Xi Jinping dice que relaciones China-EEUU marcarán «el destino de la humanidad»
El presidente chino, Xi Jinping, declaró este lunes que la forma en que China y Estados Unidos gestionen su relación será decisiva para «el destino de la humanidad», al recibir en Pekín a una delegación de senadores estadounidenses.
«La relación entre China y Estados Unidos es la más importante del mundo», dijo Xi Jinping ante la delegación encabezada por el líder de la mayoría demócrata del Senado estadounidense, Chuck Schumer.
«La forma en que China y Estados Unidos se lleven entre sí frente a un mundo en crisis determinará el futuro y el destino de la humanidad», afirmó.
«Lo he dicho muchas veces, incluido a varios presidentes, que tenemos mil razones para mejorar las relaciones entre China y Estados Unidos y ninguna para arruinarlas», aseveró el mandatario chino.
«Nuestros países, juntos, darán forma a este siglo», respondió Schumer. «Por esto debemos gestionar nuestras relaciones con responsabilidad y respeto», agregó el senador demócrata, que informó que la reunión duró 80 minutos, el doble de lo previsto.
Los senadores estadounidenses fueron recibidos en la mañana por el ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi, en su tercer día de visita a China.
«Esperamos que esta visita ayude a Estados Unidos a tener un entendimiento más preciso de China, a considerar las relaciones sinoestadounidenses con más objetividad y a gestionar las diferencias existentes de manera más racional», declaró Wang Yi.
La relación bilateral entre las dos mayores economías del planeta está crispada por diferendos comerciales, la expansión de Pekín en el mar de China Meridional -una importante vía para el tránsito de mercancías- y la cuestión de Taiwán, una isla considerada como un territorio rebelde por el gobierno chino.
– «Alimentan la crisis del fentanilo» –
Schumer, quien agradeció a la delegación china su hospitalidad, citó como «objetivo número uno» establecer «condiciones de competencia equitativas para las empresas y los trabajadores estadounidenses».
El senador señaló que había otros temas de «gran preocupación» que plantear durante la visita, como la crisis del fentanilo, un potente opiáceo sintético que puede usarse como droga y ha causado decenas de miles de muertos en Estados Unidos.
La semana pasada, Estados Unidos sancionó e imputó a empresas chinas por suministrar sustancias a narcotraficantes, como los cárteles mexicanos de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación, para fabricar fentanilo.
Schumer insistió en esta cuestión el lunes, afirmando que entre los objetivos de Washington figura el pedir cuentas a «las empresas con sede en China que suministran productos químicos mortales que alimentan la crisis del fentanilo en Estados Unidos».
E igualmente, agregó, «velar para que China no apoye la guerra inmoral de Rusia contra Ucrania».
– Ataques «despiadados» –
El senador demócrata también abordó la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, que el sábado lanzó una operación masiva en territorio israelí, causando por el momento más de 700 muertos y un centenar de secuestrados.
Del lado palestino, 560 personas murieron en los bombardeos israelíes en el enclave en respuesta a la ofensiva sorpresa del grupo islamista, según las últimas cifras de las autoridades locales.
«Le insto a usted y al pueblo chino a que se solidaricen con el pueblo israelí y condenen estos ataques cobardes y despiadados», dijo Schumer a Wang, una petición que reiteró ante Xi Jinping.
Schumer expresó su decepción por una declaración del domingo del Ministerio de Exteriores chino sobre la escalada de violencia.
Pekín pidió el domingo a todas las partes a mostrar «calma» y pidió «el alto el fuego», sin condenar explícitamente el ataque palestino.
Tras la rueda de prensa, Schumer afirmó que China había «rectificado» su comunicado inicial.
«Un grupo de nosotros solicitó a China que use su influencia sobre Irán» e instaron a Pekín que hagan todo lo posible para que Teherán no extienda la conflagración. «Dijeron que entregarían el mensaje», destacó.
El senador también se reunió con el presidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional china, Zhao Leji.
«Es normal que dos grandes potencias se encuentren en competencia», dijo Schumer, insistiendo en que Estados Unidos «no busca el conflicto».
Pese a los múltiples diferendos, ambas potencias reanudaron en los últimos meses el diálogo de alto nivel con una serie de visitas de funcionarios de alto rango estadounidenses a Pekín, entre ellos el secretario de Estado, Antony Blinken, en junio.
Tampoco se descarta un encuentro entre el presidente chino, Xi Jinping, y el estadounidense Joe Biden en la cumbre de la APEC, el foro de cooperación económica Asia-Pacífico, a mitad de noviembre en San Francisco.