Japón quiere desvincular el gasto en defensa de las negociaciones comerciales con EE.UU.
Tokio, 18 abr (EFE).- El Gobierno de Japón mostró este viernes su intención de desvincular los temas de defensa de las negociaciones comerciales que mantiene con Estados Unidos, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmara que esos asuntos están también sobre la mesa.
«Son temas separados», dijo hoy el ministro japonés de Defensa, Gen Nakatani, al ser preguntado sobre la posibilidad de que se hable del gasto militar nipón y de la aportación a Washington por acoger bases estadounidenses, en las negociaciones que Tokio mantiene con Estados Unidos a raíz de los nuevos aranceles.
«Las negociaciones están centradas en los aranceles», dijo Nakatani, quien añadió que no tiene previsto viajar a Estados Unidos para participar en las discusiones sobre las nuevas tasas que aplica EE.UU. sobre sus importaciones.
En la misma línea, el primer ministro nipón, Shigeru Ishiba, señaló hoy en una sesión parlamentaria que la contribución nipona a Estados Unidos por el despliegue militar «se divide adecuadamente entre los Gobiernos de Japón y EE.UU. basándose en el acuerdo bilateral».
Ishiba añadió que la forma en que se distribuye el gasto en defensa «se decide de forma subjetiva por parte de nuestro Gobierno», al ser preguntado por la oposición sobre el tema.
El pasado miércoles tuvo lugar en Washington la primera ronda de negociaciones sobre los nuevos aranceles estadounidenses entre el designado por Tokio para ese tema, el ministro de Revitalización Económica, Ryosei Akazawa, y el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent.
El presidente estadounidense, Donald Trump, quien también se unió a las conversaciones, calificó de «gran progreso» el encuentro con la delegación japonesa.
Trump también dijo a través de las redes sociales que la delegación japonesa había viajado para tratar no solo temas comerciales, sino también «el costo del apoyo militar».
El mandatario ha calificado en repetidas ocasiones el tratado de seguridad entre Japón y Estados Unidos, vigente desde 1960, de «desequilibrado», lo que ha generado inquietud en Tokio ante la posibilidad de que Washington exija un aumento en el gasto en defensa japonés o una mayor contribución para el mantenimiento de las tropas estadounidenses desplegadas en el país.
El Gobierno japonés mantiene su postura de que los asuntos de seguridad deben abordarse en un marco separado de las conversaciones comerciales, con el objetivo de preservar la estabilidad de una alianza considerada pilar de la paz regional. EFE
ahg/emg/jgb