Estudiar y trabajar, paliativo contra el paro juvenil
El desempleo entre los menores de 24 años genera estragos en Europa. 43 de cada 100 jóvenes españoles carecen de empleo. En Suiza son tres de cada cien.
Según la OCDE, la formación dual es la clave del éxito helvético: fusionar el aprendizaje en las aulas con el trabajo en empresas. La Comunidad de Madrid explora nuevas sendas y puso en marcha dos programas piloto bajo estos principios.
Suiza, como el resto de Europa, se inquieta por el futuro de los jóvenes de cara a 2012. Aquellos que tienen menos de 24 años no siempre encuentran oportunidades que les permitan insertarse y hacer carrera en el mercado productivo.
Sin embargo, la estadística internacional concede a Suiza un voto de confianza con respecto a las bondades de su modelo educativo, que lejos de ser perfecto ha conseguido que la tasa de paro entre los jóvenes sea muy cercana a la que registran sus colegas de más de 25 años.
Una estructura dual que concede igual importancia a la formación en aulas que al trabajo directo en las empresas es la clave del esquema.
Del 3,2 al 43%
La Secretaría de Estado de Economía (Seco) presentó este lunes (07.11) sus más recientes cifras sobre desempleo. La tasa de paro nacional es del 2,9% y la que afecta a los jóvenes (entre 16 y 24 años) del 3,2%. El paraíso desde la perspectiva de Bruselas.
De acuerdo con cifras del Eurostat, autoridad estadística de la Unión Europea (UE), en septiembre pasado, la tasa de paro tocó al 43% de los jóvenes españoles, casi uno de cada dos.
“Como en muchos países, para los jóvenes helvéticos también es difícil encontrar un empleo, especialmente cuando carecen de experiencia. Pero cuando observamos las estadísticas de otros países, es mejor ser un joven suizo que uno francés o de cualquier otro país”, afirma David Talerman en su análisis ¿Y si hablamos de Desempleo en Suiza?.
Talerman es autor de la guía Trabajar y Vivir en Suiza, un documento de más de 480 páginas que la Oficina Federal de Migración considera una obra de referencia para todo aquel que quiera conocer las entrañas del mercado laboral suizo.
Las cifras de Seco confirman la visión de Talerman. Nada es perfecto, pero a la luz de la estadística el paro entre los menores de 24 años se redujo al 21% durante el último año, con lo que en octubre del 2010 había 22.553 parados frente a los 17.710 actuales.
La OCDE y el nuevo aprendiz
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) conoce la debilidad de Europa en este tema. Este 2011 publicó un minucioso y vasto estudio para comparar los sistemas educativos de sus distintos países miembros.
Educación en un vistazo 2011 dedica un amplio apartado a diagnosticar los aciertos y las carencias del sistema helvético, sobre el que destaca que “alrededor del 65% de los estudiantes que terminan la educación secundaria obligatoria lo ha hecho bajo esquemas que combinan trabajo en las aulas y en las empresas”.
El esquema de empleo en alternancia solo es una realidad para el 2% de los estudiantes españoles del mismo nivel, explica el catedrático en Economía de la Universidad de Oviedo, Florentino Felgueroso.
Inquieto también por este lastre económico, el también investigador de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA) de España publicó en octubre el análisis Paro juvenil: ¿Qué hacen los suizos para que les vaya tan bien.
En él afirma uno de los principales activos que posee Suiza se basa en echar mano de la “figura del aprendiz, que tendría su origen ya en la Edad Media, en asociaciones gremiales, y se habría mantenido desde entonces cambiando de forma para integrarse en el sistema educativo reglado”.
Mostrar más
OCDE
Tras la codiciada experiencia
La principal ventaja del modelo dual, explica Florentino Felgueroso, es que la transición de la escuela al mercado laboral no se pospone hasta el final de los estudios. Al final de la educación secundaria postobligatoria, los estudiantes disponen ya de una amplia experiencia laboral.
