La renuncia de las redes sociales a moderar su contenido erosiona aún más la democracia
Davos (Suiza), 24 ene (EFE).- La renuncia de las redes sociales a moderar sus contenidos, lo que facilita la propagación de informaciones falsas, es uno de los factores que más erosiona la confianza en las instituciones democráticas, que solo se pueden sostener «en un mundo sustentado en hechos», según coincidieron este viernes analistas en el Foro Económico Mundial de Davos.
«La confianza se construye con hechos, pero estamos en la era de la desinformación, sobre todo ahora que las redes sociales están abandonando su responsabilidad de moderar su contenido y así facilitar una libertad de expresión verdadera y segura», dijo la directora de ONG de derechos humanos Human Rights Watch, Tirana Hassan, en una mesa redonda que compartió con otros expertos.
Ante la crisis de la democracia en el mundo, la líder activista sostuvo que los ciudadanos no pueden seguir tomando decisiones o interactuando entre ellos sobre la base de informaciones falsas y puntos de vistas desinformados.
Y aseguró que se debe acabar con «el mito» de que las redes sociales pueden regularse a si mismas.
La profesora de neurociencia cognitiva en la Universidad de Londres, Tali Sharot, dijo que uno de los principales cambios que ha experimentado el mundo en cuanto a la forma en que la gente forma sus opiniones es que hasta hace unos años estás eran influenciadas principalmente por las personas de nuestro entorno.
Pero a raíz de la expansión de las redes sociales «tomamos las ideas de personas que están muy lejos y que ni siquiera conocemos», explicó.
«En este circuito la gente no entiende lo que es verdad o no y termina dudando de lo que es verdad, así que en realidad se toman decisiones en función de lo que queremos creer», indicó.
Esto luego influye en sus ideas políticas y en la forma en que votan.
Sharot también opinó que se deben regular las redes sociales y, sobre todo, «romper el monopolio» de su propiedad y los conflictos de intereses que se han creado en torno a éstas porque sus propietarios (todos en Estados Unidos) cada vez están adquiriendo más poder político.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, fue el único líder político que abordó de lleno en su participación en el Foro de Davos la problemática de las grandes plataformas digitales y planteó medidas concretas para proteger a los usuarios y hacer responsables a sus propietarios.
Entre otras propuestas mencionó que todas las cuentas en redes sociales deberían estar vinculadas a una identidad digital europea para que, aunque se usen apodos o nombres falsos, si se comete un delito las autoridades pueda rastrear al autor. EFE
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