Suiza sigue siendo el país más caro de Europa
Los helvéticos poseen un récord que nadie envidia, el de vivir en uno de los países más caros del continente.
Para la Secretaría de Estado de Economía (SECO) todo es por la falta de concurrencia y de un exceso de regulación del mercado.
El ministro suizo de Economía, Joseph Deiss, inauguró este martes una conferencia de la SECO consagrada a analizar las causas que hacen de Suiza una isla de la carestía, estudio realizado por INFRAS Y BAK, dos institutos de investigaciones económicas de Zúrich y Basilea, respectivamente.
Según los estudios, la vida es un 33% más en cara en Suiza que en Alemania, Francia, Italia, Austria, Portugal y Suecia, países de la Unión Europea que sirvieron de comparación.
Ambos organismos apuntan a las causas que ya son conocidas desde hace años por los especialistas. La principal, es la falta de concurrencia en el mercado y la existencia de fuertes mecanismos de regulación, es decir, de monopolios que controlan el sistema.
Las verduras dos veces más caras
En comparación con la Unión Europea, Suiza posee precios de consumo superiores al 30%. Un ejemplo es el valor de las verduras y las frutas que los helvéticos pagan mucho más caras que sus vecinos, sin contar con los demás productos agrícolas donde también las diferencias son abismales.
Un botón de muestra: una lechuga que en Suiza cuesta en promedio 2,90 francos, en Alemania no sobrepasa 1,5 francos. En este caso, la diferencia es la mitad. La leche también es 62% más cara en Suiza que en Francia.
En cuanto a los arriendos, los servicios médicos, los electrodomésticos y los transportes son un 40% más caros que en los países estudiados. Otra comparación importante está en la hotelería, donde existen diferencias hasta de un 36%, lo que perjudica al turismo.
“Durante mucho tiempo justificamos los precios elevados por el buen funcionamiento de los servicios públicos, la calidad de los productos suizos y el alto nivel de los salarios, pero esos argumentos no son más válidos hoy en día,” afirmó Joseph Deiss.
Demasiadas medidas proteccionistas
A juicio del ministro de Economía, el principal factor de la carestía es lo excesivo de las medidas proteccionistas. A manera de ejemplo, en Suiza sólo dos grandes cadenas controlan el 90% de los supermercados que comercializan el 80% de los productos agrícolas.
Cabe señalar al respecto que Suiza es uno de los países que subvencionan más fuertemente a los agricultores y mantienen bandas de precios para los lácteos. Un agricultor recibe en promedio 500 francos anuales por cada vaca, y por sólo mantener predios sembrados con función turística, sumas equivalentes a un cuarto de salario.
En el parlamento se encuentra en discusión la supresión de las bandas de precios para la leche, que debería entrar en vigor en el 2009. Sólo entonces la importación de lácteos hará bajar su excesivo valor, estima a título de ejemplo, Aymo Brunetti, del SECO.
Los carteles parte del folclor helvético
“Queremos que en Suiza exista verdaderamente una economía de mercado, pero eso es un poco difícil, pues los carteles hacen parte del folclor del país,” agrega Joseph Deiss, empeñado en que el Consejo Federal adopte leyes que pongan término a esta forma de control del mercado.
El ministro afirma que en el ámbito internacional Suiza está muy abierta a la concurrencia, pero el problema sigue siendo en el plano interno, donde los mecanismos proteccionistas se desmantelan muy lentamente.
Los expertos del SECO sostienen que una eventual entrada de Suiza a la Unión Europea, tendría efectos benéficos para los consumidores que podrían acceder a precios más de acuerdo a los mercados europeos.
swissinfo
El proteccionismo principal causa de la carestía de la vida.
Falta de concurrencia hace subir los precios de productos básicos.
La existencia de carteles impiden mayor liberalización.
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