La represión de la disidencia continuó en 2022 en Argelia, según HRW

Túnez, 12 ene (EFE).- Las restricciones a la libertad de expresión, de asociación y de reunión marcan el informe anual de la ONG Human Rights Watch (HRW) sobre Argelia, donde continuaron los procesamientos de activistas, abogados y periodistas, así como la disolución de organizaciones de la sociedad civil.

Según el informe publicado hoy miércoles, unas 250 personas permanecían detenidas hasta el mes de octubre «por su participación en protestas pacíficas, activismo o expresión», un tercio de ellas en prisión preventiva.

En la relación de sucesos sobre derechos políticos, destaca la deportación por parte de España de Mohamed Benhalima, exmilitar y activista que huyó en 2019 por temor a represalias tras su participación en el movimiento de protestas antigubernamentales del Hirak.

«España rechazó dos veces la solicitud de asilo de Benhalima a pesar de la opinión de la Agencia de la ONU para los Refugiados de que se enfrentaba a un riesgo creíble de tortura y de que la criminalización en Argelia de la oposición pacífica era reconocida internacionalmente», recoge HRW.

La organización internacional asegura que las autoridades utilizan cada vez más cargos relacionados con el terrorismo «para enjuiciar a los defensores de los derechos humanos, activistas y otros críticos».

La libertad de asociación y asamblea también preocupa a HRW, tras la clausura de organizaciones que habían apoyado abiertamente al Hirak en años anteriores.

En septiembre, las autoridades decretaron el cierre de la organización Santé Sidi El Houari, asociación para la preservación del patrimonio cultural e histórico de la ciudad de Orán, después de recibir una denuncia del gobernador por «financiación extranjera sin la aprobación de las autoridades competentes».

«El marco legal argelino relacionado con las asociaciones es restrictivo y viola el derecho a la libertad de asociación», apuntó HRW en el informe.

Durante 2022, se registraron también expulsiones arbitrarias y colectivas a Níger de migrantes de diversas nacionalidades, incluidos niños. Unos 14.000 entre los meses de enero y mayo, según Médicos Sin Fronteras.

«Los migrantes denunciaron casos de violencia, robo de sus pertenencias, detención arbitraria y malos tratos», indicó en el informe.

Y añadió que Argelia carece de una ley nacional de asilo y un marco de protección, aunque es parte de las convenciones africanas y de la ONU sobre refugiados. EFE

lfp/cg

© EFE 2023. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los contenidos de los servicios de Efe, sin previo y expreso consentimiento de la Agencia EFE S.A.