Un sistema que solo puede funcionar, “si existe plena predisposición de empresas, agentes sociales y autoridades educativas que ofrecen los cursos y supervisan la formación”, señala el investigador de la FEDEA. “En Suiza, cerca del 30% de las empresas participan en este proceso, incluidas las PYME”.
Felgueroso lanza al aire una pregunta cuya respuesta podría cambiar la realidad laboral ibérica: ¿Un modelo así sería factible en España?
Según su visión, los sindicatos estarían a favor de la formación dual y los partidos políticos también. Y cita concretamente al Partido Popular (PP) que está a favor de un esquema de formación de este tipo.
Proyecto piloto madrileño
En el terreno práctico, la Comunidad de Madrid ha decidido explorar nuevos caminos y apostar, en fase experimental, por un modelo educativo que le es ajeno pero que podría ayudar a reducir el problema de desempleo que ha hecho crisis entre los más jóvenes y que ha sido uno de los principales postulados de movimientos sociales apolíticos como el de Los Indignados.
Dos centros de formación profesional madrileños, el Centro Integrado de Formación Profesional ‘Profesor Raúl Vázquez’ y su homólogo Clara del Rey, han puesto en marcha programas de formación dual en informática y aeronáutica.
Las empresas participantes deben becar a los alumnos que aceptan en aprendizaje en sus instalaciones.
El objetivo, explica swissinfo.ch la Consejería de Educación y Empleo de la Comunidad de Madrid, es que en el futuro “las empresas acojan con mayor facilidad a los alumnos que ya conocen el entorno productivo real, lo que mejorará su cualificación”.
Ambos colegios madrileños confirmaron a swissinfo.ch que los programas pilotos están en marcha, pero es prematuro hacer balances.
Los jóvenes suizos encuentran empleo con mucha mayor facilidad que sus vecinos europeos, pero aquellos que no lo consiguen se enfrentan a una situación más precaria que la de las generaciones anteriores.
En abril pasado, la Ley de Seguro del Desempleo (LACI) experimentó una revisión que tendrá por consecuencia que 3.000 jóvenes desempleados pierdan los derechos que les concedía su seguro de desempleo.
Una situación a la que se opusieron organizaciones como la Unión Sindical Suiza, el Consejo Suizo de Actividades para la Juventud o la Unión de Estudiantes de Suiza.
La OCDE sostiene que Suiza posee un sistema de educación eficaz y bien relacionado con el sector productivo.
El 90% de los jóvenes de entre 25 y 34 años tiene un nivel de educación secundaria y una formación que le permite desempeñarse satisfactoriamente en el mercado laboral.
Un porcentaje que en el caso de los hijos de inmigrantes se sitúa en el 70%.
Esta diferencia tendría que corregirse desde las etapas más tempranas de la formación desarrollando dispositivos –en guarderías y educación preescolar- que permitan cerrar la brecha en materia de oportunidades y formación para aquel que esté en formación.
Según La Educación en un vistazo 2011 (OCDE), cerca del 60% de los suizos con estudios secundarios postobligatorios están en programas de formación con empleo en alternancia. Y solo el 7% abandonó los estudios.
El programa experimental de formación dual puesto en marcha por la Comunidad de Madrid en los institutos ‘Profesor Raúl Vázquez’ y ‘Clara del Rey, se inscribe en los ámbitos de la aeronáutica y la informática respectivamente.
Las empresas que participan en este proyecto piloto son Iberia, Cassidian, Swiftair, Zed, Microsoft y Hewlet Packard.
Mostrar más
¿Se aprobará financiar la sanidad de manera uniforme?
Mostrar más
Impuestos sobre la pensión: ningún problema para la comunidad suiza en el exterior
Mostrar más
Relaciones con la UE: Suiza sigue profundamente dividida
Mostrar más
El misterio del busto dorado del emperador Marco Aurelio
Mostrar más
Un suizo fundó las ferias económicas más grandes de Camerún
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.