UBS se prepara para recortar más de la mitad de la plantilla de Credit Suisse

Se han comunicado al personal tres rondas de recortes este año © Keystone / Peter Klaunzer

UBS planea recortar más de la mitad de la plantilla de 45.000 empleados de Credit Suisse a partir del mes que viene como consecuencia de la adquisición de emergencia del banco.

Se espera que los banqueros, operadores y personal de apoyo del banco de inversión Credit Suisse en Londres, Nueva York y en algunas partes de Asia sean los más afectados por los recortes, con casi todas las actividades en peligro, según dijeron a la agencia de noticias Bloomberg personas familiarizadas con el asunto.

El personal ha sido informado de que se esperan tres rondas de recortes este año, la primera prevista para finales de julio y dos rondas más previstas provisionalmente para septiembre y octubre, añadieron las personas, que pidieron no ser citadas ya que los planes no son públicos.

Tres meses después de que UBS acordara la compra de Credit Suisse en un rescate financiado por el Gobierno, el alcance total de los recortes de empleo está empezando a quedar claro. UBS, cuya plantilla combinada ascendió a unos 120.000 empleados cuando se cerró la operación, ha declarado que pretende ahorrar unos 6.000 millones de dólares (5.400 millones de francos suizos) en costes de personal en los próximos años.

UBS tiene la intención de reducir en última instancia la plantilla total combinada en un 30%, o 35.000 personas, dijeron dos de las personas. Esta cifra coincide en líneas generales con la reducción global de unas 30.000 personas estimada por los analistas de Redburn en un informe sobre UBS publicado este mes.

Un portavoz de UBS declinó hacer comentarios sobre las salidas de puestos de trabajo.

El recorte de personal en la entidad crediticia suiza empeorará drásticamente lo que ya era un año sombrío para el empleo en el sector financiero en todo el mundo, después de que los bancos de inversión de Wall Street, incluidos Morgan Stanley y Goldman Sachs Group Inc. anunciaran sus propios recortes de miles de empleados.

Las filas ejecutivas de la empresa combinada ya muestran el dominio de UBS. En el consejo de administración sólo hay un empleado de Credit Suisse, Ulrich Körner, que sigue siendo consejero delegado del banco adquirido. En la unidad clave de gestión de patrimonios, sólo cinco de las más de dos docenas de directivos nombrados proceden de Credit Suisse.

El consejero delegado de UBS, Sergio Ermotti, afirmó que la integración iba «muy bien», en un acto celebrado el martes en Zúrich.

UBS señaló al principio de la adquisición que tenía la intención de recortar drásticamente las cifras del deficitario banco de inversión de Credit Suisse, que fue el origen de las pérdidas de 5.500 millones de dólares del escándalo de Archegos Capital Management en 2021.

Aunque UBS había planeado originalmente mantener el 20% de los mejores dealmakers, en particular los que se centran en tecnología, medios de comunicación y telecomunicaciones, muchos de los banqueros de mayor rendimiento ya se han ido o han sido cazados furtivamente por los competidores, dijeron las personas. Deutsche Bank, Jefferies Financial Group Inc. y Wells Fargo & Co. son algunos de los competidores que se han hecho con personal de Credit Suisse en los últimos meses.

UBS espera retener a la mayoría de los banqueros privados de Credit Suisse, aunque muchos ya se han marchado, dijeron dos de las personas. En Asia-Pacífico, UBS planea mantener a unos cientos de banqueros privados de Credit Suisse, lo que elevaría su total a más de 1.200, según dijeron a Bloomberg personas familiarizadas con el asunto a principios de este mes. Algunos banqueros privados de Singapur se trasladarán a las oficinas centrales de UBS, cerca de un distrito comercial de primera categoría de la ciudad-estado, tan pronto como el mes que viene, en uno de los primeros indicios concretos de que la fusión está tomando forma.

El banco también tendrá que conservar, al menos a corto plazo, a los responsables de la gestión de los préstamos estructurados de Credit Suisse a clientes ricos y los libros de derivados de renta variable, dijo una de las personas.

Preocupación por el poder de mercado

Con respecto al negocio nacional suizo, UBS tiene previsto tomar una decisión en el tercer trimestre sobre si lo integrará plenamente en su propia unidad suiza o buscará otra opción, como escindirlo o sacarlo a bolsa. El destino del banco suizo ha sido objeto de una amplia vigilancia, ya que empresas y políticos con sede en Suiza han expresado su preocupación por el poder de mercado que ejercería el banco combinado.

Por lo tanto, es probable que las primeras reducciones de puestos de trabajo excluyan las relacionadas con el amplio solapamiento de los negocios suizos. En total, se eliminarían hasta 10.000 puestos de trabajo si se fusionan los dos negocios nacionales, dijo una persona. Alrededor del 30% de la plantilla combinada del megabanco está en Suiza, pero se reparte entre los negocios nacionales, así como entre los empleados que tienen su sede en el país pero trabajan en funciones corporativas o en gestión de patrimonios y activos.

Ermotti ha dicho que el «escenario base» es que UBS mantenga la unidad nacional de Credit Suisse. Muchos empleados, basándose en los comentarios de Ermotti y del Presidente Colm Kelleher en reuniones y asambleas públicas este mes, esperan que los negocios se fusionen completamente, especialmente tras el deterioro de la rama de banca privada del negocio nacional de Credit Suisse, dijeron las personas.