“El activismo digital de los indios yaquis logra cambios”
México cuenta con 47 grupos étnicos indígenas y muchos tienen formas de gobierno distintas a las reconocidas por la legislación federal. Los indios yaquis sufren problemas de abastecimiento de agua. Marisa Elena Duarte, investigadora de la Universidad Estatal de Arizona, analiza cómo este pueblo del norte de México ha recuperado algunos derechos, gracias al trabajo colectivo y el activismo digital.
swisinfo.ch: Sus investigaciones revelan cómo esta comunidad indígena mexicana, contrariamente a lo que mucha gente podría pensar, ha convertido la tecnología digital en una de sus principales herramientas de activismo…
Los yaquis
Los yaquis se autonombran ‘yoremes’ (término que significa hombre o persona). Originalmente ocupaban la franja costera y el sureste del estado mexicano de Sonora, al norte del país, bordeando las riberas del río Yaqui hasta el cerro Tetakawi.
Pero han perdido presencia y territorio desde los años 40. Actualmente solo se encuentran en los municipios de Bácum, Cajeme, Guaymas y Empalme.
Son un pueblo que defiende su derecho a autogobernarse, lo que ha supuesto múltiples confrontaciones con los gobiernos locales y federales de turno.
Con la construcción de la presa de la Angostura (1941) y la del Oviachic (1945), los yaquis perdieron el recurso indispensable del agua, por lo que muchos tuvieron que migrar masivamente a los centros urbanos del estado. Aun así, siguen defendiendo su derecho a obtener agua del río Yaqui y a mantenerse en sus tierras, que consideran sagradas.
Fuente: Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (México)
Marisa Elena Duarte: Así es. Son comunidades que se encuentran muy conectadas y utilizan este tipo de infraestructura para ganar derechos, pero también para comunicarse mejor entre tribus en temas de carácter ordinario.
Hace unos años, la radio independiente era una de sus principales herramientas. Lo era sobre todo por tratarse de un medio amigable, utilizable de forma analógica o digital, y porque permitía a la gente lo mismo escuchar un mensaje de protesta que música, noticias, promoción de eventos. Uno puede tener encendida la radio en cualquier lugar y la difusión con frecuencia se realizaba en lenguas indígenas.
Pero en la actualidad observamos toda una transformación gracias a los teléfonos inteligentes y a las ‘laptops’ que son cada vez más utilizados por la comunidad yaqui.
swissinfo.ch: Un caso bien conocido por los medios de comunicación y difundido en las redes sociales está vinculado a la escasez de agua que viven los yaquis. ¿Cómo describiría usted este problema?
M.E.D.: Existe un movimiento llamado por los yaquis Namakasia. Busca esencialmente la justicia y el derecho de la gente a preservar el río Yaqui, de Sonora [norte de México]. Se trata de una tierra agrícola que es sagrada para ellos. Una superficie codiciada desde hace muchos años, desde los tiempos de la Nueva España.
Con el paso de los años, se han construido ahí presas como El Novillo o acueductos como el Independencia sin consultar con las tribus yaquis y sus ocho gobiernos. Aunque esto sucedió hace mucho tiempo, provoca problemas constantes porque existe un tratado de paz entre los gobiernos federal y local y este grupo indígenas desde hace nueve décadas que se viola de forma sistemática. Son reglas que deberían respetarse.
swissinfo.ch: El agua es algo sagrado para los yaquis y ha sido motivo de muchas luchas, y de que este pueblo se organice para tener acceso a la misma…
M.E.D.: Sí, no aceptan que se les niegue el derecho a acceder a las aguas de este río. Más aún cuando saben que hay muchas firmas industriales que sí tienen acceso a estas presas, se sirven de ellas. Los yaquis se quejan de que las cosas no funcionan, de que la iniciativa privada utiliza esta riqueza acuífera para su provecho, y que además la contamina. La visión de los indios yaquis es compartida por muchos activistas medioambientales que reconocen el abuso que se comete.
swissinfo.ch: Uno de los principales temas de debate del congreso ‘Por la gente’, celebrado en Phoenix en diciembre, fue cómo el trabajo organizado de la población permite cambiar y mejorar su entorno. ¿Cómo lo han conseguido los yaquis?
