El último viaje de Juan Pablo II
Ha fallecido el jefe supremo de la Iglesia católica. Juan Pablo II tenía 84 años de edad y casi 27 de pontificado cuando expiró este sábado (02.04.) a las 21:37 hs.
Las oraciones de los fieles y el recogimiento en el mundo acompañaron su agonía. Berna ha transmitido sus condolencias a la Santa Sede.
Su delicado estado de salud empeoró en la noche del jueves a raíz de la fiebre alta provocada por una infección urinaria, pero prefirió quedarse en su aposento y enfrentar lo que entonces ya parecía inevitable.
El cuadro clínico fue agravándose el viernes. La insuficiencia renal y cardiovascular confirmaba los temores mientras unos 60.000 fieles se reunían en la Plaza San Pedro para acompañarlo con sus oraciones. La misma imagen se repitió desde las primeras horas de este 2 de abril de 2005.
Las misas y las oraciones en los cinco continentes, no sólo del credo católico; así como el reconocimiento y el recogimiento de los líderes del mundo pusieron de manifiesto la dimensión que hasta el último momento tuvo Juan Pablo II.
El jefe de la Iglesia católica expiró este sábado a las 21: 37. Terminaba así el prolongado calvario que desde la aparición de su dolencia de parkinson fue acentuándose con el paso del tiempo.
El Pontífice no consiguió superar los males que lo aquejaron bastante en los últimos dos meses, tiempo en el que fue sometido a una traqueotomía y en los últimos días a la alimentación por una sonda nasogástrica.
La miradas puestas en las dos ventanas de la habitación del Papa polaco quedaron allí hasta el desenlace fatal: hasta la partida de su último viaje.
Reacciones, también en Berna
El planeta reaccionó inmediatamente. El secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, expresó su «profunda tristeza» por la muerte el Papa, un «infatigable abogado de la paz». Italia decretó tres días de duelo.
En Berna, el Consejo Federal (gobierno) transmitió sus sinceras condolencias a la Santa Sede y a la Iglesia católica. Según el presidente Samuel Schmid, la muerte de Juan Pablo II no entristece sólo a la Iglesia católica sino al mundo entero.
«Con Juan Pablo II termina un pontificado que quedará grabado en la historia. Además de su personalidad carismática, ha dejado su huella en la historia del mundo, más allá de las fronteras religiosas» señaló a la agencia ATS Jean-Blaise Defago, portavoz de Samuel Schmid.
«Los suizos y suizas recordamos las visitas que hizo Juan Pablo II a nuestro país, entre ellas su paso por Berna el pasado otoño, ocasión en la cual cautivó a la juventud», precisa en su mensaje el presidente de la Confederación Helvética.
El Consejo Federal enviará una carta de condolencia a la Ciudad del Vaticano. Aún no ha decidido la representación de Suiza en las excequias de Juan Pablo II.
Unísono en las iglesias de Suiza
La Conferencia Episcopal de Suiza expresó su dolor por la muerte del Papa Juan Pablo II. Llora la desaparición de «un ser humano excepcional, un auténtico cristiano y un notable pastor» indicó el portavoz Kurt Koch.
De su parte la Federación de Iglesias Protestantes comparten el dolor de sus hermanos católicos romanos, según declaró su presidente Thomas Wipf al tiempo de destacar la calidad humana y la fuerza de convencimiento de Juan Pablo II.
Un papa diferente
Juan Pablo II pasa a la historia como ‘el Papa Peregrino’, por sus frecuentes periplos. Durante su vida emprendió un total de 104 viajes por 130 países del planeta.
Una de sus últimas visitas fue a Suiza, en junio del 2004, poco después de la celebración de su 84 aniversario. Frágil y enfermo, el Papa presentó entonces un aspecto muy diferente a aquel de su visita anterior hace 20 años.
Aunque su último viaje a Suiza se produjo en medio de un debate sobre su capacidad para seguir en funciones, la visita constituyó un éxito para la Iglesia Católica helvética.
