El Vaticano confirma las sanciones al cardenal peruano Cipriani siguen vigentes
Ciudad del Vaticano, 26 ene (EFE).- El Vaticano confirmó el domingo las sanciones disciplinarias impuestas al cardenal peruano Juan Luis Cipriani Thorne tras las acusaciones de abuso sexual y agregó que «siguen vigentes», aunque se dieron algunos permisos.
«A raíz de las denuncias presentadas contra él, y tras la aceptación de su renuncia como arzobispo de Lima, se impuso al cardenal un precepto penal con ciertas medidas disciplinarias relativas a su actividad pública, lugar de residencia y uso de insignias, firmado y aceptado por su eminencia», explicó a EFE el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni.
Asimismo, señaló que «en ocasiones puntuales se concedieron ciertos permisos para atender peticiones debidas a la edad y situación familiar del cardenal» pero subrayo que «en la actualidad dicho precepto sigue vigente» .
El que fue el primer cardenal de la historia del Opus Dei, de 81 años, quien reside en Madrid, reconoció las sanciones el sábado tras un artículo en el periódico español ‘El País’.
En una carta enviada al diario, Cipriani negó haber cometido abuso sexual de un menor en 1983. «Ante las acusaciones que hoy, 25 de enero de 2025, ha publicado el diario El País sobre mi persona, quiero aclarar que los hechos que describen son totalmente falsos. No he cometido ningún delito ni he abusado sexualmente ni en 1983, ni antes, ni después», afirmó.
Precisó que en el artículo se recogen unas acusaciones presentadas a la Santa Sede en 2018, referentes a unos hechos presuntamente acaecidos en 1983, e indicó que en agosto de 2018 fue informado de que había llegado una denuncia que no se le entregó.
«A continuación, sin haber sido escuchado, sin haber sabido más y sin que se abriera un proceso, el 18 de diciembre de 2019 el Nuncio Apostólico me comunicó verbalmente que la Congregación para la Doctrina de la Fe me había impuesto una serie de penas limitando mi ministerio sacerdotal y pidiendo que tuviera una residencia estable fuera de Perú», relató.
Y agregó que en ese momento se le pidió guardar silencio, algo que ha hecho hasta ahora, señaló el cardenal miembro del Opus Dei que fue arzobispo de Lima entre 1999 y 2019.
Pero destacó que el 4 de febrero de 2020 tuvo una audiencia con el papa Francisco, quien le permitió reanudar sus tareas pastorales, como así demuestra su actividad realizada en los últimos años.
«En estos años fuera de Lima viví en Roma (…) hasta que cumplí los 80 años y me retiré de toda ocupación en la curia romana y me trasladé a Madrid», añadió.
También aprovechó la ocasión para manifestar «su rechazo y repulsa total» a los abusos sexuales a menores y personas vulnerables, y reiteró su compromiso con la lucha de la Iglesia «para erradicar esta lacra».
Cipriani reapareció en Perú el 7 de enero, cuando el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, le otorgó la Medalla Orden al Mérito en el grado de Gran Cruz «por su incansable labor pastoral, académica y eclesiástica».
Por su parte, el vicario regional del Opus Dei en el Perú, Ángel Gómez-Hortigüela, explicó en una nota «que no hay registro de ningún proceso formal durante los años en que, como sacerdote, el padre Juan Luis Cipriani estaba incardinado en el Opus Dei».
Y también pidió perdón por no haber atendido bien a la supuesta víctima. «En 2018, ante la solicitud de una entrevista con el denunciante, sabía que no podía interferir en una acusación formal ya iniciada ante la Santa Sede, que es la vía que corresponde cuando se trata de un cardenal. Al no tener competencia jurídica sobre el caso, cuando una persona de la confianza del denunciante me pidió que me entrevistara con él, reaccioné pensando que ese encuentro podía no ser positivo».
«Hoy me doy cuenta de que podría haberle ofrecido una acogida personal, humana y espiritual, que sí me consta que recibió de otras personas del Opus Dei», concluyó. EFE
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