El videoarte en América Latina

'A Logo for América', 1987/2003. Videoinstalación expuesta en la Time Square de Nueva York en 1987. © Alfredo Jaar

La Galería Daros de Zúrich presenta actualmente la exhibición 'Para Usted', que reúne numerosas creaciones consagradas al vídeo y a grandes instalaciones de 22 artistas de diversos países de Latinoamérica.

Un total de 35 trabajos referentes a los últimos doce años de creación del videoarte latinoamericano, que no ha dejado de denunciar la desastrosa situación política y social que impera en la región.

Los artistas que participan en la muestra tienen entre 33 y 73 años de edad y son originarios de México, Cuba, Brasil, Panamá, Guatemala, Colombia, Chile, Argentina, Costa Rica, Uruguay y Venezuela.

Cada uno de los vídeos ha sido expuesto siguiendo una temática en común. En ellos se tocan ciertos tópicos que invitan a una seria reflexión sobre el estado actual de esas naciones. Otras veces, en cambio, irritan e incomodan por la violencia de algunas escenas.

La voz implacable de las mujeres

Un tema penoso y delicado que figura en particular en las producciones de las artistas es el de violencia sexual y la violación de los derechos humanos.

Sin olvidar su propia identidad cultural, son ellas, justamente las mujeres, quienes toman la palabra para abordar esa dura realidad que prevalece en buena parte de las sociedades latinoamericanas.

Entre éstas se encuentra la guatemalteca Regina José Galindo con su ‘perfomance’ titulada ‘Perra’ (2005), en la cual se plantea el mundo brutal en el que vive. Y la brasileña Leonora de Barros presenta ‘No quiero ver’, una mujer encapuchada suplicando no querer ver más la humillación o la tortura que la rodea.

La costarricense Priscilla Monge, con su inesperada ‘Lección de maquillaje’ (1998), denuncia la triste verdad escondida bajo los productos de belleza que un hombre aplica sobre el rostro golpeado de una joven.

La colombiana Clemencia Echeverri, en su videoinstalación ‘Treno’ (2007), habla de los campesinos víctimas de los conflictos entre la guerrilla y los paramilitares, cuyos cuerpos hacen desaparecer en la corriente del río Cauca.

Metáforas de la violencia

Por su parte, las creadoras mexicanas llevan el videoarte a sus últimas consecuencias. Varias de ellas recurren a elementos que remiten a la cultura de México, sirviéndose de un lenguaje áspero y despiadado, con una dosis implacable de humor negro que desestabiliza inmediatamente al espectador.

Ximena Cuevas, en ‘El diablo en la piel (1998), representa a una mujer mordiendo convulsivamente un chile para después untárselo en los ojos y así provocar el llanto.

Con sus fotografías, vídeos e instalaciones muy apreciadas en galerías de Nueva York, Londres, Berlín, Viena y Ciudad de México, Teresa Margolles crea un arte que no entra en el circuito del consumo.

El carácter sociológico de sus trabajos hace que la artista permanezca en contacto con la escena de las drogas, con el problema de la corrupción y con los cuerpos de personas muertas no identificados que aparecen en las calles de la inmensa urbe mexicana.

Del mismo modo, Teresa Serrano aborda el tema de las obreras que amanecen diariamente violentadas y asesinadas en Ciudad Juárez, delitos que pasan impunes ante los ojos cerrados de la ‘ley’. Su obra ‘La piñata’ (2003) es una muñeca de cartón colgada de una cuerda que un hombre destruye encarnizadamente a palos hasta hacerla desaparecer.

La reivindicación de lo que es propio

Otras videocreaciones que se exhiben en la Galería Daros reivindican la propia identidad cultural de América Latina.

Es el caso de Juan Carlos Alom con ‘Habana Solo’ (2000). Este gran intérprete de jazz hace coincidir su música con escenas de la vida diaria en La Habana, representando a artesanos trabajando, a chicos nadando en el mar, a mujeres haciendo la compra y, por supuesto, no podía faltar, todos bailando al ritmo del sabroso son cubano.

Siguiendo por esa misma línea se expone del chileno Alfredo Jaar ‘A logo for America’ (1987/2003). Se trata de un videoinstalación donde figura el contorno de los Estados Unidos con su bandera, sobre el cual está escrito de un modo provocador: ‘This Is Not America’ (Esto no es América).

Esta obra dura casi un minuto y fue instalada durante un mes nada menos que en la conocida ‘Time Square’ de Nueva York en 1987. Cada seis minutos el logotipo entraba en función, ¿acaso para replantear la idea que se tiene de América? ¿O quizá para rescatar la identidad de un continente, que se ha visto despojado de su propio nombre por la nación más poderosa del planeta?

Las creaciones que se exponen en la Galería Daros de Zúrich no pretenden ser un compendio de todo lo que se ha producido en el videoarte latinoamericano, pero sí brindan un buen panorama de lo más destacado en este campo.

Sin embargo, hay que decir que los vídeos presentados carecen, por desgracia, de notas explicativas más amplias que permitan comprender mejor las escenas, sobre todo para un espectador no familiarizado con la realidad de América Latina.

La exposición ‘Para Usted’ (For You) cerrará sus puertas al público el próximo 6 de septiembre.

Araceli Rico, Zúrich, swissinfo.ch

Daros Latinoamérica

La prestigiosa Colección Daros Latinoamérica de Zúrich es la colección de arte contemporáneo latinoamericano más grande que existe en Europa.

Reúnen más de mil trabajos de cien artistas e incluye esculturas, pinturas, dibujos, fotografías, vídeos, instalaciones y piezas de sonido.

La Colección Daros se ha concentrado fundamentalmente en el trabajo artístico de los últimos veinte años, desarrollado por autores de toda América Latina, incluyendo las décadas de 1960 y 1970.