Emiratíes asumen «los frutos de la paz» con Israel, pero con la nariz tapada
Bassam Madhoun
Dubai, 15 sep (EFE).- Dos años después de la firma de los Acuerdos de Abraham y la normalización de las relaciones entre los Emiratos Árabes Unidos (EAU) e Israel, los ciudadanos del país árabe acatan el paso y asumen las ventajas de los «frutos de la paz», si bien mantienen su disgusto hacia Israel y su ocupación de Palestina.
Varias visitas bilaterales de alto nivel han marcado el segundo aniversario de este acuerdo que, auspiciado po el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump (2017-2021), llevó a los EAU, Baréin y Marruecos a reconocer a Israel y establecer relaciones diplomáticas, políticas y comerciales, una ruptura radical con el estatus quo de la región.
Desde entonces, como no se han cansado de repetir tanto el gobierno emiratí como el israelí, las relaciones bilaterales no han dejado de avanzar y particularmente en el campo económico han sido muy significativas.
La apertura de embajadas, la autorización de vuelos comerciales directos, el turismo, los vínculos políticos y hasta militares han jalonado estos dos años, que también han ido acompañados por la aproximación a Israel de otros países como Sudán, Arabia Saudí, o Turquía.
Esos avances, los «frutos de la paz» como los llama el gobierno emiratí, son reconocidos y acatados por los habitantes de los conservadores emiratos que forman la federación, como indicó a Efe T.M., un ciudadano emiratí que, como todos los que consultó Efe para esta información prefirió mantenerse en el anonimato.
«Los EAU son un país de paz coexistencia, con más de doscientas nacionalidades en su tierra. Es normal que tengamos relaciones con Israel, pese a que sea el viejo enemigo de muchos países en la región», indicó mientras se bajaba de su coche en un complejo turístico de la Marina de Dubái.
S.O, otro ciudadano emiratí indicó a la entrada de un supermercado que él acepta la decisión tomada por «el liderazgo» de su país, que «siempre vela por el interés de los emiratíes», si bien a título personal apuntó su rechazo a Israel y su negativa a cosas como viajar al territorio de aquel país.
Empleando un antiguo dicho local, S.O apuntó en ese sentido que si su familia o allegados supieran que se plantea viajar a Israel, éstos le expulsarían y nunca podría volver a su hogar familiar.
BUENOS NEGOCIOS
La reluctancia, sin embargo, no impide que las perspectivas económicas de los acuerdos sean auspiciosas, como dijo a Efe el responsable de la Cámara de Comercio de EAU-Israel, Abdullah Baqer.
«Tenemos cada nuevo día aperturas de empresas israelíes, restaurantes e infraestructuras comerciales. Más de 560.000 israelíes han visitado Emiratos desde que se firmó el acuerdo, y la Cámara mantiene talleres semanales para compartir ideas que atraen a más de 400 personas, que trabajan para fortalecer las relaciones económicas, de inversión y turísticas entre emiratíes e israelíes», dijo.
Baqer apuntó que este interés israelí en Emiratos, que ha supuesto una aceleración de las inversiones en el país árabe, se debe a dos elementos: «primero la seguridad que existe en los Emiratos. Y segundo, la facilidad para las transacciones, ya que no cuesta nada a ningún inversor voluntarioso cumplir con sus trámites y cumplir procedimientos».
Dicho de otro modo, los israelíes pueden trabajar o invertir en los EAU «muy rápidamente».
Esas cifras son fruto del acuerdo de libre comercio establecido entre ambos países al calor de los Acuerdos de Abraham, un acuerdo que según documentos del Ministerio de Economía emiratí publicados en mayo reportarán un incremento en el comercio regional por unos 10.000 millones de dólares en los próximos cinco años.
Precisamente, el embajador israelí en Abu Dabi, Amir Hayek, indicó en una reciente entrevista con la agencia de noticias oficial de los Emiratos, que tan solo durante los primeros siete meses de 2022 el comercio bilateral sumó 1.407 millones de dólares y superó ya todo lo alcanzado en 2021. EFE
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