Sánchez y Lula buscan relanzar la cooperación pese a diferencias ante Ucrania

Madrid, 24 abr (EFE).- El jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, pretende sellar con el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el relanzamiento de la relación bilateral entre ambos países tras las dificultades de la etapa de Jair Bolsonaro (2019-2022) y pese a las diferencias existentes sobre la búsqueda de la paz en Ucrania.

Impulsar al máximo esa relación es el objetivo que se marca el Gobierno español ante la visita oficial a España de Lula este martes y el miércoles.

El presidente brasileño se verá con el rey Felipe VI y también con el propio Sánchez el miércoles y presidirá un foro empresarial el martes.

El componente económico tiene especial relevancia en esta visita, la primera que hace a Europa el presidente brasileño en su nuevo mandato (tomó posesión en enero pasado) y que ha tenido como primera etapa Portugal.

En Lisboa ha ofrecido detalles de su propuesta para lograr la paz en Ucrania, consistente en aunar a un grupo de países que faciliten las negociaciones.

Fuentes del Gobierno español consideran que ha matizado en este viaje su planteamiento inicial y las críticas que vertió a Estados Unidos y la UE por proporcionar armas a Ucrania porque de esa forma se prolonga el conflicto.

La Unión Europea lamentó que con esas declaraciones pusiera en pie de igualdad a agresor y agredido, y el Ejecutivo de Sánchez reconoce que hay diferencias entre su posición y la de Lula.

Pero considera que la reunión que mantendrán el miércoles Sánchez y el presidente brasileño, junto a varios miembros de sus respectivas delegaciones, permitirá escuchar directamente sus propuestas.

A la vez, Sánchez pretende dejar clara la posición española, que defiende que cualquier negociación pase por la visión de Ucrania como el país agredido. En cualquier caso, el Gobierno español elogia la voluntad de Brasil de buscar fórmulas para lograr la paz.

Más allá de los matices sobre Ucrania, el Gobierno da la bienvenida a Brasil al debate político mundial sobre numerosos asuntos de los que estaba ausente, como la lucha contra el cambio climático.

El Ejecutivo español está determinado a relanzar en esta visita la relación política, económica, comercial, cultural y en muchos otros ámbitos con Brasil tras un periodo protagonizado por el expresidente Bolsonaro en el que admite que quedaron en suspenso.

Ese relanzamiento pretende evidenciarse con la firma de varios acuerdos que se suscribirán entre ambas partes.

La estabilidad económica y financiera internacional (Brasil ostentará la presidencia del G20 en 2024) o los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU estarán asimismo en las conversaciones entre ambas delegaciones.

FORTALECER LA RELACIÓN UE-LATINOAMÉRICA

En el terreno bilateral, se transmitirá a Lula que las empresas españolas siguen viendo a Brasil como un lugar de destino de sus inversiones a largo plazo y que España es puerta para las inversiones brasileñas tanto hacia la UE como hacia el Magreb y todo el continente africano.

Otro objetivo de la visita es fortalecer la relación entre la UE y América Latina, en cuyo contexto el Gobierno resalta el hecho de que España va a asumir el próximo 1 de julio la presidencia semestral comunitaria, y eso va a coincidir con la presidencia brasileña de Mercosur.

Una coincidencia que creen que permitirá que la cumbre UE-América Latina y Caribe del 17 y 18 de julio en Bruselas tenga resultados palpables y sirva, por ejemplo, para impulsar un acuerdo definitivo entre la UE y Mercosur. EFE

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