Organización Meteorológica Mundial, un faro en la crisis climática

La OMM considera las recientes temperaturas récord "no tan sorprendentes". Keystone/AP

Mientras el impacto severo del cambio climático establece nuevos récords en las temperaturas globales, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) es mencionada constantemente en las noticias. SWI swissinfo.ch profundiza en la actividad y la importancia de esta agencia especializada de las Naciones Unidas.

Ubicado entre la sede de las Naciones Unidas y la Organización Mundial del Comercio (OMC), el edificio que alberga las oficinas de la OMM en Ginebra se encuentra fuera de las rutas turísticas más populares. Pero detrás de este acrónimo cada vez más común en los despachos de noticias, hay una organización intergubernamental que desempeña un papel central al informar sobre el estado actual del clima y proponer soluciones prácticas.

Vestidos adecuadamente con camisas de verano, dos altos funcionarios de la OMM sudaron mucho en ese día de mediados de julio, uno de los más calurosos de 2023 en Suiza, con temperaturas de hasta 35°C, durante la conferencia de prensa convocada debido a los eventos meteorológicos extremos causados este año por el fenómeno climático El Niño. La presencia de aire caliente en el Pacífico, que toma su nombre del Niño Jesús, había sido pronosticada por la agencia a principios de año y los datos dibujaban un panorama preocupante.

Michael Sparrow, responsable del programa de investigación climática de la OMM, les dijo a los periodistas que las noticias sobre nuevos récords en todos los continentes, incluida la temperatura media global más alta jamás registrada (17,24°C el 7 de julio), el calentamiento extremo en la región del Atlántico Norte y en las costas del Pacífico de América Central y América del Sur, así como el derretimiento del hielo marino alrededor de la Antártida, no son en absoluto sorprendentes.

«Nada inesperado si consideramos lo que los científicos han estado diciendo durante veinte o treinta años. Preveíamos que se superaran constantemente los límites y los récords del día más caluroso», aclaró. «La comunidad científica debe ponerse al día con lo que está sucediendo en el sistema de la Tierra. Las cosas podrían ir mucho peor de lo que habíamos pronosticado».

Como pionera entre los institutos meteorológicos, la OMM es una de las entidades de la ONU con un enfoque más científico: los datos que presenta y la forma en que establece los estándares meteorológicos globales, guiando los esfuerzos para abordar los eventos climáticos y su impacto, son cada vez más relevantes. Pero al igual que gran parte del sistema de las Naciones Unidas, no está completamente aislada de la influencia política.

¿Qué hace la OMM?

Dado los cambios climáticos que hacen que los eventos meteorológicos extremos sean cada vez más frecuentes, el finlandés Petteri Taalas, jefe de la OMM hasta enero de 2024, ha insistido en fortalecer los sistemas de observación meteorológica, especialmente en los países que tienen lagunas en las series de datos históricos. La iniciativa «Alertas tempranas para todos», lanzada en 2022 y respaldada por el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, tiene como objetivo fortalecer la acción política, tecnológica y de financiamiento para asegurar que las poblaciones estén protegidas a tiempo de ciclones, inundaciones y otros eventos extremos.

La Organización Meteorológica Mundial todavía está buscando fondos para la iniciativa. «Hasta que tengamos sistemas de alerta temprana en funcionamiento, no estamos ayudando a las comunidades, las sociedades y las personas a proteger sus vidas, sus medios de subsistencia y su forma de vida», dijo a SWI la argentina Celeste Saulo en una de las primeras entrevistas desde que fue nombrada nueva secretaria general de la agencia.

«Tantas personas tienen que abandonar sus hogares después de eventos meteorológicos extremos como tormentas, perdiendo acceso a las fuentes de alimentos. A veces es difícil entender cuán importantes son los sistemas de alerta temprana para poder adaptarse al cambio climático, pero debemos asegurarnos de tener servicios meteorológicos más eficientes para tener mayores posibilidades de construir nuestras sociedades y ayudarlas a adaptarse».

Mientras tanto, la red de observación global de la Organización, que incluye miles de estaciones meteorológicas en tierra, aire y mar, proporciona los datos que permiten hacer pronósticos meteorológicos locales. La OMM también establece estándares para la detección y el monitoreo, contribuyendo a crear uniformidad y una mejor accesibilidad a los datos y estadísticas. Además, coordina la investigación y la formación meteorológica.

Suiza y el Cambio Climático

El calentamiento global antropogénico es responsable de casi dos de cada tres muertes por calor durante el verano pasado en Suiza.

El agua, que siempre hemos visto fluir en abundancia en Suiza, ahora es objeto de tensiones y llamados a una mayor regulación debido a las frecuentes sequías y alta demanda.

