La guerra semántica en torno a la «Zona C» de Cisjordania

Para Naciones Unidas, Cisjordania es un territorio palestino ocupado. Pero Israel no piensa lo mismo y libra una guerra semántica sobre el estatuto de la llamada «Zona C», que abarca una gran parte de Cisjordania y concentra las tierras que quiere anexarse.
Oenegés proisraelíes, y últimamente la sección del gobierno encargada de otorgar las acreditaciones a la prensa extranjera, escriben correos o tiran de las orejas en Twitter a los medios o a corresponsales extranjeros por el léxico, según ellos «sesgado», que utilizan para referirse al conflicto israelo-palestino.
Israel sigue usando el nombre bíblico de «Judea y Samaria» para referirse a Cisjordania y lamenta que la prensa internacional no lo utilice.
Pero ahora el reproche es mucho más sutil y remonta no tanto a los lejanos reinos israelitas sino a los acuerdos de Oslo, en los años 1990, que separan Cisjordania en tres grandes zonas bautizadas como A, B y C.
– Oferta «muy generosa» –
Las dos primeras zonas representan el 40% del territorio y están mayoritariamente bajo control palestino, mientras la zona C (60%) se encuentra bajo control militar y administrativo israelí aunque, según los acuerdos de Oslo, la idea es que se transfiriera a los palestinos ese poder al firmar un acuerdo de paz definitivo.
Esta cuestión sobre la partición volvió al centro de la actualidad con el anuncio en enero del plan estadounidense para Oriente Medio, que prevé la anexión por Israel del Valle del Jordán y del centenar de colonias israelíes en Cisjordania, así como la creación de un Estado palestino en un territorio reducido.
A partir del 1 de julio, el gobierno israelí debe presentar su estrategia para poner música a la partitura del plan de Donald Trump teniendo en cuenta que la totalidad de estos codiciados territorios –el Valle del Jordán y las colonias o asentamientos–, están precisamente en la «zona C».
El plan estadounidense prevé una partición del 50/50 de esta zona C, donde residen en la actualidad unos 450.000 colonos israelíes -tres veces más que en el momento de la firma de los acuerdos de Oslo- y unos 300.000 palestinos.
«Inicialmente, la idea era que la zona C se convirtiera gradualmente en parte de la Autoridad Palestina, y con el tiempo en parte del (Estado) de Palestina, cuando hubiera un acuerdo permanente», explica a la AFP Yossi Beilin, negociador israelí para los acuerdos de Oslo.
Pero la derecha considera «la zona C como israelí» y «abusa de Oslo» tratando de mantener «para siempre» esta interinidad, dice Beilin, que fue ministro laborista. «Para la derecha, la oferta (50/50) es muy generosa (para los palestinos) y no comprende por qué el mundo se opone».
– ¿Disputado? –
Para Israel, la «Zona C» no puede considerarse como un territorio «palestino» ya que es un territorio «disputado», pues después de Oslo no ha habido acuerdo para sellar la paz definitiva entre palestinos e israelíes.
Por tanto, si la Zona C está en «disputa», la prensa internacional no puede decir que el conjunto de Cisjordania ocupada es un «territorio palestino», escribió un responsable gubernamental a un corresponsal de un medio europeo instándole a que deje de usar la apelación de «territorios palestinos ocupados».
Glenys Sugarman, exdirectora ejecutiva de la Asociación de la Prensa Extranjera (FPA, según sus siglas en inglés) de Jerusalén, está acostumbrada a que funcionarios israelíes critiquen el vocabulario de la prensa sobre el conflicto. Pero dice que últimamente ha constatado una nueva tendencia.
«Esta actitud puntillosa en Twitter me parece un nuevo fenómeno. Me fui de la FPA a finales del año pasado y nunca había visto nada igual» por parte de la Oficina de Prensa del Gobierno (GPO, según sus siglas en inglés), vinculada a la oficina del primer ministro, Benjamin Netanyahu», dice.
Respondiendo a una pregunta de la AFP, la GPO reconoce que «interviene ocasionalmente sobre informaciones incorrectas, inexactas o falsas en la prensa», aunque asegura que no «es de su incumbencia» aclarar la denominación de la «Zona C», de cara a una posible anexión de este territorio.
Muchos medios extranjeros, incluida la AFP, denominan estas tres zonas como «Territorios Palestinos», o «Cisjordania ocupada» y a veces, «territorios palestinos ocupados».
Para el equipo de trabajo del emisario de la ONU para Oriente medio, Nickolay Mladenov, la zona C también se «considerada un territorio palestino ocupado».
Pero en caso de anexión, el debate continuará ya que, según el gobierno, las zonas anexadas dejarían teóricamente de ser territorio «disputado», y estarían ya en Israel.