Llegan 430 migrantes a las costas de Inglaterra en un día

Un grupo de migrantes en una lancha inflable llega a la costa de Deal, al sureste de Inglaterra, tras cruzar el Canal de la Mancha desde Francia, el 14 de septiembre de 2020 afp_tickers

Al menos 430 inmigrantes cruzaron el Canal de la Mancha hacia Inglaterra el lunes, informó el martes el ministerio del Interior, un nuevo récord diario que tiene lugar mientras el Parlamento debate un proyecto de endurecimiento del sistema de asilo británico.

El anterior récord diario, registrado en septiembre de 2020, era de 416, según la agencia de noticias británica PA.

Según la BBC, cerca de 8.000 personas han llegado a las costas del Reino Unido en unas 345 embarcaciones desde principios de año, pese a la promesa del gobierno de Boris Johnson de atajar esta ruta para la inmigración clandestina y sus reiterados llamados a Francia para que impida las travesías desde sus costas.

Según el comandante Dan O’Mahoney, responsable de vigilar las aguas que separan a los dos países, el Reino Unido está experimentando «un aumento inaceptable de las travesías en pequeñas embarcaciones por el Canal de la Mancha debido al incremento de la inmigración clandestina en Europa».

«Las personas deben buscar asilo en el primer país seguro al que lleguen y no arriesgar sus vidas haciendo estas peligrosas travesías. Seguimos persiguiendo a los delincuentes que están detrás de estos cruces ilegales», afirmó en un comunicado del ministerio del Interior.

El nuevo récord se produce mientras los diputados británicos debaten esta semana el proyecto de ley de reforma del sistema de asilo de la ministra del Interior, Priti Patel.

Presentada por la ministra como «justa pero firme», pero denunciada por los grupos de derechos humanos, esta reforma pretende desalentar la inmigración clandestina y prevé un trato diferente para los solicitantes de asilo según hayan llegado al país de forma legal o ilegal.

Durante los debates del lunes en la Cámara de los Comunes, la ex primera ministra conservadora Theresa May, también exministra del Interior, advirtió de que sería un error enviar a los solicitantes de asilo a centros fuera del Reino Unido mientras se estudian sus solicitudes.

El proyecto de ley aumenta la pena máxima para los inmigrantes que intenten entrar ilegalmente en el país, de los seis meses actuales a cuatro años de cárcel, y para los traficantes de personas, de los 14 años actuales a cadena perpetua.