Edimburgo: Suiza eleva su apuesta por el espacio

La lanzadera europea no tiene nada que envidiar a sus competidoras estadounidenses Keystone Archive

El sector espacial europeo acude a una cita de dos días en Escocia. Suiza anunciará un aumento de su participación financiera.

A diferencia de lo que aún ocurre con otros grandes proyectos científicos de escala continental, Suiza participa como miembro pleno en la Agencia Espacial Europea (AEE).

Además, la aventura comenzó en su suelo. En efecto, la primera Conferencia Espacial Europea, predecesora de la AEE, se llevó a cabo en 1960 en Meyrin, en el recinto de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN).

La Agencia Europea se ha convertido en la organización intergubernamental de investigación y desarrollo más importante del mundo. Su presupuesto asciende a 4.200 millones de francos suizos, suma equivalente a una cuarta parte del de la NASA, pero no tiene complejos ante la competencia estadounidense.

Desarrollo del programa Galileo

De aquí a 2008, la AEE deberá instalar el programa Galileo, es decir, una constelación de satélites que ofrecerá a Europa un sistema de gestión de tráfico aéreo, considerado superior al sistema estadounidense GPS y al ruso Glonauss. El potencial de desarrollo en ese mercado es enorme: 9.000 millones de euros y la creación de unos 140.000 puestos de trabajo en el continente.

En el campo de las lanzaderas, Ariane sigue siendo uno de los cohetes más fiables y más económicos del momento. Dentro de algunos años, la Estación espacial internacional deberá ser integrada a un laboratorio europeo dedicado especialmente a las experiencias en biología y microgravedad.

Anuncio de Charles Kleiber

Presente en la Conferencia ministerial de Edimburgo, Charles Kleiber, secretario de Estado suizo para la Ciencia y la Investigación, anunciará un aumento de la contribución helvética a la AEE, que elevará progresivamente de 120 millones previstos para 2001 hasta llegar a 148,4 millones en 2006.

En total son 680 millones de francos que el Consejo Federal (gobierno) ha decidido asignar para el periodo 2002-2006. Si Charles Kleiber juzga que este crecimiento presupuestario es «modesto», los industriales del sector espacial no ocultan su deseo de ver una participación más importante.

En 1999, las empresas suizas que trabajan para la Agencia Eureopa Espacial como APCO Technologies en Vevey, Contraves Space o Ascom dirigieron un mensaje al Consejo Federal solicitando que aumente sus contribuciones.

Consideran que casi dos tercios del dinero invertido en la AEE vuelve al país en forma de pedidos de compra. Sin embargo, algunos beneficios no son tomados en cuenta en este cálculo. Trabajar para la industria espacial estimula la competitividad y favorece la creación de empleos altamente calificados. Sin mencionar el efecto multiplicador que tiene en las actividades derivadas.

Marc-André Miserez