Momentos de la historia en los que Suiza perdió la confianza de la ciudadanía
Algunos acontecimientos hacen tambalear tanto las convicciones y certezas que aún décadas después vuelven a ser objeto de debate y de interpretación. ¿En qué momentos de la historia perdió la Suiza moderna la confianza de la ciudadanía en sus instituciones?
1918: Huelga general en Suiza
Suiza tuvo su última hambruna al final de la Primera Guerra Mundial. Se racionaban los alimentos, subían repentinamente los precios y los alquileres y se abría la brecha entre ricos y pobres. La situación estalló en 1918 con la primera Huelga general del país. Más de 250.000 trabajadores y trabajadoras abandonaron sus puestos de trabajo y salieron a la calle.
La burguesía temía una revolución como en Rusia, y la izquierda veía cómo el Ejército se oponía a sus demandas mediante el uso de la violencia. El Ejército mató a tiros a tres huelguistas. Los ejes de conflicto de entonces siguieron marcando la política suiza hasta la época de la Guerra Fría.
1940: la capitulación retórica de Marcel Pilet-Golaz ante la Alemania nazi
En junio de 1940 se rindió Francia ante el poderío de la Alemania nazi. Europa se encontraba en un estado de shock. Como reacción a este “tremendo acontecimiento”, el consejero federal Marcel Pilet-Golaz se dirigió a la nación en una alocución radiofónica, en la que, en un tono susurrante, hizo un llamamiento para que Suiza se acomodara a las “nuevas circunstancias en Europa”.
Muchos entendían el mensaje como una exhortación a la capitulación frente a Hitler. Por este discurso, el Consejo Federal perdió la confianza de muchos suizos y suizas. Pilet-Golaz acabó dimitiendo en 1944 por su mala fama de “derrotista acomodadizo”.
1990: el Escándalo de las fichas o el Estado como espía
Poco después de la caída del muro de Berlín en 1989, se supo que las autoridades suizas habían vigilado a personas y organizaciones de orientación izquierdista durante toda la Guerra Fría, al igual que los Estados comunistas del Pacto de Varsovia. Desde el año 1990, un total de 700.000 personas habían sido espiadas por el Estado.
Durante décadas, los agentes del Estado anotaban todo tipo de observaciones en sus fichas, menospreciado la esfera privada de los ciudadanos. Y, por si fuera poco, se descubrió en 1990 un grupo secreto del Ejército que operaba de forma encubierta para organizar la resistencia en el caso de una ocupación soviética de Suiza. Los escándalos del “Estado espía” y del “Ejército secreto” hicieron que muchos intelectuales y trabajadores culturales boicotearan la fiesta del 700º aniversario de la Confederación en 1991.
2001: el hundimiento de Swissair hiere el orgullo nacional
En 2001, poco después de los atentados del 11-S, los aviones de la aerolínea Swissair se quedaron en tierra. La compañía tenía tantas deudas que no podía pagar ni una sola factura más. Durante mucho tiempo, la aerolínea suiza fundada en 1931 era conocida por el mote de “banco volante”. Con esta metáfora se hacía referencia a la alta capacidad financiera y a la estabilidad de Swissair. Los atentados terroristas contra el Word Trade Center pusieron en apuros a muchas compañías aéreas en todo el mundo. Pero en el caso de Suiza, el Grounding o la “inmovilización en tierra” de la flota se atribuyó al fracaso de las élites económicas suizas, que fueron responsabilizadas por haber llevado la aerolínea a la ruina con sus falsas recetas y por no haber estado dispuestos a salvarla.
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Se cumplen 15 años del fin de Swissair
2001: un loco homicida desestabiliza los cimientos de la democracia abierta
El 27 de septiembre de 2001, un loco homicida llamado Fritz Leibacher asaltó la sede del Parlamento cantonal de Zug y empezó a disparar indiscriminadamente durante el pleno de sesión. El autor del atentado mató a 14 políticos y políticas e hirió a varias personas. Luego hizo estallar una bomba de fabricación casera, antes de ejecutarse a sí mismo. Consiguió entrar en el edificio sin ser molestado por agentes de seguridad gracias a un uniforme de policía que se había confeccionado él mismo.
Después del ataque se reforzaron en todo el país las medidas de seguridad, que durante mucho tiempo se habían considerado superfluas. También en el Palacio federal se estableció en otoño de 2001 una “Sección Seguridad del Edificio Parlamentario”, un cuerpo de seguridad armado que desde entonces protege el edificio.
2008: el primer rescate urgente de un gran banco
En septiembre de 2008 se hundió en pocos días la confianza en el sector financiero. También la UBS se vio afectada, no en último lugar por las inversiones arriesgadas que el banco había realizado en EE. UU., donde la crisis tenía su origen.
País estable, moneda estable, modo de vida estable: en comparación con otros países hay muchas cosas que funcionan bien en Suiza.
En esta serie, SWI swissinfo.ch se dedica a la confianza en las instituciones, que constituye la base para que una democracia funcione.
Indagamos en las causas históricas de por qué para algunos el mayor problema de Suiza es el aburrimiento, pero también abordamos cuestiones como el grado actual de la confianza ciudadana en las instituciones y los desafíos que el país alpino tendrá que afrontar en el futuro.
Mediante el recurso al derecho de urgencia, el Consejo Federal suizo decidió rescatar el gran banco con ayudas financieras de seis mil millones de francos de las arcas federales y 54 mil millones del Banco Nacional Suizo. El Gobierno dijo entonces que el banco “era demasiado grande para caer”. La crisis económica dañó la confianza mucho más allá de los mercados financieros: en ningún momento tuvo la población tan poca confianza como en los años de 2009 a 2011.
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El día que Suiza rescató a su principal banco
Texto adaptado del alemán por Antonio Suárez Varela
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