Díaz-Canel califica como «acto de brutalidad» el posible envío de migrantes a Guantánamo
(añade la declaración al respecto del Ministerio de Relaciones Exteriores)
La Habana, 29 ene (EFE).- El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel calificó este miércoles como un «acto de brutalidad» el anuncio de Estados Unidos de que habilitará 30.000 camas en la base naval de Guantánamo (Cuba) con el fin de detener a inmigrantes indocumentados.
El mandatario reprobó la idea del Gobierno del republicano Donald Trump y aseguró que, de ponerse en marcha, culminará con los migrantes en «las conocidas cárceles de tortura y detención ilegal» dentro la instalación estadounidense.
«En un acto de brutalidad, el nuevo Gobierno de EE.UU. anuncia el encarcelamiento en la Base Naval en Guantánamo, ubicada en territorio de Cuba ilegalmente ocupado, de miles de migrantes que expulsa forzosamente», criticó Díaz-Canel en redes sociales.
De igual forma, el ministro de Relaciones Exteriores de la isla, Bruno Rodríguez, aseguró en redes que la medida es una muestra del «desprecio hacia la condición humana y el derecho internacional» de Washington.
Una declaración de la Cancillería difundido horas más tarde advertía además de que el «empleo irresponsable» de la base para este propósito «generaría un escenario de riesgo e inseguridad», «amenazaría la paz y se prestaría para errores, accidentes y malas interpretaciones que podrían alterar la estabilidad y provocar serias consecuencias».
Destacó asimismo que el territorio donde Trump propone recluir a hasta 30.000 inmigrantes indocumentados «no pertenece a Estados Unidos», sino que es parte de Cuba «que permanece militarmente ocupada de modo ilegal y contra la voluntad de la nación cubana».
Trump, anunció este miércoles que firmará próximamente una orden ejecutiva para instruir al Pentágono a que habilite 30.000 camas en la base.
«Tendremos 30.000 camas en Guantánamo para detener a los peores inmigrantes ilegales criminales que son una amenaza para el pueblo estadounidense», aseguró en unas declaraciones en la Casa Blanca en ocasión de la firma de una ley contra migrantes con delitos menores.
«Algunos son tan peligrosos que ni siquiera confiamos en sus países de origen para que se los queden, porque no queremos que regresen. Así que los enviaremos a Guantánamo», dijo.
A este respecto, el zar de la frontera de Trump, Tom Homan, agregó que el centro ampliado será para recluir a «lo peor de lo peor». También aclaró que seguirá siendo el ICE la agencia responsable de operar estas instalaciones.
El Pentágono opera en la base de Guantánamo un centro de detención para inmigrantes, el cual administra de manera independiente a la prisión destinada a sospechosos de terrorismo.
Los migrantes que llegan son aquellos que las autoridades estadounidenses interceptan en el mar cuando intentan alcanzar las costas del país, principalmente procedentes de Cuba y Haití.
La población migrante en la base suele ser muy baja. De acuerdo con datos publicados por The New York Times, entre 2020 y 2023 el centro solo albergó a 37 personas.
Un reportaje publicado en 2024 por el mismo diario, basado en informes internos del Gobierno, reveló que los detenidos enfrentan condiciones precarias, incluyendo denuncias de que son obligados a usar gafas de visión opaca durante los traslados dentro de la base, que sus llamadas con abogados son monitoreadas y que algunas instalaciones están llenas de ratas. EFE
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