Annemarie Schwarzenbach (izq) y Ella Maillard, unas semanas antes de su salida en junio de 1939, a bordo de este Ford Deluxe, con rumbo a Afganistán. (Keystone/Photopress-Archiv)
Keystone/Photopress-Archiv
Una última mirada a Suiza. ¿Por qué estamos saliendo del país más bello del mundo? ¿Qué nos impulsa a seguir por desolados caminos rumbo al Este? Paso de Simplon, 1939. (Archivo Suizo de Literatura)
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Campesinos en Plovdiv, en el sur de Bulgaria. (Archivo Suizo de Literatura)
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Limpieza ritual de los pies ante el mausoleo del imán Reza Shrine en Mashhad, Irán. (Archivo Suizo de Literatura)
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Ella Maillard ante el consulado británico en Mashhad, Irán. (Archivo Suizo de Literatura)
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Minarete del complejo de Musalla, en Herat, Afganistán. (Archivo Suizo de Literatura)
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En ruta hacia el poblado de Shewaki, en Afganistán. (Archivo Suizo de Literatura)
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Entre Peshawar y Lahore, en India. (Archivo Suizo de Literatura)
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En la ciudad de Madhogarh, en India. (Archivo Suizo de Literatura)
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En el puerto de Massaua, en Eritrea. (Archivo Suizo de Literatura)
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A la espera en el puerto de Massaua, en Eritrea. (Archivo Suizo de Literatura)
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De retorno a Suiza: Airolo, 25 de enero de 1940. (Archivo Suizo de Literatura)
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Junio de 1939. En vísperas de que estalle la Segunda Guerra Mundial, un viejo Ford sale de Suiza con dirección a Afganistán. A bordo, dos mujeres: la escritora Ella Maillard y la periodista Annemarie Schwarzenbach.
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Debilitada por la morfina, de la que es dependiente, la periodista y fotógrafa Annemarie Schwarzenbach se reestablece en su casa de Sils, un pueblo al pie de los Alpes Grisones. Ahí cobra forma el sueño de un viaje a Oriente con su amiga, la escritora ginebrina Ella Maillard.
En el verano de 1939, las pioneras suizas emprenden un viaje memorable, dejando atrás una Europa que se sume en el fascismo y el nazismo. Al volante del Ford atraviesan los Balcanes, se dirigen a Irán y Afganistán, y luego a la India.
La relación entre las dos mujeres se desploma bajo el peso de la morfina, de la que Schwarzenbach no puede sustraerse. En octubre de 1939, sus caminos se dividen. Ella permanece en la India a la espera del fin de la guerra, y Annemarie viaja a Eritrea, entonces colonia italiana.
Annemarie Schwarzenbach regresa a Suiza en enero de 1940 y fallece dos años después tras una caída de bicicleta en Sils. Setenta y cinco años después de su muerte, el Archivo Suizo de Literatura publica más de 3 000 fotografías captadas por ella durante sus numerosos viajes.
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