La ciencia suiza intenta develar el misterio del glaciar del Pamir

Investigadores suizos instalan una estación meteorológica en el glaciar de Kyzylsu, en el macizo del Pamir, en Tayikistán. Achille Jouberton, WSL

Algunos glaciares de Asia Central parecen no sufrir los efectos del calentamiento climático. Su superficie, en lugar de reducirse, se mantiene estable o incluso aumenta. Un proyecto suizo intenta estudiar las causas de este fenómeno que aparece casi como una anomalía climática.

El aumento de la temperatura produce, entre otros efectos, el retiro de los glaciares. Desde 1850 los glaciares alpinos perdieron cerca del 60% de su volumen,  transformando profundamente el paisaje de montaña.  El deshielo se acelera y los glaciares, a nivel mundial, pierden ya una media de hasta 298 000 millones de toneladas de hielo al año, cantidad suficiente como para sumergir a toda Suiza debajo de hasta más de seis metros de agua.

Sin embargo, existen excepciones. En el macizo del Pamir en Tayikistán, así como en las cadenas montañosas adyacentes de Pakistán, India y China, algunos glaciares se mantienen estables o bien están creciendo. Se trata de un fenómeno único en el mundo, señalado como “la anomalía del Pamir-Karakorum”.

Las montañas del Pamir se encuentran en la conjunción de las cadenas del Tien- Shan (al norte), de Karakorum (en el sur) y de Hindu Kush (al suroeste) WSL

«Cuando lo vi no lo podía creer: es el único lugar en el mundo en el cual se puede caminar desde la tierra firme hasta la superficie del glaciar sin pasar sobre una morena (colina) lateral”, señala a SWI swissinfo.ch Francesca Pellicciotti, especialista en glaciares del Instituto Federal Suizo para la Investigación de Bosques, Nieve y Paisaje (WSL). «No se puede asegurar desde cuando existe esta anomalía. Sin embargo, las imágenes satelitales nos indican que está a punto de desparecer». 

Parte inferior del glaciar de Kyzylsu cubierta por escombros, en Tayikistán. Achille Jouberton, WSL

El hielo en todas sus manifestaciones

Las causas y las consecuencias de esta anomalía centran la atención del proyecto de investigación dirigido por el WSL y la Universidad de Friburgo. Interdisciplinario, el proyecto «Pamir» fue elegido por el Instituto Polar Suizo (SPI) y es una de las dos
iniciativas principales para los próximos cuatro años (Groenlandia es otra, ver detalles en el recuadro) y cuenta con un financiamiento de 1,5 millones de francos suizos.

La importancia de esta propuesta de investigación va más allá de los glaciares del Pamir. Los ríos que se originan en ellos, entre los cuales el Amu Darya, alimentan con agua a decenas de millones de personas en Asia Central, región particularmente amenazada por el cambio climático y la inestabilidad política, explica Francesca Pellicciotti.

«La región del Pamir es increíble: el hielo está presente en sus muy variadas expresiones”, dice Pellicciotti. Además de los típicos glaciares blancos, se encuentran glaciares cubiertos de escombros, denominados «glaciares negros», los glaciares con rocas”  y el permafrost, la capa del suelo perennemente congelada. “No se conocen las causas de estas variantes. A menudo en una región se observa un solo un tipo de glaciar», explica Pellicciotti, quien avanza la hipótesis de que, probablemente, el clima y la orografía juegan un papel clave.

Lo que también fascina a la investigadora es el hecho de que se trata de un área poco conocida y poco estudiada. Las regiones de alta montaña y las mesetas de Tayikistán – antigua república soviética-, durante mucho tiempo fueron inaccesibles. 

La investigación de la criosfera – es decir, de los paisajes terrestres en los que el agua está presente en forma de hielo o nieve- cambió sustancialmente a inicios del milenio actual debido a que se incorporaron las imágenes satelitales, que antes eran demasiado caras e inaccesibles para la ciencia, explica Pellicciotti.  Subraya que «por primera vez tuvimos una visión global de los glaciares y una idea del estado de los mismos y de la nieve a escala regional». Fue entonces cuando el mundo científico empezó a hablar de la anomalía del Karakorum.

Cambio climático en Groenlandia 

La segunda iniciativa de investigación apoyada por el Instituto Polar Suizo (SPI), el proyecto  GreenFjord, busca estudiar los efectos del calentamiento climático en los ecosistemas de los fiordos suroccidentales de Groenlandia. Investigadores e investigadoras analizarán los impactos del deshielo de los glaciares y de la erosión del suelo en el ciclo de los nutrientes, los recursos marinos, la formación de nubes y los medios de vida de las poblaciones locales. «Queremos entender cómo podrían cambiar en el futuro la red alimentaria y las reservas de peces», afirma Julia Schmale, coordinadora del proyecto y profesora de la Escuela Politécnica Federal de Lausana.  

Tres hipótesis

Existen tres hipótesis que podrían explicar las razones por las cuales algunos glaciares de Asia Central se mantienen estables o, incluso crecen.

La primera, se refiere a un descenso de las temperaturas estivales, debido a un cambio en el monzón, y la consiguiente reducción del deshielo. La segunda, refiere el fenómeno a un aumento de la intensidad de las precipitaciones durante el invierno y la primavera. Sería la consecuencia de un cambio en la interacción entre el monzón y las perturbaciones del oeste, las tormentas extra tropicales que se originan en la región mediterránea.

La tercera hipótesis, está relacionada con las prácticas agrícolas. La región paquistaní de Pamir-Karakorum integra una de las mayores zonas de regadío del mundo. Se supone que, debido a la elevada evapotranspiración, es decir, la evaporación del suelo y la transpiración de las plantas, el agua vuelve a la atmósfera y es transportada a las grandes alturas del Pamir y se precipita en forma de nieve. 

Para Pellicciotti, esta es la hipótesis más plausible: «Las simulaciones con modelos atmosféricos han demostrado que las masas de aire húmedo que se originan en los cultivos de Pakistán terminan en forma de nieve sobre las montañas del Pamir.

Instalación de una estación de monitoreo para controlar el nivel del agua del río, en Tayikistán. Achille Jouberton, WSL

Relanzar la investigación sobre los glaciares

En el proyecto Pamir participarán unos 60 científicos de Suiza y Tayikistán. Estudiarán las propiedades del hielo, la nieve y el permafrost y gracias a los sensores montados en un avión, podrán medir la acumulación de nieve, así como el balance de masas de decenas de glaciares. Una perforación a través de los miles de metros de espesor del glaciar Fedchenko, el más grande fuera de los polos, recolectará datos sobre el clima en tiempos pasados.

Un subproyecto reconstruirá la historia de la ciencia glacial soviética a partir de archivos. «Tayikistán tiene una larga historia de investigación de glaciares, que se detuvo con la disolución de la Unión Soviética», explica Abdulhamid Kayumov, director del Centro de Investigación de Glaciares de la Academia de Ciencias de Tayikistán en diálogo con SWI swissinfo.ch

“Suiza es reconocida por su experiencia en la investigación de la criosfera. Con su ayuda, queremos relanzar la investigación en nuestro país», afirma.

Campo base del grupo suizo de investigación en Tayikistán. Achille Jouberton, WSL

Adaptado del italiano por Sergio Ferrari