Detenido el magnate austríaco de la construcción René Benko, acusado de fraude

Viena, 23 ene (EFE).- El magnate de la construcción René Benko, hasta 2023 uno de los hombres más ricos de Austria, fue detenido este jueves en Innsbruck (Tirol) acusado de fraude y quiebra fraudulenta, y enviado a una cárcel en Viena, donde se decidirá si se declara la prisión preventiva.

La Fiscalía austríaca anticorrupción, que ordenó la detención inmediata del empresario ante el peligro de riesgo de ocultación de pruebas y reincidencia, alega que el fundador de la sociedad inmobiliaria Signa «falsificó una factura e intentó ocultar activos y protegerlos del acceso de los acreedores», informó la radiotelevisión pública ORF.

La quiebra de Signa en noviembre de 2023 desencadenó una cascada de insolvencias de decenas de sus filiales en varios países europeos, sobre todo en Austria, Alemania, Suiza e Italia.

Cinco fiscalías de cuatro países europeos (Alemania, Austria, Italia y Liechtenstein) están investigando a Benko en el marco de la quiebra de su imperio constructor e inmobiliario.

Tras la quiebra, el magnate tuvo que desprenderse también de su edificio más emblemático, el rascacielos Chrysler en Nueva York, además de suspender enormes obras en plena construcción en Viena (el centro comercial Lamarr) y en Hamburgo (la torre Elb), entre otras.

Benko, de 47 años, fue durante años uno de los constructores más exitosos de Europa y su fortuna personal llegó a ser superior a los 5.000 millones de euros.

Para poder llevar adelante sus grandes proyectos, el magnate mantenía estrechas relaciones con las altas esferas de la política y del mundo de los negocios, especialmente en su Austria natal, donde además compró cerca de 25% de dos importantes diarios de tirada nacional (Kronen Zeitung y Kurier).

Pese a la quiebra de Signa, impulsada por la fuerte subida de los tipos de interés a partir de 2023, Benko mantenía hasta ahora un lujoso estilo de vida, financiado a través de una fundación familiar, controlada oficialmente por su madre.

El empresario -que hizo perder cientos de millones de euros a importantes inversores en Alemania y Arabia Saudí- fue trasladado tras su detención hoy en Innsbruck a una cárcel en Viena.

Un juez decidirá mañana, viernes, si se decreta la prisión preventiva, y lo más probable es que sea sin posibilidad de pagar una fianza para salir en libertad, informó el diario Kronen Zeitung.

Mientras que el empresario era detenido en su mansión en Innsbruck, la Policía registraba otra de sus vivienda de lujo en Lech (Tirol) y su oficina central en el centro de Viena. EFE

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