La oposición birmana aplaude que fiscal de la CPI pida orden de arresto para líder militar
Bangkok, 27 nov (EFE).- La oposición democrática birmana aplaudió este miércoles la petición de la fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) para que se emita una orden de arresto contra el líder de la junta militar, Min Aung Hlaing, por la campaña de persecución a la minoría étnica musulmana rohinyá.
Esta solicitud considera que «existen motivos razonables» para creer que el líder golpista tiene «responsabilidad penal» por los crímenes de lesa humanidad presuntamente cometidos entre el 25 de agosto y el 31 de diciembre de 2017 por las fuerzas armadas de Birmania, con el apoyo de la policía nacional, la guardia fronteriza y de civiles no rohinyás.
El brutal operativo orquestado por el Ejército contra los rohinyá, en el occidental estado de Rakáin, motivó el éxodo de más de 720.000 refugiados a la vecina Bangladés, lo que está también siendo investigado por la ONU por constituir un posible genocidio.
Más de 10.000 rohinyás fueron asesinados en el país durante este periodo, según cifras de Naciones Unidas.
«La solicitud de la CPI de una orden de arresto contra Min Aung Hlaing representa un momento crítico en la historia de Birmania. Debe rendir cuentas plenamente por todas las vidas inocentes que ha destruido y las familias que ha destrozado», declaró en X Zin Mar Aung, ministra de Exteriores del Gobierno de Unidad Nacional (NUG).
«Hago un llamamiento a los jueces para que emitan rápidamente la orden y a los gobiernos para que actúen y la hagan cumplir para defender la justicia y el derecho internacional», subrayó la representante del NUG, creado por activistas y políticos derrocados por el golpe de Estado de 2021 en oposición al régimen castrense y que se autoproclama la autoridad legítima de Birmania.
El fiscal de la CPI, Karim Khan, indicó en un comunicado que esta es la primera solicitud de orden de arresto en la CPI contra un alto funcionario del gobierno birmano, al advertir de que «habrá más solicitudes en el futuro».
La petición de orden de arresto, que aún debe ser aprobada por los jueces de la CPI, también fue aplaudida por organizaciones en favor de los derechos humanos y de la minoría rohinyá.
«Este es un día de celebración no sólo para los rohinyás, sino para todos los birmanos. No se trata sólo de buscar justicia y rendición de cuentas, sino también de reconocer los crímenes cometidos contra nosotros, que fueron ignorados durante tanto tiempo», apunta en un comunicado Tun Khin, presidente de la Organización Rohinyá Birmana del Reino Unido (BROUK).
Por su parte, la asesora principal de justicia internacional de Human Rights Watch (HRW), Maria Elena Vignoli, dijo que «la solicitud del fiscal de la CPI de esta orden de arresto es una advertencia contundente a los líderes militares de Birmania de que no están fuera del alcance de la ley. Y envía a la comunidad rohinyá un mensaje importante de que su lucha por la justicia no ha sido olvidada». EFE
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