La Unión Africana suspende a Níger y expresa reservas sobre una intervención armada
La Unión Africana (UA) suspendió a Níger, escenario de un golpe de Estado a finales de julio, y expresó sus reservas sobre una posible intervención militar para restablecer el orden constitucional en el país, según un comunicado difundido este martes por el bloque regional.
El Consejo de Paz y Seguridad (CPS) de la UA, que se reunió el 14 de agosto, decidió «suspender inmediatamente la participación de la República de Níger en todas las actividades de la UA y de sus órganos e instituciones hasta el restablecimiento efectivo del orden constitucional en el país», manifestó el documento publicado una semana después de la reunión.
En el comunicado de la UA, el CPS también «toma nota de la decisión» de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) de «desplegar una fuerza» en Níger, pero pide que se haga una «evaluación de las implicaciones económicas, sociales y de seguridad» de tal despliegue.
La Cedeao anunció el viernes que estaba lista para lanzar una intervención armada con el fin de restablecer el orden constitucional en el país, un aliado clave de las naciones occidentales en la lucha contra los grupos yihadistas que operan en el Sahel.
En el comunicado, la UA subrayó su preferencia por una vía diplomática y manifestó su apoyo al «compromiso sostenido de la Cedeao de restablecer el orden constitucional por medios diplomáticos».
La Cedeao anunció el 10 de agosto su intención de activar una fuerza militar para «restablecer el orden constitucional en Níger», después del derrocamiento del presidente Mohamed Bazoum.
Pero de momento, no han trascendido detalles ni fechas de la operación. La organización regional ha repetido que prefiere encontrar una solución diplomática a la crisis, pero no descarta usar la fuerza, a pesar de las voces opuestas en su seno.
El nuevo hombre fuerte de Níger, el general Abdourahamane Tiani, advirtió el sábado que una «agresión» no sería «el paseo que algunos creen» y anunció una transición de máximo tres años antes de devolver el poder a los civiles.
Desde 2020, Malí, Guinea y Burkina Faso han sido escenario de golpes de Estado en África Occidental. Níger es el cuarto país de la región que atraviesa la misma situación.