Provocación contra cruces en las montañas
Christian Meier, ateo inveterado, transportó su ‘escultura de la libertad’, una media luna de tres metros de altura, a una montaña del cantón Appenzell Rodas Interior.
Con esa medida, que considera una «divertida provocación»Enlace externo, el artista pretende cuestionar la ubicación de cruces cristianas en las cumbres de diversas montañas.
“Como hay tantas cruces en los picos de las montañas, me surgió la idea de presentar un contraste igualmente absurdo”, señaló el artista al portal noticioso Watson.En su opinión, la religión es una «cuestión privada” y los símbolos cristianos no deben ser colocados en las cúspide.
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