La degradación de los océanos, una amenaza creciente para la humanidad
Susana Madera
Cuenca (Ecuador), 13 nov (EFE).- Expertos internacionales advierten que los océanos están en una situación «muy preocupante» por la acidificación, la contaminación, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, afectando a la salud de los ecosistemas marinos y comprometiendo los medios de vida de millones de personas que dependen de ellos.
Así lo explica a EFE Rosa Castizo, redactora principal de un estudio elaborado por el Observatorio de La Rábida, que se presentó en la ciudad andina de Cuenca, en uno de los actos previos a la XXIX Cumbre Iberoamericana de jefas y jefes de Estado y de Gobierno que se desarrollará entre el jueves y el viernes.
El Observatorio es el resultado de una alianza estratégica entre la Secretaría General Iberoamericana (Segib), el Ministerio de Asuntos Exteriores, la Unión Europea y Cooperación de España, la Junta de Andalucía y la Diputación Provincial de Huelva.
Castizo afirma que, para poder seguir con la vida, tal y como se la conoce hasta ahora, hay que estar dentro de «nueve límites planetarios», pero ya se han sobrepasado seis.
Límites planetarios
De los nueve límites planetarios, cuatro tiene relación con los océanos: cambio climático, acidificación, pérdida de biodiversidad y contaminación.
Los datos analizados apuntan que la subida del nivel del mar que provoca el cambio climático está incidiendo en toda Iberoamérica con niveles superiores a los tres milímetros al año y afecta ya a zonas costeras.
Tras señalar que sin los océanos no habría «manera ni de respirar ni de existir», Castizo alerta de que estos -que han venido capturando el 90 % de calor producido por el ser humano y el 33 % de las emisiones-, ahora «han perdido capacidad de capturar CO2».
Se han vuelto tan ácidos que, en el caso de América Latina y el Caribe, los corales se están blanqueando, dice.
Por otra parte, apunta que «casi toda la contaminación que va a los océanos proviene de fuentes terrestres» y subraya: «La manera en que nos alimentamos es responsable tanto de la pérdida de biodiversidad como de la contaminación marina».
Además, señala que el 90 % de los plásticos que se vierten al mar son de un solo uso.
Castizo añade que América Latina y el Caribe «es la región que más pierde biodiversidad a escala global. Casi un 95 % de las especies se han estado perdiendo durante los últimos 50 años, y en ecosistemas marinos, más de la mitad de las especies», lo cual es «muy, muy grave», asegura.
Soluciones
La experta avanza que la situación se puede cambiar, y cada persona puede poner su parte: «Todos tenemos en la mano reducir el consumo de proteína animal, comer cuanto menos envasado mejor, así reducimos el plástico, y comer productos autóctonos, como comían nuestros abuelos, con recetas lo más tradicionales posibles».
Además de transformar los sistemas alimentarios para reducir las emisiones, Castizo menciona entre las «medidas urgentes» a adoptar, el restaurar y conservar mucho mejor los océanos, pues hay una alta tasa de áreas marinas protegidas, «pero no todas son efectivas».
Para ello ve indispensable apoyar a pueblos indígenas y comunidades costeras para que sepan cómo restaurar y conservar esos océanos, y añade que también se debe modificar la manera en la que se entiende tanto la pesca como el turismo.
Clama por acciones urgentes, pues considera que todo esto «tenía que haberse hecho ayer» pero lamentablemente se llega «muy tarde» a todo.
El informe llama a fortalecer la cooperación regional, ampliando y conectando las áreas marinas protegidas y apoyando la restauración de ecosistemas críticos como los manglares y los arrecifes de coral.
Por eso, expertos reunidos en Cuenca destacan que citas como la Cumbre Iberoamericana abren una oportunidad para impulsar la cooperación a fin de profundizar en los compromisos asumidos para enfrentar emergencias climáticas desde los gobiernos, la sociedad civil, las comunidades locales y organizaciones de cooperación. EFE
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