Son parte del patrimonio del país alpino. Transportan a los viajeros a la cima del Jungfraujoch (Top of Europe), del Gornergrad (con vistas sobre el Cervino) y hasta al Palacio Federal (sede del Parlamento suizo). Suiza cuenta con 1 700 teleféricos y remontes, de los cuales 250 se presentan en un nuevo libro.
Los funiculares, telesillas y otros teleféricos suizos transportan cada año a cerca de 300 millones de pasajeros: sobrevuelan acantilados hasta cumbres con vistas que quitan el aliento; atraviesan puentes, praderas u otros paisajes espectaculares. La mayoría de ellos se construyeron en los cantones del Valais, los Grisones, Berna y el Tesino, pero también se hallan en los cantones más ‘llanos’ del país.
Los remontes mecánicos no son, por lo general, medios para el transporte diario. Están destinados, sobre todo, a los turistas nacionales o extranjeros que disponen de tiempo para disfrutar de un recorrido en tren de cremallera, telesilla, teleférico o funicular.
(Fotos del libro ‘250 Berg- und Seilbahnen Schweiz‘, de Roland Baumgartner y Roman Weissen, Texto: Gaby Ochsenbein, swissinfo.ch)
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