El sector económico y los derechos humanos
La ministra de Economía, Doris Leuthard, exhortó a las empresas suizas a que asuman sus responsabilidades -y pongan el ejemplo- en materia de derechos humanos.
La tarea de hacer respetar esos derechos incumbe no sólo a los Estados, sino también a los actores económicos, dijo en una conferencia organizada por la ONG Human Rights Watch.
«Las empresas deben comprometerse con la elaboración de códigos sobre el trato a sus colaboradores, pero también mediante el apoyo a los gobiernos» en la defensa de los derechos humanos, señaló la ministra de Economía a swissinfo en el marco de la conferencia que tuvo lugar el lunes (03.03) en Rüschlikon, Zúrich.
«Por ello la pregunta no es si deben implicarse en materia de derechos humanos, sino cómo deben hacerlo», añadió.
Para la ministra de Economía, como para el gobierno suizo, las empresas helvéticas -que buscan figurar entre las mejores a escala mundial- «deben reflejar su responsabilidad en los rubros de los derechos humanos y el medio ambiente».
Problema de los textiles
De hecho, desde hace años los derechos humanos son considerados como tema exclusivo de las instituciones estatales. Sin embargo, como consecuencia de la globalización, en la actualidad, problemas tales como el trabajo de los niños, la corrupción o la discriminación deben ser tomados en consideración por las empresas internacionales.
Lo anterior en virtud de que la opinión pública ha sido sensibilizada con las condiciones de trabajo en las fábricas asiáticas de textiles, de donde procede la mayoría de la ropa barata comprada en Occidente.
En Suiza, como en otros lugares, los consumidores consideran hoy que los actores económicos tienen una parte de responsabilidad en esos problemas y que deben comprometerse para mejorar la situación.
Participar en el debate
«Algunas multinacionales suizas y muy grandes, como Novartis, se implicaron desde el principio (en el debate sobre los derechos humanos). Otras empresas, pequeñas o medianas, como por ejemplo el fabricante de camisetas Switcher, también fueron muy activas en este campo», explicó Thomás Bechtler, presidente de la ONG Human Rights Watch.
Pero, «el debate está empezando apenas en Suiza», sin contar que los desafíos que deben afrontar las sociedades varían según su sector de actividad, precisó a swissinfo. Subrayó que, por ejemplo, el Credit Suisse, segunda institución bancaria del país, introdujo un proceso de control para disuadir a los «clientes indeseables» desde el punto de vista del respeto de los derechos humanos.
Para mostrar su voluntad, las empresas pueden en efecto optar por una política interna en materia de derechos humanos. Pueden también firmar, sobre una base voluntaria, acuerdos internacionales, como el Pacto Mundial de las Naciones Unidas.
Por su parte, Klaus Leisinger, que dirige la Fundación Novartis para el desarrollo sustentable, considera que es importante que las empresas desempeñen un papel motor. «Es de un debate que no sólo deberían seguir las ONG, aun cuando tienen un papel diferente en la sociedad y abordan el problema desde otro ángulo», explicó.
Para él, el hecho de participar en los debates permite a las empresas exponer sus puntos de vista. «No tiene sentido dejar a las ONG elaborar sus propias conclusiones sin implicarse. Porque la sola elección es entonces aceptarlas o rechazarlas».
Por una instancia nacional
En realidad, hay signos que muestran que un creciente número de empresas, concientes de las repercusiones de una mala reputación en materia de derechos humanos, tienen en cuenta esa problemática. Por el momento, más de 3500 empresas, entre las cuales 51 suizas, han firmado el Pacto Mundial de la ONU.
Por su parte, las ONG critican el hecho de que sólo exista una base voluntaria para la adopción de medidas por parte de los actores económicos.
En Suiza, lanzaron un llamado para que se avance más al respecto, en particular con la creación de una instancia nacional independiente encargada de hacer respetar los derechos humanos y de informar a los actores económicos – tal como existe en otros países europeos. Pero, según Thomás Bechtler, eso llevará tiempo.
«Algunas empresas avanzan, pero la mayoría sólo observa la situación… Ese será un proceso de aprendizaje lento y gradual», estimó.
swissinfo, Isobel Leybold-Johnson à Rüschlikon
(Traducción, de Marcela Águila Rubín)
Human Rights Watch (HRW) es una organización no gubernamental con sede en Estados Unidos. Su cuartel general está en Nueva York.
HRW observa la situación de los derechos humanos en el mundo y denuncia los abusos.
LA ONG fue fundada en 1978 con el fin de examinar la compatibilidad de la situación en la URSS con los acuerdos de Helsinki. En diferentes países surgieron ramas de la organización que se reagruparon en 1988.
La rama de Zúrich fue fundada a finales de 2006.
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.