Las dimensiones del arte constructivista en Brasil

En Zúrich, recopilación de trabajos brasileños de los años 50 y 60. A.Burger

La Casa del Arte Constructivista de Zúrich abre por primera vez sus puertas en Europa a la prestigiosa colección de arte brasileño reunida por Adolpho Leirner.

Esta colección se ha impuesto como uno de los más ricos e importantes conjuntos de creaciones que en Brasil han destacado en la corriente del constructivismo; tendencia artística surgida en Europa hacia 1920 que proponía crear obras integradas a la producción industrial y a la técnica.

Desde 2007 esta singular recopilación de trabajos de artistas constructivistas brasileños, que data de los años 50 y 60, forma parte del Museo de Bellas Artes de Houston.

En Brasil, el arte concreto-constructivista coincidió con una era de prosperidad económica registrada en particular en la expansión de su industria petrolera, en el crecimiento vertiginoso de sus ciudades y en 1960 en el levantamiento de su moderna y asombrosa capital, Brasilia.

El gran impulso financiero que en aquellos años se dejó sentir en este país sudamericano, repercutió en una acelerada difusión de la cultura permitiendo fundar nuevos museos e instituciones culturales en apoyo a la creación artística.

Del mismo modo, llegaron a la nueva capital y a otras ciudades representantes de la vanguardia europea y estadounidense, lo cual les dio a los brasileños la posibilidad de intercambiar experiencias estéticas y creativas nunca antes pensadas.

Brasil y Suiza entablan un diálogo

Un ejemplo significativo de ese fructuoso intercambio establecido entre Brasil y Suiza fue el de Max Bill, quien en 1951 ya había realizado su primera gran retrospectiva en el recién inaugurado Museo de Arte de São Paulo, y ese mismo año recibió una distinción por su escultura “dreiteilige einheit” en la primera Bienal de São Paulo.

A partir de ese momento se tendió un puente de encuentros y discusiones entre este creador europeo y los seguidores brasileños del arte concreto-constructivista, todo lo cual culminó en la exhibición: “Max Bill 100” en la Casa del Constructivismo de Zúrich en 2008.

El amor y la paciencia del coleccionista

El coleccionista Adolpho Leirner inició su trabajo incansable de recopilación hacia los años 50, logrando reunir composiciones, esculturas y litografías de artistas de su propio país, que hoy día forman una estupenda serie de casi 90 piezas expuestas en la muestra zuriquesa.

El contacto que Leirner tuvo no sólo con la vanguardia artística de su época, sino con comerciantes de objetos de arte, hizo que su colección se sistematizara hasta convertirse en un punto de referencia indispensable para conocer el rumbo del arte moderno en Latinoamérica.

Nuevas y diferentes propuestas

En la colección Adolpho Leirner se incluyen personalidades notables del constructivismo como Mira Schendel, nacida en Zúrich, con cuyas dos de sus obras, “Sem título” de 1954 y 1962 sucesivamente, se abre esta exhibición.

De Danilo Di Prete se presenta su elegante y sugestivo relieve monocromo (1960-65), que es una combinación entre cuadro y objeto, y las telas de Cícero Dias, uno de los más destacados seguidores de la abstracción geométrica en Brasil.

Por su parte, María Helena Andrés toma como base anotaciones musicales para construir sus delicadas abstracciones, como “Fantasia de ritmos” (1958), y María Leontina medita con su “Os episódios ll” (1959) sobre la transición entre figuración y abstracción.

Del racionalismo a la intuición individual

Entre los artistas brasileños que destacaban por la severidad de sus diseños geométricos, científicos y racionalistas, estaban los del grupo llamado Ruptura (1952-1959) de la ciudad de São Paulo.

En estos creadores persistía el estudio meticuloso en la construcción concreta y exacta de sus obras, en las cuales los diseños geométricos se combinan con rigor y fuerza para alcanzar el equilibrio y la pureza de los colores a la que se deseaba llegar.

El Grupo Ruptura compuesto por Waldemar Cordeiro, Luís Sacilotto, Lothar Charoux y Geraldo de Barros, seguía los lineamientos del Arte Concreto propuesto en 1930 por el neerlandés Theo van Doesburg y desarrollado más adelante por el suizo Max Bill.

Mientras que la vertiente del Neo-concretismo (1959), surgido como una reacción a los postulados del racionalismo radical del Grupo Ruptura, se inclinaba más bien por reincorporar la subjetividad individual del artista en el seno de la propia creación artística, dejando de alguna manera que la vida entrara en ella.

Entre los representantes más sobresalientes de esta última tendencia se encontraban Willys de Castro, Hélio Oiticica y en particular las construcciones sorprendentes de Lygia Clark; trabajos excepcionales en donde la forma se conjuga magistralmente a una concepción del espacio llena de libertad en la que el espectador queda inmediatamente involucrado.

La exhibición “Dimensiones del arte constructivista en Brasil – La Colección Adolpho Leirner”, presentada en la Casa del Constructivismo de Zúrich, cerrará sus puertas el 21 de febrero de 2010.

Araceli Rico, swissinfo.ch, Zúrich

Adolpho Leirner

La colección de arte concreto-constructivista reunida por el brasileño Adolpho Leirner,
es considerada una de la recopilaciones artísticas internacional más importante en su género.

Esta colección, expuesta por primera vez en Suiza en la Casa del Constructivismo de Zúrich, representa un documento de gran valor para conocer el rumbo que ha tenido el arte moderno en las últimas décadas en América Latina.

Adolpho Leirner nació en Saõ Paulo (Brasil) en 1935. Estudió desarrollo textil y diseño en Inglaterra de 1953 a 1957. Interesado en arte, diseño y arquitectura, comenzó desde muy pronto a tomar contacto con el arte constructivista y en 1961 adquirió de Milton Dacosta la primera obra que daría inicio a la colección que lleva su nombre.