El rebelde M23 ocupa un nuevo territorio en el este de la República Democrática del Congo
Kinsasa, 11 mar (EFE).- El grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) ha ocupado desde el lunes un nuevo territorio, el cacicazgo de Kaziba, en el este de la República Democrática del Congo (RDC), confirmaron este martes a EFE autoridades y líderes de la sociedad civil locales.
El M23 tomó Kaziba, situado a casi 45 kilómetros de Bukavu, capital de la provincia de Kivu del Sur también capturada por los rebeldes, este lunes por la noche, aunque no está claro qué control ejercen los insurgentes sobre el territorio, en el que viven unas 100.000 personas.
Contactado por EFE, el secretario administrativo del cazicazgo, Chihire Byumanine, admitió que los rebeldes están allí, pero no en todas partes.
«La situación aún es incierta porque los rebeldes no controlan todo el cacicazgo. Ellos están aquí», dijo a EFE por teléfono Byumanine.
El líder de la sociedad civil de Kaziba, Joyeux Badesire Noyau, también confirmó la presencia del M23.
«Fue desde ayer alrededor de las siete de la tarde (17:00 GMT) que comenzamos a ver a los rebeldes del M23 aquí en el cacicazgo después de intensos combates», declaró a EFE por telófono Noyau.
«Toda la noche del domingo hubo un enfrentamiento entre nuestras fuerzas (Ejército congoleño), los wazalendo (milicias aliadas del Ejército) y los rebeldes. Se produjeron explosiones horribles, especialmente en los alrededores de Kaziba», explicó el activista.
Según Noyau, desde el viernes la población empezó a huir del cacicazgo, mientras que desplazados procedentes de Bukavu y otras zonas que esperaban encontrar refugio allí tuvieron que proseguir su viaje.
«Ha habido un fuerte movimiento de desplazamiento de población. Y hasta entonces, sigue habiendo psicosis para los que se quedaron. La gente está en casa. Todavía estamos observando. Sin actividades, sin tráfico. Los soldados burundeses (que apoyan al Ejército congoleño) que estaban aquí se retiraron hacia las colinas. Las FARDC (Fuerzas Armadas de la RDC) y los wazalendo también», añadió.
A diferencia de otras zonas en el este del país, el cacicazgo de Kaziba no es especialmente rico en minerales. Sin embargo, su subsuelo todavía tiene oro, aunque en pequeñas cantidades.
«No sé por qué estos rebeldes atacaron Kaziba, porque aquí no hay nada. No tenemos tanto oro como en otros lugares. Bueno, seguramente para llegar al territorio de Fizi», situado a orillas del lago Tanganica, fronterizo con Tanzania, agregó Noyau.
El M23, que cuenta con apoyo de Ruanda -según la ONU y países como EE.UU., Alemania y Francia-, tomó el fin de semana del 15 y el 16 de febrero Bukavu, estratégica capital de Kivu del Sur, vecina de Kivu del Norte, cuya capital, Goma, ocupó también el pasado 27 de enero.
El grupo controla las capitales de esas dos provincias, fronterizas con Ruanda y ricas en minerales como el oro o el coltán, fundamental en la industria tecnológica y en la fabricación de teléfonos móviles.
El número de muertos por el conflicto en Goma y alrededores superó los 8.500 desde enero pasado, aseguró el pasado 27 de febrero el ministro congoleño de Salud Pública, Samuel Roger Kamba.
El pasado 24 de febrero, la primera ministra de la RDC, Judith Suminwa, afirmó en Ginebra que, según cifras del Ministerio de Salud Pública, desde enero de 2025 el conflicto provocó la muerte de más de 7.000 congoleños, de los que unos 2.500 se enterraron sin identificar.
La actividad armada del M23 -grupo formado principalmente por tutsis que sufrieron el genocidio ruandés de 1994- se reanudó en noviembre de 2021 con ataques relámpago contra el Ejército congoleño en Kivu del Norte.
Desde entonces, ha avanzado por varios frentes, lo que ha elevado los temores a una posible guerra regional.
Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU (Monusco). EFE
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