Cinco muertos y 35 heridos en Ruanda por balas y proyectiles atribuidos al Ejército de RDC
Kigali, 27 ene (EFE).- Cinco personas murieron y 35 resultaron heridas este lunes en el oeste de Ruanda, cerca de la frontera con la República Democrática del Congo (RDC), por balas perdidas y proyectiles atribuidos a militares congoleños, confirmó a EFE el portavoz del Ejército ruandés, brigadier general Ronald Rwivanga.
El suceso ocurrió en el distrito de Gisenyi, limítrofe con la ciudad de Goma, capital de la provincia de Kivu del Norte (noreste de la RDC), tomada este lunes por el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), supuestamente apoyado por Ruanda.
Rwivanga explicó a EFE que las muertes se produjeron por balas perdidas y proyectiles disparados por el Ejército congoleño y la milicia Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), FDLR, que luchan contra los rebeldes del M23.
«Nuestros sistemas de defensa aérea intentaron interceptar los proyectiles, pero desafortunadamente no pudimos detenerlos todos, lo que provocó las muertes», dijo el portavoz.
«Las Fuerzas de Defensa de Ruanda -subrayó- están haciendo todo lo posible para contener la situación».
Rwivanga añadió que, desde la mañana, el Ejército ruandés ha recibido a más de 100 soldados de la República Democrática del Congo que buscaron refugio en Ruanda.
«Los hemos desarmado, según los procedimientos operativos estándar, y los acantonaremos en una zona segura mientras determinamos los próximos pasos», añadió.
El portavoz militar hizo esas declaraciones después de que el M23 anunciara este lunes que ha tomado Goma, tras días de intensos combates con el Ejército congolés que han provocado el desplazamiento de miles de personas.
La crisis ha elevado la tensión diplomática entre la RDC y Ruanda pues la República Democrática del Congo retiró a su personal diplomático en Ruanda y ordenó el cese de actividad en la embajada ruandesa en Kinsasa.
Aunque Ruanda niega la presunta colaboración de Kigali con el M23, este extremo ha sido confirmado por las Naciones Unidas.
A su vez, Ruanda y el M23 acusan al Ejército congoleño de cooperar con el grupo rebelde Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), fundado en 2000 por cabecillas del genocidio de 1994 y otros ruandeses exiliados en la RDC para recuperar el poder político en su país, una colaboración también confirmada por la ONU.
La actividad armada del M23 se reanudó en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño en Kivu del Norte y en marzo de 2022 el grupo empezó una ofensiva con la captura y pérdida recurrentes de localidades.
Desde entonces, el M23 ha avanzado por varios frentes hasta situarse cerca de Goma, capital de unos dos millones de habitantes que es sede de ONG internacionales e instituciones de la ONU y que el grupo ya ocupó durante diez días en 2012. EFE
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