Un “Estado” imaginario en una comuna suiza
Una estructura paralela con su propia moneda, ciudadanía y un edificio palaciego. El empresario Daniel Model creó Avalon, un “Estado fantástico” en el poblado de Mühllheim, en el cantón de Turgovia. En esa comuna nadie toma en serio este sitio, aunque no sea del todo inofensivo, pues entre sus preceptos rechaza el Estado democrático de Suiza.
Podría ser una catedral, o un templo este gran edificio de piedra gris en medio del paisaje rural de Turgovia, un cantón en el noreste de Suiza.
Este edifico rectangular con la estatua dorada se llama Pueblo modelo. No es una iglesia, aunque aquí se reúnan personas de la misma creencia, o más bien dicho, de la misma convicción.
La construcción busca ser la representación material de Avalon, un Estado fantástico con su propia moneda y nacionalidad, misma que solo se obtiene si el candidato pasa un examen secreto de aptitud. Y los que la obtienen tienen una clara postura: rechazar la sociedad democrática del Estado suizo.
Avalon surgió en 2006, pero no de una persona desconocida en la región, sino de Daniel Model, un exitoso hombre de negocios y uno de los empleadores más importantes del lugar. Este hombre dirige la empresa de embalajes Model AG, con sede en la comuna Weinfelden, también en Turgovia. Daniel Model pertenece a la cuarta generación de la familia al frente del negocio.
La fortuna de Daniel Model ronda 200 o 300 millones de francos. El empresario vive fuera de Suiza, en el vecino Liechstenstein. Se rumorea que su rechazo al Estado helvético también lo alimentan razones fiscales.
Mostrar más
El «Estado» en nuestra comuna no preocupa
Desde hace doce años los habitantes de Müllheim viven con este edificio frente a sus narices. ¿Qué piensan al respecto?
«Nunca he escuchado sobre Avalon»
Dani Ammann se dirige a hacer las compras. “¿Ese edificio? Nunca me he ocupado de pensar qué pasa en su interior”.
Otro hombre, que apaga su cigarrillo en el cenicero de la entrada del supermercado, mueve la cabeza: “Vivo aquí desde hace mucho, pero nunca he oído nada sobre Avalon”.
Vivo aquí desde hace mucho, pero nunca he oído nada sobre Avalon”. Habitante
Fuera de la tienda, un empleador coloca un asador y con poco tiempo para hablar con swissinfo.ch, indica: “Ja, ja. Sí, conozco la construcción, pero no tengo idea de lo que sea”.
Aunque la construcción no pasa inadvertida en el pueblo, la gente del lugar no le da importancia alguna.
No obstante, esta estructura y lo que representa no es inofensiva del todo. “No hay lugar para estructuras estatales paralelas en un democrático Estado de derecho”, indica Benjamin Schindler, profesor de Derecho Público en la Universidad de San Gallen.
«No hay lugar para estructuras estatales paralelas en un democrático Estado de derecho» Benjamin Schindler, Profesor de Derecho
Reducción de la responsabilidad individual
En entrevista con el diario bernés ‘Der Bund’, Model habló sobre sus ideas dos años antes de construir su obra: “En Occidente domina hoy al Estado paternalista, que hace creaturas pobres con el pretexto de ayudarlas”. Y añadió: “El Estado social no solo las engaña, también las roba”.
Concluyó: “Debemos reducirlo a su mínimo absoluto”.
Con este carácter utópico fundó su propio “Estado”, Avalon, nombre que sugirió su hija, luego de leer la novela ‘Las nieblas de Avalon’.
Cada quien mira para sí mismo
Model se inspira en la corriente filosófica del liberalismo. Un ángulo de pensamiento cuyo principio es la propiedad privada y que busca abolir parcial o totalmente el Estado.
Una tendencia que hace poco pudo sentirse con el debate de la iniciativa popular que buscaba abolir el pago obligatorio que alimenta el servicio público mediático. Un tema que al final fue rechazado en las urnas con 72% votos en contra.
Asociación elitista
La casa en Hofstrasse 1 no es solo un templo de entretenimiento para un puñado de liberales suizos. También es sede, según el Registo Comercial Suizo, de cuatro asociaciones: ‘International Right Commission’, ‘International Intelligence Agency’, ‘International Right Organisation’ y ‘International Sheriff Association’. La mayoría de sus representantes son personas de nacionalidad austriaca.
Pero las acciones de sus miembros no son tan ficticias como esas organizaciones: a mediados de marzo se inició un proceso en Austria en contra de uno de los miembros de la última organización mencionada, que permite portar armas a sus asociados. Se les acusa de coerción severa, persecución persistente y abuso de poder.
Sin antecedentes
En Müllheim mismo no hay ningún precedente al respecto, indica la Policía Cantonal de Turgovia. “No hay ningún anuncio o advertencia sobre estos ‘sheriffs’, y nunca se les ha visto”.
Además, «las autoridades judiciales de Turgovía siguen de cerca lo que acontece en torno al estado fantasía de Avalon en Müllheim. Hasta ahora no se ha podido confirmar ninguna actividad delictiva”.
«No nos percatamos de ese estado fantasía.» Urs Forster, alcalde
Urs Forster, presidente municipal de Müllheim, advierte: «No nos percatamos de estado fantasía”. Hasta ahora no ha habido razón o comportamiento alguno fuera de lo común en relación con esa estructura. El edificio fue construido de acuerdo con la solicitud de construcción como centro cultural y de reuniones.
“Acción artística libertaria”
En principio, un Estado legitimado democráticamente puede actuar contra esas estructuras estatales paralelas. Pero Benjamin Schindler no lo considera necesario en el caso del estado imaginario de Model. “Visto desde afuera, Avalon me parece una acción artística libertaria y no una verdadera amenaza para el Estado”, opina el profesor de Derecho Público en San Gallen.
Mientras se conserve como un simple edificio imaginario, no causa problema a nivel jurídico. Schindler también evoca la libertad de expresión: “Cualquiera que, por un instinto juguetón, crea meras estructuras imaginarias que denomina ‘Estado’ o critica el Estado existente en el ámbito de la libertad de expresión está protegido por los derechos fundamentales”.
En Suiza acciones como esta pueden ocurrir en el marco del Estado de derecho. Que sea tolerado por las autoridades con un casi encogimiento de hombros, pero aún con los ojos abiertos, es también un indicio de una democracia que funciona bien, en la que tienen cabida numerosas opiniones y puntos de vista.
El empresario Daniel Model proclamó el estado fantasía de Avalon en 2006. Según un largo texto de su página internet, Avalon se entiende como un «impulso para exponer a los llamados bárbaros, que hoy dominan y están separados de su naturaleza». El término ‘Bárbaro’, como el texto ‘Avalon Quintessenz’ deja claro más tarde, que significa representante del estado social.
Como dijo Daniel Model en una entrevista con el diario bernés ‘Der Bund’, Avalon es un estado elitista. Uno tiene que pasar un «examen de ingreso, sentirse atraído por los espíritus libres y estar convencido del principio de rendimiento».
También hay una academia dentro de esta estructura. Según la página web, es un centro de investigación. «Una tarea central es la cuestión de una nueva forma de gobierno», indica.
(Adaptación: Patricia Islas)
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.