Entre la celebración y la indignación: reacciones ciudadanas tras la caída de Yoon

Ruy A. Valdés

Seúl, 4 abr (EFE).- Ciudadanos surcoreanos celebraron y criticaron este viernes la histórica destitución del presidente Yoon Suk-yeol, marcada por una considerable división en la opinión pública que se hizo evidente en el centro de Seúl, tras el fallo unánime del Tribunal Constitucional.

«Creo que fue un resultado absolutamente lógico», dijo a EFE Kim Na-yeon, una oficinista de 31 años que colaboraba como voluntaria en el control de multitudes. «Tiene sentido. Lo que (Yoon) hizo fue ilegal. No debió haber intentado un golpe de Estado. Sin embargo, me habría gustado que este anuncio del Tribunal Constitucional llegara mucho antes. El Tribunal Constitucional tomó la decisión correcta».

«Creo que el fallo del Tribunal Constitucional es justo», señaló Chang Young-sun, una asistente social de edad avanzada. «La democracia, la verdad y la justicia siempre triunfan. Por eso, hoy ganó el pueblo. La destitución de Yoon Suk-yeol es legítima».

Kwon Tae-young, oficinista retirado de 67 años, afirmó que «este es un ejemplo de que el sistema judicial de Corea del Sur sigue vivo. A pesar de que en la actualidad la fiscalía tiene mucha influencia en el país, el poder judicial ha podido actuar libremente y emitir un fallo conforme a la Constitución, lo que demuestra que la democracia surcoreana ha avanzado significativamente. Lo celebro y acojo con total entusiasmo».

Sin embargo, a pocos metros de distancia, otros ciudadanos lamentaban la decisión del Tribunal Constitucional, cargando tanto banderas de Corea del Sur como de Estados Unidos, como suelen hacerlo los manifestantes pro-Yoon.

Park Jae-soon, de 50 años y miembro de la Asociación Anticomunista, se declaró partidaria del presidente Yoon. «Hemos apoyado con fuerza al presidente y participado en muchos movimientos en su defensa. Este resultado nos ha dejado en shock».

«Nuestra sociedad ha estado siendo invadida poco a poco por el comunismo, y ahora, descubrir que incluso el máximo órgano que debe proteger la Constitución, el Tribunal Constitucional, ha sido influenciado por el Partido Comunista Chino, es tremendamente impactante», afirmó.

Ji Soon-gyu, escritor de 62 años, dijo que la situación actual del país es inestable. «Con esta destitución, es probable que enfrentemos una grave crisis nacional y una profunda división entre los ciudadanos. Este fallo es extremadamente peligroso».

«Corea y Estados Unidos, una alianza sólida», dijo Byeon Dong-han, de unos 70 años y asesor especial del grupo cívico Equipo de la Victoria Republicana de Trump. «Queremos hablar sobre eso. Corea debe recibir apoyo de Estados Unidos. Por eso hemos pedido ayuda al presidente Trump. Estados Unidos debe venir a Corea y ayudarnos a resolver esta situación».

Las últimas encuestas mostraban que alrededor del 60 % de la ciudadanía apoyaba la destitución, frente a un 35 % que se oponía. EFE

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