred Buellesbach/Visum)
La Torre del Reloj es probablemente el monumento más fotografiado de la ciudad vieja de Berna. Construida entre 1218 y 1220 y luego varias veces modificada, sirvió originalmente como cárcel de mujeres.
(Mike Lehmann)
Grandes atracciones turísticas son el reloj astronómico y el carillón animado. Ambos funcionan gracias a un mecanismo hecho entre 1527 y 1530 que cada día se pone en marcha manualmente.
(swiss-image.ch/Terence du Fresne)
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Una de las características de la ciudad vieja de Berna son los seis kilómetros de soportales y arcadas. Son transitadas por mucha gente y aún ofrecen espacio para las mesas de bares o restaurantes.
(swiss-image.ch/Terence du Fresne)
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.- Completamente restaurada en 2004, la Plaza Federal y sus 26 chorros de agua constituyen un área de distracción, sobre todo para los niños.
(swiss-image.ch/Terence du Fresne)
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En el amplio vestíbulo del Palacio Federal, sede del Parlamento y del Gobierno suizos, destaca un conjunto monumental alusivo al Pacto de Grütli, que dio paso al nacimiento de la Confederación.
(parlament.ch)
El teatro de la ciudad de Berna data de principios del siglo XX.
(Wladyslaw Sojka)
La iglesia del Espíritu Santo es considerada uno de los templos protestantes más significativos de Berna. Fue construida en una base rectangular, en estilo barroco, entre 1726 y 1729.
(pixelio.de)
Una combinación ejemplar de antigüedad y modernidad
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Erigido sobre una colina en un meandro del río Aar, el casco antiguo de Berna se ha desenvuelto según un plano urbanístico linear. La ciudad medieval ha sido constantemente renovada, sin perder su característica original. Desde 1983 figura en la lista patrimonio mundial de la UNESCO (swiss-image.ch/Terence du Fresne)
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