El presidente Chakwera de Malaui ordena la retirada de sus tropas del noreste de la RDC
Lilongüe, 5 feb (EFE).- El presidente de Malaui, Lazarus Chakwera, ordenó este miércoles la retirada de las tropas de su país presentes en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), donde ayudan al Ejército congoleño en sus combates contra el poderoso grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23).
«El presidente Chakwera ha ordenado al comandante de las MDF (Fuerzas de Defensa de Malaui) que empiece las preparaciones para la retirada de las tropas malauís del este de la República Democrática del Congo», informó la Presidencia de Malaui en un comunicado recogido por medios locales.
Las tropas malauís forman parte de la fuerza regional desplegada en el este congoleño por la Comunidad de Desarrollo del África Meridional (SADC, en inglés), conocida por las siglas de SAMIDRC, aunque también hay efectivos de este país africano en la misión de las Naciones Unidas en la RDC (Monusco).
Según el comunicado, Chakwera tomó esta decisión para «respetar la declaración de un alto el fuego de las partes enfrentadas y allanar el camino para las negociaciones previstas con miras a una paz duradera», en referencia a la tregua unilateral declarada este lunes por el M23 al alegar motivos humanitarios.
Sin embargo, las autoridades locales confirmaron a EFE que la milicia rompió este miércoles con su propia medida, con la reanudación de combates en la localidad de Nyabibwe.
Esa urbe se encuentra a cerca de 100 kilómetros de Bukavu, la capital de la provincia de Kivu del Sur que el M23 negó este lunes querer ocupar, a pesar de estar avanzando hacia ella y de que la semana pasada el grupo declaró su intención de «continuar la marcha de liberación hacia Kinsasa», la capital nacional.
Los rebeldes declararon el alto el fuego justo una semana después de conseguir ocupar, tras días de fuertes combates, la estratégica ciudad de Goma, capital de la provincia vecina de Kivu del Norte con unos dos millones de habitantes y donde tienen su sede ONG internacionales e instituciones de la ONU.
La actividad económica se ha empezado a reactivar progresivamente en Goma, pero el número de muertos registrados por los combates en esta urbe y sus alrededores no hace más que subir: aunque la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) cifró en 900 los fallecidos, el Gobierno congoleño afirmó a última hora del lunes que ya se han enterrado 2.000 cadáveres en la zona.
Esta no es la primera vez que el M23 ocupa Goma: los rebeldes ya tomaron el control de la ciudad durante diez días en 2012, antes de que la presión internacional forzara su retirada.
La ofensiva del M23 -grupo armado formado principalmente por tutsis que sufrieron el genocidio ruandés de 1994- ha incrementado la tensión con la vecina Ruanda, ya que el Gobierno congoleño acusa a Kigali de apoyar al M23, un extremo que ha confirmado la ONU.
Por su parte, Ruanda y el M23 acusan al Ejército congoleño de cooperar con las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), un grupo fundado en 2000 por cabecillas del genocidio y otros ruandeses exiliados para recuperar el poder político en su país, una colaboración que también ha sido corroborada por la ONU.
La actividad armada del M23 se reanudó en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño en Kivu del Norte y, desde entonces, avanzó por varios frentes hasta alcanzar Goma.
Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la Monusco. EFE
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