Encuentro del Tercer tipo en Ginebra

La incorporación de la sociedad civil en la Cumbre evitará que la gente salga a las calles como en la Cumbre del G8, en Génova (foto). Keystone

Con la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información (CMSI), la ONU inaugura una forma inédita de negociaciones internacionales.

La cumbre de Ginebra abre la mesa de debates a actores no gubernamentales, entre ellos, la sociedad civil y el sector privado.

«Antes las Naciones Unidas sólo trabajaban con los gobiernos. Hoy sabemos que la paz y la prosperidad no pueden materializarse sin la colaboración de los gobiernos, las organizaciones internacionales, el mundo de los negocios y la sociedad civil. En el mundo actual, dependemos los unos de los otros”.

Tal es al menos la convicción que se ha forjado Kofi Annan desde que ocupa el cargo de Secretario General de las Naciones Unidas. Su visión se basa en una triple evolución.

Por una parte, los Estados no tienen ya los medios (económicos) para sus ambiciones. Del otro, las organizaciones no gubernamentales (ONG) tienen ambiciones cada vez más grandes. Pero carecen de fondos para poderlas realizar.

En cuanto a las empresas, disponen de los recursos, pero sus ambiciones no rebasan en mucho al horizonte de su estricto interés.

Una apertura saludable

Por lo tanto, la asociación propuesta por Kofi Annan sería del interés de todos, al menos en la teoría.

A partir de la Segunda Conferencia Preparatoria de la Cumbre de Ginebra, los representantes de la sociedad civil dieron, por su parte, la bienvenida a esta apertura aun cuando tenga algunos bemoles.

«Es un avance interesante, casi histórico», juzga Chantal Peyer, de la ONG suiza “Pan para el prójimo”.

E inmediatamente añade: «Pero el estatus de la sociedad civil, el sector privado y las organizaciones internacionales sigue siendo de carácter consultivo».

Un derecho de palabra

De hecho, los representantes de estos tres sectores han tenido tiempo de sobra para hablar, para participar en reuniones plenarias y también en las preparatorias para la Cumbre.

Han podido igualmente intervenir en grupos de trabajo consagrados a los distintos temas que se abordarán en el encuentro.

Además, el CMSI ha sido dotado de un secretariado integrado por miembros de la sociedad civil que intenta transmitir las ideas de las asociaciones que representa.

Por último, algunas delegaciones gubernamentales – entre ellas las de Suiza- integraron en sus filas a representantes de la sociedad civil y del sector privado. Pero, según Pape Diouf, estos progresos siguen siendo insuficientes.

«No se puede aún hablar de verdaderas negociaciones entre los cuatro actores”, dice este profesor del Instituto Universitario de Estudios sobre el Desarrollo (IUED) de Ginebra, “ya que son los Estados los que siguen teniendo la última palabra.»

Por su parte, Basheerhamad Shadrach agrega que poseedores del capital no se implican lo suficiente en la preparación de la cumbre.

«La colaboración entre los sectores público y privado que predica Kofi Annan sigue siendo sólo una buena intención», remató el responsable de la red de información Oneworld para Asia del Sur.

Una colaboración que balbucea

Una cosa está segura, la inclusión de la sociedad civil en el CMSI –aun cuando haya sido parcial- permitió evitar de una “anti-cumbre” por parte de las organizaciones no gubernamentales.

Y ésta es ya una evolución notable con respecto a las conferencias precedentes de la ONU.

En efecto, la mayoría de los participantes de la sociedad civil aceptó jugar el juego de Kofi Annan. Y esto, a pesar de las numerosas frustraciones suscitadas durante las reuniones preparatorias.

A pesar de todo lo anterior, esta colaboración que apenas balbucea no seguirá adelante a cualquier precio.

Prueba de ello es la clara advertencia lanzada por la sociedad civil al final de la Tercera Conferencia Preparatoria: «Si los Gobiernos siguen excluyendo nuestras propuestas, no legitimaremos los documentos finales del CMSI».

swissinfo, Frédéric Burnand, Ginebra
(Traducción: Andrea Ornelas)

Datos clave

La participación de las ONG y de la sociedad civil puede ensanchar las perspectivas de la Cumbre sobre la Sociedad de la Información.

Contexto

-Por primera vez, la sociedad civil participa directamente en los trabajos de una cumbre de la ONU.

-La Cumbre mundial de la sociedad de la información (CMSI) ha sido dotada de un secretariado que se integra por por una veintena de familias que ilustran la diversidad de la sociedad civil, o incluso su heterogeneidad.

– Sindicatos, pueblo autóctono, minusválidos, ONG, jóvenes, bibliotecarios, poderes locales son algunos de los integrantes.