M.E.D.: Han utilizado diversas estrategias. Por supuesto, han echado mano de medios legales, recogen evidencias, y realizan un intenso trabajo de activismo que incluye marchas, protestas, bloqueos de carreteras.
Pero el activismo digital ha sido muy importante. Utilizan las redes sociales para defender sus derechos, pero también para concienciar a la gente. Utilizan teléfonos inteligentes, pero también crean blogs, difunden videos.
La gente participa. Por ejemplo, en 2010, hubo un video que tuvo una gran resonancia. Se trataba de un grupo de hombres jóvenes que visitaba una de estas presas para tomar agua, recurso hídrico que proviene del propio río de su región. Sin embargo, los indios yaquis tenían prohibida la entrada. Fueron golpeados. Este testimonio se difundió y fue muy importante en su momento.
swissinfo.ch: ¿Podemos hablar de cambios reales, o solo de una atención mediática temporal que después se difumina?
M.E.D.: Sí, por supuesto, el activismo digital de los yaquis cambia cosas. Dan a conocer sus problemas y ejercen presión social. Representantes de las Naciones Unidas han visitado esta región para investigar los abusos de los que hablan los indígenas en las redes sociales y que son validados por otras organizaciones.
swissinfo.ch ¿El activismo digital indígena que describe es una prerrogativa reservada a los más jóvenes, que son nativos digitales, o se involucra toda la población?
M.E.D.: La gente participa, sin importar la edad, pero no de la misma forma. Para los indios yaquis es muy importante la sabiduría que aportan los más viejos, con ellos hablan y comentan. Luego, los más jóvenes son quienes tienen un acceso más directo a las redes sociales.
En un país como México, donde los gobiernos no dan respuesta a las necesidades de la gente, esta necesita organizarse y actuar.
En el caso de los yaquis, no es un fenómeno como el que se observaba en España con el M-15, que estaba en el ambiente. Todo el mundo hablaba de ello y se sentía parte de este movimiento. Aquí hablamos de problemas muy específicos y locales, que tienen que ver con aldeas y derechos concretos.
Además, no podemos perder de vista que los grupos activistas frecuentemente también tienen que ocuparse de resolver problemas como ver cómo van a comer o dónde van a dormir. Hablamos de comunidades que tienen que resolver sus necesidades básicas.
Pero como una de ellas es justamente el acceso al agua, están dispuestas a trabajar con ahínco y a movilizarse para conseguirla.
En materia de difusión, los jóvenes juegan un papel muy importante. Muchos estudiantes o universitarios pertenecen a estas comunidades, pero viven en urbanizaciones más grandes una parte del tiempo para realizar sus estudios.
Son ellos los que difunden materiales gráficos, videos, los que crean blogs o grupos abiertos y cerrados en Facebook donde se debaten los problemas de sus comunidades.
swissinfo.ch: Como experta en la historia de los indios yaquis, ¿hacia dónde considera que se dirige el trabajo activista que realizan como comunidades organizadas?
M.E.D.: Pienso que hacia seguir teniendo visibilidad. En México, los indígenas en general, no reciben apoyo en el cumplimiento de sus derechos ni atención a sus necesidades.
La visibilidad es pues muy importantes. Deben hacerse notar, comunicar sus necesidades. Exigen y necesitan el respeto del gobierno central a acuerdos firmados en el pasado, pero también necesitan el respeto de los gobernadores de estados vecinos al de Sonora, y el de los profesores que educan a sus hijos.
¿Cómo van a obtener respuestas y generar cambios si nadie los ve? ¿Si nadie sabe que existen? De ahí la importancia del activismo y, sobre todo, de organizarse y pactar como comunidad.
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