El terremoto deja más de 200 muertos en México, entre ellos 21 niños en una escuela
Un terremoto de 7,1 grados dejó al menos 217 muertos el martes en México, entre ellos 21 niños en una escuela, mientras este miércoles continuaban los rescates en edificios colapsados, sobre todo en la capital, que justo hace 32 años fue devastada por otro poderoso terremoto.
«Hasta el momento se reportan 217 fallecidos: 86 Ciudad de México, 71 Morelos, 43 Puebla, 12 Estado de México, 4 Guerrero y 1 Oaxaca», escribió este miércoles en Twitter el director de Protección Civil de Gobernación (Interior), Luis Felipe Puente, quien poco antes había dicho que los muertos eran 248.
El presidente Enrique Peña Nieto, que estaba fuera de capital en el momento del sismo y regresó para coordinar las labores de rescate, visitó por la noche la escuela primaria Enrique Rebsamen, un edificio de tres pisos que se desplomó con el sismo.
«Lamentablemente varias personas han perdido la vida, incluyendo niñas y niños, en centros educativos, edificios y viviendas. Quiero expresar mis condolencias a quienes perdieron un familiar o un ser querido», dijo Peña Nieto en su primer mensaje tras el terremoto.
«(En la escuela) tenemos 26 muertos, de los cuales cinco son adultos y 21 niños. Tenemos 11 niños rescatados y de personas atrapadas oscila entre 30 y 40», expresó el oficial José Luis Vergara, quien coordina el rescate, a Televisa.
Vergara detalló que los socorristas lograron establecer comunicación con la maestra atrapada, quien está con un niño, y que en otro punto de los escombros pudieron contactar con vida a otro menor. «Es el lugar donde tenemos el mayor número de pequeños que han perdido la vida», expresó Puente a Televisa.
Puente aclaró que la cifra de muertos puede aumentar dado que se «reportan personas desaparecidas» que se teme estén en los escombros de decenas de edificios colapsados, sobre todo en la zona sur y el corredor Roma-Condesa, barrio chic donde viven numerosos extranjeros.
El sismo ocurrió a las 13H14 locales (18H14 GMT). El epicentro se ubicó entre los estados de Puebla y Morelos, cerca de la capital. El aeropuerto internacional de Ciudad de México suspendió operaciones durante más de tres horas.
– Silencio –
Según la alcaldía de Ciudad de México, unos 50 edificios colapsaron en zonas del centro y sur de la capital, donde cuando anochecía muchas personas observaban desalentadas sus hogares severamente dañados.
«A mí se me abrió (el muro) de mi departamento, muchos (otros) están destruidos. Aguantó el (terremoto) del 85 y el de hace unos días», dice Guadalupe García de 68 años, residente y administradora de un edificio cuya pared frontal se vino abajo y que se refugiará en la casa de sus padres.
Los barrios más afectados se encuentran sin energía eléctrica, interrumpida por las autoridades para evitar posibles explosiones ya que se reportaban fugas de gas natural, que corre en tuberías subterráneas.
Cientos de rescatistas, más de 3.600 militares y numerosos civiles voluntarios retiraban escombros con sus manos en edificios colapsados, sobre todo viviendas.
«¡Silencio! ¡Parece que alguien grita!», se escuchaba de manera repetida en edificios colapsados. Los aplausos y las vivas irrumpían cuando conseguían sacar a un sobreviviente.
Las autoridades han dispuesto albergues para que pasen la noche familias que han perdido su casa o registra severos daños estructurales, mientras que otras pernoctaban en la calle o donde familiares.
Al colapsar las comunicaciones telefónicas, la mensajería por whatsapp se convirtió en la única forma de comunicación en el centro del país. Algunas personas que fueron rescatadas de los escombros consiguieron ser localizadas gracias a esa aplicación, según rescatistas.
– Derrumbe de iglesia –
En Morelos, al sur de la capital, las mayores afectaciones se registraron en su capital, Cuernavaca, y los poblados de Axochiapan y Jojutla, donde edificios, casas y construcciones históricas colapsaron, constató la AFP.
En Puebla, conocida por sus construcciones coloniales, varios templos católicos resultaron afectados e incluso once «personas murieron al quedar atrapadas en una iglesia que se derrumbó» en el poblado de Atzala, dijo el secretario de Gobierno, Diódoro Carrasco.
El sismo ocurrió justo cuando se cumplen 32 años del terremoto de 8,1 grados que dejó más de 10.000 muertos en 1985 y redujo a ruinas amplios sectores de Ciudad de México.
«Estoy consternada, no puedo contener el llanto, es la misma pesadilla que en 1985», dijo a la AFP, entre lágrimas Georgina Sánchez, de 52 años, en una plaza de Ciudad de México.
En la mañana de este martes, las autoridades habían realizado un simulacro de sismo y se recordó, como cada año, la tragedia del 19 de septiembre de 1985.
Distintos países han mandado mensajes de condolencias a México. El presidente de EEUU, Donald Trump, expresó su solidaridad con los mexicanos. «Dios bendiga a la gente de Ciudad de México. Estamos con ustedes y los vamos a apoyar», escribió en su cuenta de Twitter. Honduras anunció el envío de 36 socorristas y Guatemala también ofreció rescatistas.
En Ciudad de México funciona un sistema de alarmas que se activa un minuto antes del sismo, pero periodistas de AFP dijeron que esta vez se escuchó la alarma al mismo tiempo que comenzó a sentirse el temblor toda vez que el epicentro estuvo a menos de 200 km de distancia de la capital.
El pasado 7 de septiembre, un terremoto de 8,1, el más fuerte en un siglo en México, causó 96 muertos y más de 200 heridos en el sur del país, especialmente en los estados de Oaxaca y de Chiapas.