Las autoridades federales de Suiza tienen acceso a pronósticos de avalanchas, inundaciones y olas de calor, pero a diferencia de otros países, aún no tiene un sistema de alerta de sequías.

«Poder compartir esta información e introducir estándares sobre cómo deben ser recopilados nos dará la oportunidad de comprender por qué y cómo está cambiando el clima», explica Saulo.

La Secretaria General designada agrega que otras características de la OMM son su «constelación de productos satelitales», que ayuda a los países a rastrear sistemas meteorológicos [ciclones, anticiclones, etc.], y la compartición de pronósticos generados a través de su sistema coordinado de centros meteorológicos globales, fundamental para aquellos países que no tienen la capacidad de implementar sus propios modelos de predicción.

¿Quién lidera la Organización?

Por primera vez en su historia, desde 1950, una mujer ocupará el cargo de Secretaria General. Saulo, directora del servicio meteorológico nacional de Argentina y ex vicepresidenta de la OMM, ha sido nominada para suceder a Petteri Taalas desde el comienzo de 2024, cuando el finlandés concluya su segundo mandato.

«Hasta que no implementemos sistemas de alerta temprana, no estamos ayudando a las comunidades, las sociedades y los individuos a proteger sus vidas.» Celeste Saulo, secretaria general de la OMM

Después de vencer a otros tres candidatos internos: la Vicesecretaria General Elena Manaenkova (ruso-suiza), el Asistente del Secretario General Zhang Wenjian (China) y el Segundo Vicepresidente Albert Martis (Curazao), Saulo se comprometió a ser la voz de «los países menos avanzados, los pequeños estados insulares, los países en desarrollo y trabajar juntos para alcanzar los objetivos prioritarios», según declaró a la agencia AFP después de su elección.

Saulo también es la última de las mujeres llamadas a dirigir una agencia de la ONU, pocas semanas después del nombramiento de Amy Pope en la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Como científica, la argentina había realizado investigaciones sobre el sistema monzónico de América del Sur, los problemas meteorológicos relacionados con la agricultura y los sistemas de alerta temprana.

En una entrevista telefónica desde Buenos Aires, enfatizó que como Secretaria General respaldará que la agencia asuma una posición más sólida en resaltar su conocimiento científico sobre el cambio climático. «No puedo separar las decisiones políticas de la física del clima. [En la OMM] nos basamos en información técnica, y eso es una ventaja. No formulamos opiniones, sino informes, basados en sólida información científica».

¿Cuál es la relación con el IPCC?

La sede central de la OMM también alberga al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), la máxima autoridad científica en la materia. Tiene el mandato de publicar informes de evaluación científica regulares basados en miles de artículos revisados por pares sobre el impacto del calentamiento global en los entornos naturales y la vida humana.

Los informes, publicados en ciclos de 5-7 años, el último de los cuales concluyó este año, son la base para establecer políticas climáticas globales, nacionales y regionales, y son documentos clave para cumbres como la COP27 del año pasado en Egipto.

Los grupos de trabajo especializados también hacen recomendaciones sobre medidas a tomar para adaptarse al cambio climático y mitigar sus efectos, o sobre áreas que requieren investigaciones más profundas.

Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), con las políticas climáticas actuales, el mundo experimentará un aumento promedio de la temperatura de 2,7°C para finales del siglo. Salvatore Di Nolfi/Keystone

¿Qué puede hacer la OMM ante la crisis climática?

En mayo, la agencia informó que hay dos tercios de probabilidad de que se alcance un aumento de la temperatura global de 1.5°C, el límite establecido por los países que firmaron el Acuerdo de París en 2016, en los próximos 5 años, y un 98% de probabilidad de que al menos uno de estos cinco años sea el más cálido registrado.

Según el IPCC, con las políticas climáticas actuales, la temperatura media global aumentará en 2.7°C para fines de este siglo, superando con creces lo que la Tierra ha experimentado antes, lo que según los científicos significaría el fin de la vida tal como la conocemos.

Mientras gran parte del hemisferio norte sufre de calor y está en alerta por olas de calor, Saulo sostiene que las temperaturas récord y sus efectos en la salud pública son una oportunidad para actuar.

«Se está haciendo mucho menos de lo que los Estados miembros se habían propuesto en las conversaciones climáticas de la ONU», señala. «No están tomando medidas y no me gusta lo que está sucediendo. Es realmente alarmante ver mapas con altas temperaturas que afectan todo el hemisferio norte, con valores nunca antes registrados».

«Mientras vemos que las condiciones climáticas extremas afectan al mundo desarrollado, espero que quienes toman decisiones en estos países actúen más rápidamente», agrega. «Pero esto también concierne a las multinacionales, algunas de las cuales superan a los estados nacionales en términos de poder y emisiones de CO2, metano, etc. Es el momento, también para ellos, de reaccionar».

Adaptado del italiano al español por José Kress