Ennahda, sindicatos y G7 piden al presidente de Túnez que restaure Gobierno

Túnez, 6 sep (EFE).- El partido conservador de tendencia islamista Ennahda, primera fuerza en el Parlamento tunecino, y la Unión General de Trabajadores Tunecinos (UGTT), el sindicato más poderoso del país, pidieron hoy al presidente de la República, Kaies Said, que restablezca la normalidad democrática y permita la designación de un «nuevo gobierno legítimo».

A la petición se ha sumado igualmente el G7, que en un comunicado ha recomendado a Said que restablezca el Parlamento, nombre un nuevo ministro y abandone los poderes excepcionales que se arrogó el pasado 25 de julio alegando una «amenaza vital para el país».

En una nota publicada este lunes, la nueva oficina política de Ennahda advirtió de que el país «se hunde en la incertidumbre y avanza hacia lo desconocido» desde que el presidente impuso medidas inconstitucionales a finales de julio.

Entonces el presidente tunecino anunció el cese del primer ministro, Hichem Mechichi, y la suspensión del Parlamento con el fin de «recuperar la paz social y salvar al Estado y la sociedad».

Para Ennahda, la situación actual «profundiza la crisis política, económica, social y financiera y perturba el funcionamiento de las instituciones y las operaciones dentro y fuera del país», y abogó por «la separación de poderes, la colaboración y la resolución de las disputas entre ellos y la garantía de la independencia de la instituciones militares y de seguridad».

Asimismo, denunció los ataques a los derechos, las libertades y la dignidad de los tunecinos como resultado de instrucciones que no se ajustan a la ley y la Constitución, como los arrestos domiciliarios y la prohibición de viajar al extranjero.

Por todo ello llamó a «acelerar la formación del nuevo Gobierno legítimo que se ocupará de las prioridades económicas, sociales, financieras y de salud, continúe con las reformas en curso y desarrolle el proyecto de ley de financiación complementaria para el año 2021 y prepare los presupuestos de 2022».

SINDICATOS E INTERVENCIÓN EXTRANJERA

En la misma línea, el subsecretario general de UGTT, Samir Cheffi, pidió este lunes al jefe del Estado que nombre a un jefe de Gobierno que forme rápidamente un nuevo Gabinete.

En declaraciones a la emisora local Shems Fm, Cheffi expresó la voluntad de la central sindical -que tiene cerca de tres millones de afiliados en un país de 12 millones de habitantes- de preservar las libertades y garantizar un equilibrio económico y social y advirtió sobre las posibles injerencias extranjeras.

«La mayoría de quienes vieron el anuncio de las medidas excepcionales como un golpe de Estado habían pedido también la visita de una delegación extranjera. Este es un intento de utilizar el apoyo extranjero para intimidar. Es un acto de traición”, aseguró en alusión a la reciente visita al país de una delegación del Congreso de Estados Unidos, que pidió a Said restaurar la normalidad diplomática,

«Preferimos defender a un dictador que pedir una intervención extranjera», subrayó.

LLAMAMIENTO DEL G7

Horas antes, y al inicio de su reunión ministerial, el G7 (países más industrializados) emitió un comunicado en el que reafirma su compromiso con la democracia en Túnez y pedía un rápido retorno a un marco constitucional a través del nombramiento de un nuevo jefe de Gobierno.

“Recomendamos encarecidamente el rápido retorno a un marco constitucional en el que un Parlamento elegido desempeñe un papel importante. Destacamos la urgente necesidad de nombrar un nuevo jefe de Gobierno, formar un Gobierno capaz de hacer frente a las crisis económicas y de salud que atraviesa el país y crear un espacio inclusivo de diálogo sobre las reformas constitucionales y electorales propuestas», afirmó.

«Cuanto antes establezca el presidente una dirección clara para el futuro, que satisfaga las necesidades del pueblo tunecino, antes Túnez podrá centrarse en responder a los desafíos económicos, sanitarios y sociales que afronta el país», concluyó. EFE

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