Funcionario argentino acusa a Bolivia de permitir ingreso de drogas por «acción u omisión»

Buenos Aires, 29 ene (EFE).- Adrián Zigarán, el interventor de la localidad argentina fronteriza con Bolivia donde las autoridades planean la construcción de un cerco de 200 metros, acusó este miércoles al Gobierno del país andino de permitir, por “acción u omisión”, el ingreso de toneladas de cocaína a la Argentina.

“El Gobierno de Bolivia, por acción u omisión, nos llena de toneladas de cocaína todos los días, y por más que dialoguemos no hacen nada y entonces que se alteren por un alambrado de 200 metros es ridículo”, dijo hoy Zigarán en declaraciones a la emisora Futurock.

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El funcionario, que desde 2024 ejerce como interventor de la localidad de Aguas Blancas tras la detención del anterior alcalde, consideró que «no hay colaboración del lado boliviano» para el control de la frontera y agregó: «No vemos que haya la misma intensidad que le ponemos nosotros para la lucha contra el narcotráfico».

El Gobierno de la provincia argentina de Salta (norte), donde se ubica esta localidad, publicó este lunes una licitación para ejecutar un “alambrado perimetral” de 2,5 metros de alto y unos 200 metros de largo que se instalará entre la oficina migratoria argentina y la terminal de buses, con el objetivo de frenar y controlar el flujo migratorio que llega desde la localidad boliviana de Bermejo.

Esta valla forma parte de las medidas contempladas en el llamado Plan Güemes, presentado por la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, a principios de diciembre pasado en Salta, que, según la funcionaria, tiene por objetivo combatir el narcotráfico, el contrabando y la trata de personas.

El Ministerio planea desplegar 310 efectivos policiales de distintas fuerzas federales que serán asignadas a áreas que consideran “críticas”, como el río Bermejo, que separa ambos países, y la Ruta Nacional 34, conocida popularmente como la “ruta de la droga”.

La Cancillería boliviana expresó esta semana su «preocupación» ante el anuncio e indicó que «los temas fronterizos deben ser tratados por medio de mecanismos de diálogo bilaterales establecidos entre los Estados para encontrar soluciones coordinadas a temas en común».

El Ministerio de Relaciones Exteriores boliviano también anunció que solicitará a través de los canales diplomáticos la información sobre este tema «para emprender las acciones que correspondan».

Zigarán describió hoy el comunicado boliviano como «totalmente desubicado» y opinó que la reacción del país vecino a esta «acción menor» puede estar vinculada con cuestiones de política interna.

El funcionario también aseguró que estas medidas son para correr la “narcofrontera” devuelta a los “límites naturales con Bolivia”, y destacó que desde hace un tiempo Salta empezó a tener actividades de sicarios, ataques de bandas y ejecuciones.

«Simplemente es ordenar que todo argentino o extranjero que ingrese o egrese del país lo haga por el lugar indicado, que es Migraciones», añadió, y consideró que el plan de construir una cerca en la zona fronteriza «es una medida mínima de volver a poner orden en la frontera». EFE

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