Cuba envía médicos que combatieron el ébola para ayudar a Italia
Una brigada de 52 médicos y paramédicos cubanos, varios de ellos con experiencia en la lucha contra el ébola en África, viajaron este sábado a Italia para asistir a los servicios sanitarios de ese país, donde se registra el mayor número de muertos por COVID-19.
El destino de la misión es la región de Lombardía, actualmente la más golpeada por el nuevo coronavirus. En un mes han fallecido 4.825 personas en el país europeo debido a la pandemia.
La brigada, integrada por 36 médicos, 15 enfermeros y un administrador, todos hombres, «está lista para trabajar sin descanso en la atención y enfrentamiento de la epidemia de COVID-19, unidos a los profesionales de salud» de Italia, dijo su jefe, Carlos Ricardo Pérez.
«De ellos, 30 enfrentaron la epidemia de ébola en África Occidental» en 2014, en respuesta a un llamado de la Organización Mundial de la Salud (OMS), agregó el jefe de la brigada, en la despedida organizada en la Unidad Central de Cooperación Médica (UCCM) de La Habana.
En el grupo también se encuentran novatos, como el doctor Roberto Arias, de 27 años, quien enfrentará con esta su primera misión. «El miedo es inherente al ser humano, todo el mundo tiene miedo a algo en la vida, pero la valentía se trata de eso, de enfrentarte a cosas a las que uno le tiene miedo», comentó a la AFP.
El ministro de Salud, José Angel Portal, pidió a los colaboradores «que se cuiden y que retornen bien a la patria».
La exportación de servicios médicos cubanos, además del turismo, es uno de los motores de la economía del país socialista, y le representó ingresos por unos 6.300 millones de dólares en 2018, según cifras oficiales.
Esta brigada viaja a pedido del consejero de Salud de Lombardía, Giulio Gallera, quien reconoció que su sistema sanitario está por colapsar debido al elevado número de pacientes que necesitan cuidados intensivos.
Gallera espera que los galenos cubanos «alivien la situación» del hospital de Crema, en la localidad de Cremona (sur de Lombardía).
Con el envío el domingo pasado de una brigada médica a Venezuela, principal aliado de Cuba en la región y su principal proveedor de petróleo, La Habana comenzó a movilizar a su ‘ejército de batas blancas’.
Otras brigadas viajaron a Nicaragua, Surinam, Granada y Jamaica. En total suman 261 colaboradores.
Unos 30.000 profesionales de la salud de Cuba prestan servicio actualmente en 61 países de África, Centroamérica y Asia, según datos oficiales.
Los médicos cubanos trabajan en esos países en zonas pobres que carecen de cobertura médica.
El gobierno de la isla defiende estas prestaciones médicas y asegura que lo que recibe por ellas le permite mantener sus propios sistemas gratuitos de salud y educación.
Washington, enemigo de La Habana, ha denunciado que Cuba paga bajos salarios a sus profesionales y los somete a restricciones de movimiento y vigilancia en los países donde sirven.