«Los capitales que abandonan la UE vienen a Suiza»
La plaza financiera helvética es receptora de las inversiones que están abandonando la zona euro tras la decisión alemana de prohibir temporalmente operaciones especulativas.
Arturo Bris, director del programa de Estrategia Avanzada del instituto IMD, de Lausana, reconoce que la volatilidad no ha terminado, pero “tras el restablecimiento económico de Grecia y España, los mercados regresarán a la normalidad”. Entrevista.
swissinfo.ch: Profesor Bris, ¿cuál es exactamente el problema que Alemania intentó atajar con la decisión unilateral que tomó esta semana? (Ver ‘Freno a los mercados repo’)
Arturo Bris: La mayor parte de los bonos soberanos griegos y españoles fueron comprados por instituciones alemanas.
Dichas instituciones han utilizado los bonos para tomar dinero prestado vía sofisticadas operaciones financieras posteriores, que constituyen el llamado mercado ‘repo’ (repurchase agreements) y que actualmente involucra trillones de euros.
En el terreno práctico, un banco alemán como el Deutsche Bank, por citar un ejemplo, utiliza un bono griego y lo ofrece como colateral a una institución ‘X’ para tomar un préstamo. Pero la institución ‘X’ -a la que el Deutsche Bank le ofreció el bono como garantía-, decide venderlo en el mercado (lo que tiene un efecto de deterioro sobre su valor).
Puesto en una analogía más cercana, es el equivalente a que yo hipoteque mi casa, ofreciéndola como garantía al banco para obtener un préstamo, y luego sin que yo lo sepa, el banco venda la casa.
swissinfo.ch: ¿Qué cambiará tras la reforma anunciada por la Oficina Alemana de Supervisión Financiera (BaFin)?
A.B.: Que ahora, el que presta dinero tiene prohibido vender posteriormente los bonos. Una decisión que tiene dos efectos. Primero, el valor de los bonos –griegos en su mayoría– ya no se deteriorará.
Segundo, al no poderse vender los bonos, las instituciones que lo hacían ya no dispondrán del dinero que habrían recibido para luego reinvertirlo en el mercado de valores. Por ello, justamente, las bolsas se han hundido y estamos observando una ‘huída de liquidez’.
Pero hubo más medidas. Otra de ellas, está ligada a la prohibición temporal de los CDS (Credit Default Swaps o seguros contra la quiebra de una institución). Muchos agentes compraron seguros contra la quiebra de los bonos europeos, en particular de los griegos y los españoles.
Es algo equivalente a permitir que la persona ‘A’ tenga derecho a asegurar el coche de una persona ‘B’, y que si la persona ‘B’ sufre un accidente, es ‘A’ quien cobra dinero.
Lo que el gobierno alemán ha decidido es que sólo aquellos que tengan bonos griegos o españoles o italianos, puedan asegurarlos. Siguiendo la analogía, sólo el dueño del automóvil podrá asegurarlo. Nadie más.
swissinfo.ch: La medida afecta a los especuladores, pero ¿qué otros impactos tendrá?
A.B.: Es una medida que afecta a otros actores del sistema económico que no actúan con un espíritu manipulador del mercado.
Por ejemplo, una empresa que exporta sus productos a Grecia tiene interés en protegerse contra la quiebra de este país porque, de ocurrir, corre el riesgo de que nadie pague la mercancía que ya envío.
Para este tipo de empresas, adquirir un CDS es importante y ya no les será posible.
Por otro lado, es cierto que mientras el mercado de los bonos griegos vale alrededor de 130.000 millones de euros, los seguros derivados de estos bonos habían alcanzado ya el doble o el triple de este monto. Es imposible conocer la talla de este mercado en el presente.
swissinfo.ch: ¿Por qué no existe una regulación formal para el mercado ‘repo’ si se trata una estructura financiera tan compleja como rentable?
A.B.: Porque para regularlo habría que centralizarlo a través de un mercado transparente. Y actualmente está integrado por millares de transacciones que se realizan por teléfono, o en general, fuera del mercado formal. Estados Unidos trabaja en la materia.
Y lo que ha hecho Alemania fue una medida drástica, pero no extrema. Extremo habría sido eliminar el mercado y esto no sucedió. Pero hemos visto un efecto de contagio porque, al prohibir la adquisición de seguros a aquellos que no son propietarios directos de los bonos, los inversores huyen también de las empresas francesas o alemanas, no sólo de las españolas o griegas.
Esto explica que Francia haya sido tan crítica con las medidas tomadas por Alemania.
swissinfo. Y Suiza, ¿cómo se verá impactada?
