La inmigración mitiga la falta de trabajadores calificados
La economía suiza se ha recuperado de la crisis de COVID-19; sin embargo, pese al acuerdo de libre circulación de personas con la UE, algunos sectores encuentran dificultades para contratar personal calificado, de acuerdo con un informe del Gobierno divulgado este jueves.
La tasa de desempleo en la primavera de 2022 volvió a su nivel anterior a la pandemia, tanto para los empleados suizos como para los extranjeros, según el 18° informe del Observatorio sobre la Libre Circulación de Personas entre Suiza y Europa, publicado por la Secretaría de Estado para la Economía (SECO).
El estudio subraya que las tecnologías de la información han experimentado un crecimiento particularmente fuerte en los últimos años gracias a la digitalización de la economía. La tasa de desempleo en el sector es muy baja (1,6 %) y el grupo de especialistas suizos en TI refleja esa demanda. Los extranjeros representan casi un tercio de la fuerza laboral del sector, en comparación con el 26% en el conjunto de la economía.
El aporte de la inmigración extranjera para satisfacer la demanda de personal calificado es significativo, de acuerdo con el informe. Sin embargo, a menudo no es posible satisfacer las necesidades del ramo con la contratación de personas de la UE en el marco del acuerdo de libre circulación de personas.
La digitalización continúa y la necesidad de especialistas es alta, explica. La demanda también aumenta en el extranjero y la competencia puede volverse más intensa. Por ello, asienta SECO, la inmigración de terceros países, como EE. UU., Reino Unido o India, a través del sistema de cuotas es especialmente importante.
Buena recuperación
Para SECO, las dificultades de contratación son también una indicación de que la economía suiza va bien. El informe concluye que la economía se ha recuperado de la crisis de la COVID.
Por otra parte, el estudio de SECO refiere que los nacionales de la UE, la Asociación Europea de Libre Cambio (AELC) y de terceros países estaban sobrerrepresentados en los sectores particularmente afectados por las restricciones pandémicas, por lo que resintieron más los efectos de la crisis que la población nativa.
Especialmente durante los primeros meses de la pandemia en 2020, la tasa de desempleo aumentó más para los extranjeros que para los suizos.
El informe de SECO revela también que al cierre de junio de 2022, 92 511 personas estaban registradas como desempleadas, la cifra más baja en 20 años.
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