Empresarios y autoridades de Perú entre la duda y neutralidad sobre amenazas arancelarias
Lima, 27 nov (EFE).- Los representantes de gremios empresariales de Perú e integrantes del Ejecutivo expresaron una posición que varía entre la duda y la neutralidad, respecto a los anuncios de imponer aranceles a las importaciones de México, China y Canadá por parte del electo presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El director ejecutivo de la Sociedad de Comercio Exterior del Perú (ComexPerú), Jaime Dupuy, declaró este miércoles al diario El Comercio que «hay una preocupación generalizada sobre amenazas proteccionistas que pueden darse, lo que puede generar la ralentización del comercio en general».
Este impacto, en el caso de Perú y otros países de la región, resultaría contraproducente, dado que el crecimiento del comercio exterior «ha sido considerable durante los últimos años», remarcó Dupuy.
Perú tiene un Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos que no grava con arancel a distintos productos comercializados entre ambos países, pero «una decisión unilateral vulneraría este tratado», afirmó el representante de ComexPerú.
A su vez, el presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Julio Pérez Alván, opinó que imponer aranceles podría «desconocer todas las regulaciones internacionales y ahí se armaría un verdadero caos».
«No creo que lleguemos a eso», manifestó Pérez Alván.
Sin embargo, el dirigente exportador afirmó que si se aplica un arancel a los productos que pasarán por el nuevo megapuerto de Chancay, construido con capital chino, Perú puede presentar un reclamo ante la Organización Mundial de Comercio (OMC).
Hace unos días, el presidente del Consejo de Ministros de Perú, Gustavo Adrianzén, declaró que el gobierno peruano tiene «expectativas muy grandes» en su relación con el país norteamericano.
Sobre el planteamiento de una subida de aranceles, recordó en una rueda de prensa con corresponsales que «las relaciones comerciales son bidireccionales».
«Si tú me impones un arancel, yo tengo que hacer lo mismo», acotó.
No obstante, consideró que sería una lástima que entre países que conforman el Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC) se «pretendan hacer disposiciones arancelarias que no corresponden» al libre comercio.
El primer ministro también dijo que la actual relación de su país con China «es fuerte y en crecimiento», pero acotó que esto también sucede «con otras economías».
Reconoció, en ese sentido, que el megapuerto de Chancay, ubicado al norte de Lima, «es una obra innegable, de una gran trascendencia», ya que se trata «probablemente del primer o segundo puerto del Pacífico Occidental más importante».
A su vez, el canciller Elmer Schialer declaró a Efe, durante una reciente visita a España, que su país no quiere ser parte de «ningún diferendo comercial entre nuestros amigos».
Sobre la iniciativa de imponer un arancel de 60 % a los productos importados en el megapuerto de Chancay, el ministro dijo que han tomado nota , «pero lo tomamos con serenidad». «Vamos a tener una neutralidad activa», afirmó Schialer.
«Es un poco complicado, por eso nosotros hemos tomado esto con mucha atención, pero también con mucho cuidado, porque yo no creo que los Estados Unidos quieran dañar a sus inversionistas», puntualizó el canciller peruano.EFE
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