A.B. Los capitales que han abandonado los países de la Unión Europea (UE) han venido a Suiza, y eso es fantástico para la plaza financiera helvética.
swissinfo.ch: Sin embargo, la llegada, aún inmensurable, de estos capitales implica también presiones sobre el franco, que ya se encuentra en niveles peligrosos para el sector exportador suizo…
A.B.: Sí, la llegada de capitales de otros países implicará una nueva tendencia alcista para el franco suizo y habrá que observar la reacción del Banco Nacional Suizo (BNS) al respecto.
Sin embargo, lo cierto es que hasta ahora Suiza había disfrutado sólo las ventajas de no formar parte de la zona euro, sin tener que pagar el precio. Ahora le tocará un poco de lo segundo también.
Pero soy optimista, creo que se trata de una tendencia temporal. Cuando el panorama regrese a la normalidad, tras el restablecimiento económico de España y Grecia, veremos nuevamente un euro alto, un franco suizo estable, y un dólar barato.
swissinfo.ch: Con esta decisión, Alemania obtuvo la animadversión de algunos de sus socios comerciales. ¿El gobierno de Angela Merkel tomó una decisión correcta?
A.B.: Creo sinceramente que Alemania hizo lo que más convenía a sus intereses. E hizo pagar a las instituciones británicas la parte que les correspondía, ya que ellos eran los principales vendedores de los bonos.
Es verdad que lo hizo de forma unilateral. Pero de todas maneras, no ha sido posible echar a andar respuestas coordinadas en la UE. Y los que hoy se llevan las manos a la cabeza porque no se tomaron decisiones conjuntas son los mismos que no han conseguido llegar a acuerdos durante los últimos dos años.
En ese sentido, Europa ha fracasado estrepitosamente.
swissinfo.ch: Usted ha afirmado en sus estudios que limitar este tipo de operaciones genera más problemas que beneficios para el mercado. ¿Mantiene su percepción en el caso alemán? Y finalmente, ¿qué está por venir en Suiza con respecto a las ventas ‘en corto’ y los CDS?
A.B.: Se confirma lo que dije en investigaciones previas: al eliminar las ventas en corto y los CDS lo que se generó fue una mayor restricción de la liquidez del mercado.
En el caso Suiza, la mayoría de estas transacciones tienen lugar fuera del territorio helvético. Es decir, incluso si se prohibiera al UBS o al Credit Suisse realizarlas en Suiza, podrían hacerlo en otros mercados.
Pero, insisto, soy optimista. Cuando terminen de disiparse las dudas sobre las reformas económicas pendientes en los países europeos más débiles, y cuando la voluntad política se manifieste en temas como la aprobación del paquete de apoyo para Grecia –avalado ayer (20.05) por el Parlamento español- los mercados financieros volverán a la normalidad.
Andrea Ornelas, swissinfo.ch
La Oficina Alemana de Supervisión Financiera (BaFin) anunció el pasado martes (18.05.) un paquete de medidas para combatir la especulación que enfrentan Alemania y el resto de la zona euro.
Su propuesta considera la prohibición temporal en Alemania (del 19 de mayo de 2010 al 31 de marzo de 2011) de:
1) Ventas ‘en corto’ o al descubierto (short selling) sobre bonos vinculados a la deuda pública de países de la zona euro.
2) Restricciones a la venta de seguros de impago (Credit Default Swaps, CDS) de países de la zona euro.
3) La venta al descubierto de acciones de las instituciones financieras más importantes del país como Allianz, Commerzbank, Deutsche Bank, Deutsche Börse, Deutsche Postbank, Generali Deutschland Holding, Hannover Rückversicherung, MLP y Münchener Rückversicherung.
El anuncio se tradujo en presiones especulativas contra la divisa europea, que se cotizó a 1,21 dólares por euro, su nivel más bajo en cuatro años.
Es la segunda vez que BaFin recurre a esta medida. En septiembre de 2008 prohibió la venta ‘en corto’ de las acciones de una decena de grandes empresas cotizadas en Bolsa. La restricción duró cuatro meses. Y no fue la única.
Washington y Londres utilizaron la misma estrategia durante el verano de 2008. En Francia dichas operaciones –sobre acciones del sector financiero- siguen prohibidas.
Numerosas investigaciones académicas sostienen que las denominadas ‘ventas en corto’ pueden ser beneficiarias para los mercados.
Entre ellas figura el trabajo ‘Markets around the world’, elaborado por Bris, Goetzmann y Zhu a partir de la experiencia de 46 mercados de renta variable.
El estudio confirmó en 2006 que los mercados bursátiles donde dichas operaciones están generalizadas eran más eficientes que aquellos que carecían de esta práctica.
Presas del nerviosismo, las principales Bolsas europeas se han mantenido en el terreno de los números rojos esta semana.
Durante la jornada del jueves (20.05) se generalizaron las pérdidas: París (-2,25%), Londres (-1,65%), Fráncfort (-2,02%), Madrid (-1,13%), Milán (-1,69%) y Suiza (-1,76%).
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.