Alrededor de 70.000 personas acudieron a la Misa celebrada por Juan Pablo II en la ciudad de Berna, 20.000 más de las esperadas.
Papa de la Cortina de Hierro
Nació en 1920 en los alrededores de la ciudad polaca de Cracovia. Karol Wojtyla fue elegido Papa en octubre de 1978, convirtiéndose así en el primer Pontífice no italiano después del flamenco Adriano VI, Papa de 1522 a 1523.
Su nominación estuvo precedida de dos decesos. En agosto del mismo año murió Paulo VI y tiempo después falleció el sucesor de este último, Juan Pablo I, víctima de un ataque cardiaco ocurrido tan sólo 33 días después de su ascensión al trono pontifical.
Con 58 años en el momento de ser elegido Papa, Juan pablo II fue uno de los jefes más jóvenes de la historia de la Iglesia Católica del siglo XX.
El atentado en la Plaza San Pedro
Juan Pablo II fue víctima de un atentado tres años después de haber asumido su cargo. El intento ocurrió el 13 de mayo de 1981 en la plaza San Pedro de Roma, con ocasión de la audiencia de los miércoles.
El autor de los disparos que hirieron gravemente al Papa y conmovieron al mundo fue el turco Alí Agca, un musulmán fanático relacionado con el grupo de extrema derecha de Lupi Grigi. Más tarde el pontífice lo perdonaría durante una visita a la cárcel donde se encontraba cumpliendo su condena.
Juan Pablo II fue el primer Papa de la historia que cruzó el umbral de una sinagoga y participó en una ceremonia religiosa en memoria de las víctimas del Holocausto del campo de exterminio nazista de Auschwitz.
Joven y atlético
En su juventud Juan Pablo II fue un deportista activo que practicó de manera regular el esquí, canotaje, y natación. También demostró un gran interés por el teatro, y en 1938 entró en la Universidad de Cracovia, donde además estudió poesía.
Durante la ocupación alemana de Polonia (1939-1945) Karol Wojtyla escapó a la detención y a ser deportado ocultándose en una caverna de piedras y en una fábrica química. Su padre morirá antes de ver a su hijo convertido en sacerdote en 1946.
Más tarde, Juan Pablo II recordará a menudo las últimas palabras de su padre: «no viviré mucho, pero antes de morir quiero asegurarme que consagrarás tu vida al servicio de Dios».
Más tarde, el joven sacerdote ascenderá rápidamente todos los escalones de la jerarquía católica, convirtiéndose en arzobispo en 1964 y cardenal en 1967.
La elección de un Papa
En ninguna otra parte del mundo la elección de Karol Wojtyla como jefe de la Iglesia provocó tanto entusiasmo como en Polonia, país que en esa época hacía parte del bloque comunista.
Sin embargo Juan Pablo II no olvidó que era el Pontífice de varios miles de millones de católicos en el mundo y dio comienzo a una serie de viajes que lo llevaron a diferentes lugares del planeta.
Ningún papa antes de él había viajado tanto. Una de sus visitas más famosas fue sin duda su viaje pastoral a Cuba en 1998, donde fue recibido en audiencia privada por Fidel Castro.
En el 2001 el Papa condenó enérgicamente los atentados terroristas del 11 de septiembre contra los Estados Unidos, calificándolos como una «ofensa contra Dios», y de «crímenes intolerables».
Durante el mismo año escribió otra página de la historia dirigiéndose a sus fieles a través de Internet. Aprovechó la ocasión para pedir excusas a las víctimas de los abusos sexuales cometidos por miembros del clero.
El papa Wojtyla quedará probablemente en la memoria de todos como un conservador en cuanto a los preceptos de la Iglesia Católica, especialmente en materia sexual.
A pesar de encontrarse en los últimos años de su pontificado muy quebrantado de salud, afectado por la enfermedad de Parkinson, Juan pablo II se mantuvo en el cargo hasta el final, hasta la hora de su muerte.
swissinfo
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