El déficit comercial y el paro, principales retos económicos para el nuevo Gobierno griego

Diego Sáez Papachristou

Atenas, 22 jun (EFE).- Un déficit comercial disparado y un desempleo del 12 %, el doble de la media europea, son algunos de los principales retos que afrontará el Gobierno de Grecia surgido de las elecciones legislativas del próximo domingo.

No obstante, tras la gran crisis de la deuda que acarreó al país una década de duros recortes financieros para obtener rescates internacionales, la economía helena divisa la luz al final del túnel.

Atenas ya no depende de las ayudas externas para financiar la deuda pública, que en 2022 bajó a 171 % del Producto Interior Bruto (PIB), 35 puntos porcentuales menos del 206 % que había alcanzado en 2020, en plena pandemia de covid.

En 2021 y 2022, el país registró una de las mayores tasas de crecimiento en la eurozona, con el 8,4 y el 5,9 %, respectivamente.

Sin embargo, para mantener el equilibrio fiscal el país debe aún continuar sus esfuerzos.

El nuevo Ejecutivo deberá abordar sobre todo ciertos «puntos débiles», explica a EFE Nikos Vettas, director general del Instituto de Investigación Económica e Industrial de Grecia (IOBE).

Entre los problemas más desafiantes, el experto resalta el «gran déficit comercial» que ha acumulado el país en los últimos tiempos de recuperación económica, ya que ésta ha impulsado las importaciones en mucho mayor medida que las exportaciones.

Según los datos de la agencia de estadísticas griega Elstat, el déficit de la balanza comercial aumentó un 40,3 % entre 2020 y 2021, y se aceleró al subir otro 50,6 % interanual, hasta totalizar 38.334 millones de euros en 2022, debido a la duplicación del volumen de importación en los dos últimos años.

Vettas considera «crucial» que ahora aumente el flujo de capital en empresas griegas especializadas en productos o servicios destinados a mercados extranjeros, con el fin de impulsar la exportación.

«Estas empresas son, por ejemplo, las de investigación o tecnología. Tenemos algunas compañías especializadas en estos sectores en Grecia, pero son pocas», señala el economista.

Otro de los sectores que sigue produciendo cierta preocupación es el bancario.

Aunque la resiliencia de los bancos griegos ha aumentado significativamente durante los últimos años, la proporción de los préstamos morosos sigue estando -con el del 8,7 %- por encima de la media europea, según el último informe de la Comisión Europea sobre la economía helena.

Además, la posición de capital de los bancos sigue siendo insuficiente, mientras que preocupa también la «calidad» de estos capitales, señala el informe.

Otro objetivo importante será seguir luchando por la creación de empleo. Si bien la tasa del paro descendió drásticamente desde el 27 % que alcanzó durante la crisis, el nivel actual -12 % en 2022- duplica aún a la media europea.

Además, según Elstat, gran parte de los nuevos puestos de trabajo no pertenecen a «sectores productivos» de la economía, pues fueron creados principalmente por pymes familiares.

El líder de la conservadora Nueva Democracia, Kyriakos Mitsotakis, es el claro favorito en las elecciones del próximo domingo, las segundas en un mes.

En su campaña para ser reelegido como primer ministro, Mitsotakis ha prometido realizar las reformas necesarias para mantener el país en la senda del crecimiento y «dejar definitivamente atrás» la larga y agotadora crisis financiera.

Los sondeos ven a Nueva Democracia en el primer lugar con el 41 % de los votos, unos 20 puntos porcentuales por delante de su principal rival, el opositor e izquierdista Syriza del exjefe de Gobierno Alexis Tsipras, que obtendría un 20 %.

Estos porcentajes son casi idénticos a los que recibieron los principales contendientes en las legislativas de mayo, si bien esta vez al líder conservador le bastaría recibir un 39 % para hacerse con la mayoría absoluta en el Parlamento, gracias a la reintroducción de una prima de hasta 50 escaños al partido ganador. EFE

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