El Gobierno suizo presenta sus planes para aumentar las reservas de gas

El gas representa aproximadamente el 15% del consumo final de energía de Suiza y se utiliza principalmente para la calefacción y la cocina. La mitad proviene de Rusia. Keystone / Daniel Roland

El Gobierno suizo ha presentado sus planes para aumentar la capacidad de almacenamiento de gas para asegurar el suministro de cara al invierno.

El gas representa aproximadamente el 15% del consumo final de energía de Suiza y se utiliza sobre todo para la calefacción y la cocina. Aproximadamente la mitad proviene de Rusia. Tras el estallido de la guerra en Ucrania, Suiza ha intensificado sus esfuerzos para obtener gas de otras fuentes y asegurar una capacidad de almacenamiento adicional, así como la importación de gas natural licuado.

El miércoles, el Gobierno presentóEnlace externo los detalles de sus planes para crear una reserva de gas para el invierno que se llevará a cabo mediante el almacenamiento de energía en los países vecinos. El objetivo es minimizar el impacto en caso de que se interrumpa el suministro de gas ruso.

“Esta reserva física está destinada a cubrir el 15% (unos 6 teravatio-hora TWh) del consumo anual de gas de Suiza (unos 35 TWh). Cerca de la mitad de esta reserva física ya se encuentra en las empresas regionales Gaznat y GVM en Francia”, señaló el Gobierno.

Además de las adquisiciones regulares, se comprarán 6 TWh mediante opciones de gas que no sea ruso en Francia, Alemania, Italia y los Países Bajos, a las que se puede acceder a corto plazo por una tarifa fija, añadió.

Esto corresponde a cerca del 20% del consumo invernal de Suiza, y también diversifica las rutas de suministro.

Un grupo de expertos sobre energía debe informar a mediados de junio sobre cómo gestionar la reserva de gas.

La invasión de Ucrania por parte de Rusia, el principal proveedor de gas de Europa, ha llevado a la Unión Europea y a Estados no miembros de la UE, como Suiza, a replantearse sus políticas energéticas en medio de una mayor preocupación por las crisis de suministro. Rusia suministra el 40% del gas de la UE y el 27% del petróleo que importa, y los países de la UE se esfuerzan por acordar sanciones para este último.